Capítulo 1

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-Se levanta de su silla en acto de reflejo. -¡Tienes algún problema! -grita furioso.

-¡Si, Mi problema eres tú!-grito y siento como las lágrimas que 2 minutos antes se habían esfumado resurgen y caen de mis ojos sigilosamente.

-Cris - la voz de mi compañera se escucha casi en un susurro pero yo la ignoro.

-Eres un GILIPOLLAS. -grito y levanto la mano para dar le una bofetada, pero noto como alguien me coge esta, noto como alguien tira de mi con fuerza y deduzco que es mi compañera.

-¡Cris! -su voz está vez tiene más fuerza

-Dejame... -replico

-Mi compañera me suelta y toma aire

-Un chico se pone entre el y yo, le intento apartar sin ni si quiera mirarle la cara, porque sólo pienso en que quiero dar una bofetada y gritarle todo lo mala persona que es a mi ex.
El mismo chico me coge como un saco de patatas y me lleva hacia fuera.

-¡Que pasa chicos! -Esa voz era la del profesor de inglés el más aterrador en toda la escuela por su mal carácter.

-El chico misterioso me deja en el suelo

-Nada profesor -digo yo intentado no mirarle a la cara e intentando que mi voz sea lo más normal del mundo y no como la de una niña llorona

-Solo estábamos... -su voz era distinta, no la había oído nunca

-¡A vuestros citios!

-Veo como el chico misterioso se dirige a lo que es mi ex novio y le susurra algo al oído, acto seguido se marcha de clase y yo me encaminó a mi sitio, me vuelvo a girar para ver a mi ex novio que no dice nada, que simplemente me mira.

Seguramente le ara frio, ya que estamos en septiembre, pero lo tiene merecido por haber me puesto los cuernos.

Me giró algunas veces mas en toda la hora y no puedo evitar preocuparme por el.

Al finalizar la clase el coge su mochila y sale de la clase a grandes zancadas.

Yo hago lo mismo cojo a mi compañera y tiro de ella hacia el piso de arriba porque necesito hablar con alguien a solas.

-Cris, espera, nos toca gimnasia.

-Le lanzo una mirada de súplica.

-Esta bien -susurra

Subimos las escaleras y giramos a la izquierda, después giramos a la derecha en silencio y miramos que no hay profesores, nos sentamos en una esquina y yo lo único que quiero hacer es llorar.

-Cris tranquila no merece la pena llorar por su culpa, de verdad. Sabes que está noche nos vamos de fiesta si te parece bien y te olvidas de ellos, si ellos no han tenido tiempo o no han querido pensar en ti a la hora de hacer lo que hicieron tu tampoco pienses en ellos.

-La miro, asiento y me doy cuenta que tiene razón.

-Tío te lo dije, te dije que te iba a pillar. -La voz del chico misterioso y sus pasos subiendo las escaleras acompañado de alguien se escuchan cada vez más cerca y yo pido que no vengan aquí.

-miro a mi compañera me llevo el dedo índice a la boca-Shshh y me asomo en la esquina

BESOS QUE ASESINANDonde viven las historias. Descúbrelo ahora