Jane
Entramos a nuestra cafetería favorita y saludamos a los empleados, pues siempre que podemos venimos y eso desde que tengo memoria, por esta razón nos conocen.
Mi padre se queda hablando con la dueña y nos dice que nos sentemos pero en el transcurso alguien llama a Nathan. Este voltea y me dice que siga. Lo hago. En eso se escucha la campana del lugar y segundos después escucho a alguien decir mi nombre. Me giro y veo a Ian que viene con la chica que le hablo a Nathan y con un chico que no logro identificar. Viene hacia mi y me saluda con un beso en la mejilla. en seguida me pregunta qué hago aquí.
-Vine a desayunar con mi familia, ¿Y tu?
-lo mismo- me dice sonriente. volteamos cuando escuchamos como alguien aclara su garganta. Es el chico con el que viene.
-Oh, cierto. Él es Tomas, mi hermano y ella,- señala a la chica que esta hablando con Nathan- es mi hermana, Grace.
-em... - mi hermano se acerca- yo soy Nathan, un gusto- y así se presenta a los dos jovenes que tengo en frente de mi.- conozco a tu hermana.
-chicos, ¿Pasa algo?- MI padre llega y me mira a la espera de una respuesta
-eh, no, papá- dirige su mirada a los chicos y me hace preguntas con los ojos- ah, cierto. Ella es Grace- señalo a esta aunque no le importa porque esta ocupada hablando con Nathan.- él es Tomás- lo señalo y él hace un movimiento con la cabeza a modo de saludo- Son hermanos de él, Ian,- lo señalo- el chico con el que salí ayer. Ian el es mi padre. - posteriormente se dan la mano.
Es demasiada suerte que mi padre le sonria a un chico con el que salgo; y peor aún, es demasiada coincidencia que ellos llegaran al mismo restaurante. Son demasiadas rarezas que me asusta.
-Voy a la mesa- me dice mi padre-. Un gusto conocerlos- le dice a todos ellos y les sonríe... espera, ¡Les sonríe!
No es que mi padre sea un cascarrabias pero generalmente cuando nos topamos con amigos Ian o yo, él suele alejarse e ignorarlos.
- Ve a comer- me dice Ian-. No queremos fastidiar. te veo luego y luego hablamos.- me guiña un ojo.
-No fastidias y por supuesto que no voy a perderme verte y charlar contigo- le sonrió... espera otra vez... ¿Esta soy yo coqueta? me gusta como soy.
-¿Es un trato?
- Trato- me da la mano y me enseña esa linda dentadura suya.
Me alejo con mi padre y escucho que detrás de mí viene mi hermano. Llegamos a la mesa y nos sentamos. Me acomodo y cuando alzo la cara los dos me están observando sonrientes.
-¿Qué? - pregunto desconcertada.
-Te gusta- dice Nathan
-Le encanta- retifica mi padre
-¿Qué? por supuesto que no a las dos...
-Luego hablo contigo- imita Nathan a Ian con una voz falsa mientras mueve sus manos al costado de su cara.
-Claro, no me lo perderia por nada- le sigue mi papá "imitandome" mientras pone ojitos
-oh, te amo, Jane- sigue mi hermano con su misma actuación.
-No, yo te amo más, Ian.- le sigue mi padre. Se ríen ambos ineptos.
-Basta, puede escucharnos. - Les digo sin poder evitar reírme, pues verlos hacer estupideces como estas es lo que causa. Risa.- y quizas me atrae, pero como demonios me va a gustar si lo llevo conociendo 2 días.
-Jane dijo "demonios", esto será fuerte.
-Lo sé.- se burlan
-Agh... ya comamos- dijo fastidiada cuando traen la comida.
Algo es seguro, estos dos son un fastidio e Ian me atrae. Espero por favor que ninguna de las dos me haga querer irme lejos.
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Que pasaría si...
Ficção AdolescenteJane es una chica feliz, aventurera, que goza de las maravillas del mundo razón para dejar de sonreír. Ian es misterioso, un chico listo para vivir y sentir, su único impedimento es que no quiere hacerlo solo... ¿serán un buen dúo para experimentar...