하나

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KIM SEOK JIN POV

A pesar de que ya sería mi tercer año en el campus deportivo, me encontraba muy nervioso y entusiasmado. La idea de poder pasar con mis mejores amigos todos los días y hacer lo que más amaba en la vida me llenaba de alegría. Y este año como capitán del equipo de natación de la universidad, tenía la obligación y la presión de obtener la mejor anotación, sino, tendría que olvidarme de las nacionales.

—¿Dónde está el capitán más sexy del campus? —Comentó el pequeño Jimin mientras envolvía mi cintura con sus brazos, formando así un abrazo.

—¿Estás listo? —Dijo Tae. Ellos dos eran mis mejores amigos. A pesar de que ninguno de los tres compartíamos el mismo deporte, habíamos formado una grandiosa amistad, y todo se debía a que corríamos en el mismo horario. Se podría decir que si no fuera por la pista de atletismo nuestra amistad nunca hubiese existido.

Hablemos un poco de Jimin. Se había teñido el pelo de gris el año pasado, tenía los ojos finos y una estatura baja que hacían que el chico mantuviera una apariencia tierna. Era una de las personas más alegres y con el corazón más puro que había conocido en este lugar. Jimin también había adquirido una manía por abrazarme cada vez que me veía después de mucho tiempo, lo cual se me hacía una acción muy bonita.

Por otro lado tenemos a Tae, llevaba con orgullo sus cabellos castaños, con un peinado alborotado. Un chico extrovertido, y con un comportamiento infantil. A diferencia de Jimin, Tae era de la misma altura que yo, lo cuál era divertido ya qué podíamos molestar al pequeño en varías ocasiones.

—Eso creo. —Respondió a la pregunta de Tae.

—¿Eso crees? Jamás te había oído decir algo sin seguridad.

—¿Qué le han hecho a nuestro Jin?

—Es que ya es distinto. Es mi último año como un simple nadador. Ya soy capitán, pero no estoy seguro de ser un bueno...

—¿Qué? —comentó sorprendido Jimin.

—¿Comenzaste a consumir alguna droga que te hace estúpido? Serás un buen capitán, incluso hasta mejor de lo que fue el estúpido egocéntrico de Siwon.

—No exageres. —suspiró. —Sólo trataré de dar lo mejor de mí, sin importar las comparaciones que hagan con Siwon...

—Mírale el lado de bueno. El año que viene ya serás todo un superior. Y podrás dar ordenes y entrenar a los novatos.

—Y tendré muchísima mas presión y estrés. —dijo de malagana.

Llegaron a la sala en común que daba a las habitaciones. Subiendo las escaleras se encontraba una pequeña sala con un par de sofás, una televisión y un refrigerador. Ahí pasaban el rato antes de acostarse. Ya que estaban en habitaciones diferentes.

—Miren quién está ahí. —Comentó Tae. Sentado en uno de los escalones de la escalera estaba Namjoon. —Ya quiero que comiencen las quejas con los compañeros de habitaciones.

—No me gusta estar solo. —Habló Jimin. —La habitación es muy grande para mí.

—Escuché que habría cambios. Deben estar en esa cartelera. —se acercaron a las carteleras que estaban en la pared cerca de los baños. Y comenzaron a leer en tres hojas. —¡Oh! —Exclamó Jin, para luego comenzar a reír a carcajadas de una forma muy exagerada, que sin dudas llamaba bastante la atención de los demás.

—¿Qué pasa? —Preguntó Tae.

—Tu...tu compañero de habitación...   —Trató de calmar su risa. —Es Hoseok...

—Oh... No le veo la gracia. —Sus mejillas habían quedado algo rojas.

—¿Y el mío? —intervino Jimin.

—No lo conozco. —se volvió a fijar. —Es un tal Jeon JungKook. Supongo que es de primer año. Jamás he oído de él.

—Yo tampoco.

—¿Y tú, tienes un compañero?

—No, no tengo ninguno. Creo que tengo suerte, en los tres años que he estado aquí no he tenido ni un solo compañero de habitación.

—Que aburrido. —Dijo Tae.

—Bueno, no todos tienen la suerte tuya...

—No a todos unos toca un gran compañero como Hoseok. —Jin le guiñó un ojo, mientras que Jimin intentaba levantar una ceja en plan coqueteo, pero no pudo, se le levantaban las dos.

—Ay sí, si. —Miró a ambos lados, como buscando a alguien. — Deberíamos ir a nuestras habitaciones. Pronto pasaran lista, y no quiero problemas el primer día.

—Estoy de acuerdo contigo. Además mañana empezamos temprano con las practicas.—añadió Jimin.

—Bueno, entonces nos vemos mañana chicos. —dijo Jin mientras comenzaba a subir los escalones de la escalera, y se dirigía con prisa a su habitación. Cuando llegó a la puerta, sacó las llaves de su bolsillo y abrió la puerta. —Nada ha cambiado por aquí. —tiró su bolso sobre la silla y sacó de él un juego de sabanas y una cobija. —Pongamos un poco de orden aquí. —Tendió la cama, y vació su bolso, ya que había sacado toda su ropa, y la había colocado en el armario. Después de que tuvo la habitación algo presentable se sentó en la cama.

Había comenzado a sudar a causa del esfuerzo que había hecho moviendo algunas cosas de su anterior lugar, para ponerlas en otro más agradable a la vista. Se quitó la camiseta, dejando al descubierto su abdomen y pecho muy bien trabajados. Se paró y se acercó al armario para buscar otra ropa; un pijama quizás. En ese momento el ruido de una puerta abriéndose llamó su atención, iba a dejarlo pasar, sino fuera que esa puerta abriéndose era la de su habitación. Por ella pasó un chico de cabellos teñidos de un color blanco, y una sonrisa encantadora, y tan blanca como sus cabellos.

—Soy Jackson, y por lo que veo seremos compañeros de habitación. —Se quitó los zapatos y los dejó en la entrada. Atravesó la habitación y dejó sus cosas sobre la cama que estaba vacía. —Por cierto, linda espalda. —No dejaba de sonreír.

«Al parecer mi suerte de no tener compañero de habitación ya no existe», pensó de malagana.

¡Estúpidas Etiquetas! [MultiShips]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora