Este mono me estaba cayendo demasiado bien así que decidí llamarlo Robert me gustaba mucho ese nombre aunque era un poco raro para un mono , tenía tanta hambre que lo primero que fue es mirar cual casa estaba vacía, me puse a mirar por un rato la casa de enfrente y vi que no había ningún tipo de movimiento entonces esa casa estaba vacia, crucé la calle normalmente la puerta y las ventanas estaban cerradas con llave, me puse a dar vueltas por toda la casa hasta darme cuenta que la puerta trasera estaba abierta, entre y un perro comenzó a ladrarme, era pequeño así que nadie lo habrá escuchado lo deje encerrado en el baño .Tome del refrigerador comida, jugo y unas bananas para Robert y cuando me di vuelta para irme había un cuadro de la princesa Sarah en la pared, yo la admiraba mucho así que decidí llevarmelo.
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La que no era princesa
FantasyUna ladrona de 15 años solitaria vive una aventura tras pasar de orfanato a orfanato y al final descubre algo que la impactará acompañame a ver esta historia y saber lo que pasa al final