Love Me Love Me ❤ (KyuSung)

Señor Autoestima

Fue hermoso, y lento, con sabor a Chocolate. Sus labios encajaban a la perfección con los míos, era simplemente mágico, algo que nunca había sentido en un beso de Siwon... No, no debo pensar en él. Este momento es demasiado especial para compartir mi mente con él.

El ritmo del beso era un delirio, y con el un par de suspiros. Enrede mis manos en su cabello castaño, sentí las suyas rodeando mi cintura. El aire frío de la calle se había desvanecido, las estrellas parecían brillar con más intensidad.
A falta de aire poco a poco el beso se detuvo.

— JongHoon, yo...

Pegué nuevamente mis labios con los suyos, aunque esta vez sólo fue por un par de segundos.

— Te veo mañana.

^×^×^×^

Kyuhyun y yo pasamos una excelente tarde en la librería, nos tocó acomodar un nuevo cargamento de libros infantiles y resultó increíblemente entretenido. Bueno... Todo era genial a su lado.

Tanto así que esta vez había sido él quién me había invitado a su departamento.

Ahora estaba en él, es pequeño y cómodo, las paredes son color crema, tiene orden y limpieza. Es muy bonito.

— Gracias. — Respondí al vaso con refresco que me extendió. — Parece un lugar bastante cómodo.

— Lo es, lo prefiero a tener que vivir con alguno de mis padres.

— El típico chico rebelde.— Solté en tono cantarín seguido de un suspiro, fui directamente al librero que estaba en la pared. Un enorme libro de cubierta roja y letras doradas llamó mi atención, deje de lado mi refresco y lo tomé. Era algo pesado.

— ¿Medicina? — Abrí los ojos como platos y me giré a verlo. — ¿Te gusta la medicina?

-— En realidad... Es por eso mis dos empleos. Quiero tener los suficientes recursos para llegar a ser Médico.

¡Oh por dios! Sonaba fantástico. Y apartando la idea de que, obviamente, lo lograría, apuesto a que Kyuhyun se vería guapísimo con su bata blanca, concentrado, inteligente...

¡Demonios!

— Kyu...

— Tal vez sea tarde. — Lo noté un poco apagado al decirlo. No debería pensar así, el Kyuhyun que yo conozco no piensa así

— Claro que no. Es una carrera muy noble, debes hacerlo si es lo que en verdad te gusta. Y estoy muy seguro que lo vas a lograr.

Le dediqué, desde mi corazón, la sonrisa más sincera, llena de seguridad.

— ¿Lo crees?

— Sí, y también creo que serías un excelente médico. — Un par de sonrisas se cruzaron, sus ojos inspeccionaron cada uno de mis rasgos y se detuvieron en mis labios, por inercia, pasé por ellos mi lengua.

— JongHoon. — Me llamó y coloqué mis ojos en él. — En verdad... Me encantas.

El corazón se me removió en el pecho, me quedé en blanco unos segundos.

Y sin más, otra vez tenía sus maravillosos labios atrapando los míos, primeramente de forma lenta y suave, aunque no tardamos mucho en volverlo salvaje, profundo y apasionante.

Un jadeo se me escapó cuando me cargó y enredé las piernas en sus cintura.

— Tú... Tú También me encantas, Kyu.

Confesé con la voz entrecortada, cuando sus labios jugaban en la piel de mi cuello, enviando una sensación placentera por todo mi cuerpo haciéndome arquear la espalda contra la pared, provocando que mi mente se desconectara de todo el mundo.