México [LH] ✿ One-Shots .

MEXUS

Esto es 100% MEXUS.

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Era un día demasiado soleado en la ciudad de Monterrey, Nuevo León.

—¡Adj! ¡Qué día! —, grita aventando la mochila hacia el sillón, acababa de llegar de la escuela. Fue hacia su cuarto y tomo del ropero su típica ropa. Ese día iría a trabajar junto con su padre a la plaza de los mariachis. Estaba preparado. Entro al baño, se ducho, y se cambio con su típica ropa de mariachi, se puso su sombrero y tomo la guitarra. Era hora de relucir.

En cuanto salia de la casa...

—¡Pedro....! —, grito su hermana —¿A donde chingados vas chamaco? — lo tomo del sombrero antes de que saliera de casa. —¡Auch! —, Pedro fruncio el ceño y la miro

—¿Ahora que quieres?—, pregunto fastidiado

—¡No respondas así escuincle! ¡Te hice una pregunta!— dijo su hermana.

—¡Voy a trabajar! ¡Mi apa' me espera en la plaza de los mariachis! — Contesto enojado.

—¡Uff, acabas de llegar chamaco y ya te quieres ir! ¡Nisiquiera has comido! — Dijo preocupada. Aveces su hermana exageraba.

—Por eso no te preocupes mi compa y yo fuimos a los burritos en la salida — Sonrió.

—Bueno, eso me calma. Solo recuerda tener cuidado Pedro...— Sonríe — ¡Ah! Y haber si te consigues una novia de una vez! ¡Ya casate!

—JAJAJAJA, ya te dije hermana~ eso nunca! — Sonrió y salio de casa. Toda la gente le saludo amable, llego a la plaza de mariachis y encontró a su padre. Francisco Sanchez.

—¡Hey chiquillo! ¡Ven acá! — Su padre lo llamo.

Pedro corrió hacia su padre y lo abrazo

—¡Hola pa'!

—¿Estas preparado? — Su padre pregunto.

—¡Màs que preparado! — contesto él norteño alegremente.

El grupo de su padre se dedicaba a cantar serenata. Y esa vez irían a una casa en compañía de un rubio. Un gringo que paso por ahí y los contrato.

—¿Y pues a donde vamos? —, Pregunto Francisco mirando al rubio, de complexión un poco delgada, rubio, una altura mucho más pequeña que Pedro, comparado con Pedrito él rubio era una pulga.

Un muchacho de unos 14 o 15 años ¿Qué demonios hacia? ¿Le pediría serenata a una mococosa?, no había nada más que seguirlo. Estaban caminando junto a el por callejones, él rubio se veía avergonzado con un ramo de rosas en la mano.

— Es una casa, esta por aquí —, si, era gringo, a juzgar por su acento no era de aquí ni de toda habla hispana. Era gringo. — Por cierto, my name is Alfred.

Alfred.

—Ajijo ¿Usted es de Estados unidos? —Pregunto Francisco.

—Yes, of course, i'm american —Contesto sonriendo.

Siente esa flecha en su corazón, que devora el alma.

—¡Ya llegamos! —Pararon frente a una casa. Era bonita y grande. El americano tocó la puerta.

Pedro se pego con una mano en la frente ¿Acaso no sabia que se debía hacer primero?, bueno, es aceptable es un gringo.

Pedro se sentía extraño, por alguna razón extraña sentía que esto acabaría mal. Empezaron a tocar, la de “Cuando tu me besas”, la chica salio, era una chica delgada, peli negro y ojos verdes. Era realmente bella; Pero algo que le dio mala espina a Pedro era una cosa; La cara de desagrado de la chica. En lo alto de un balcón no tan lejos del suelo. La chica se veía aterrada. Él americano saco una pequeña cajita de su bolsillo y la miro a los ojos, se veía tan romántico.