La hija de Tony y Steve(Loki y tu)

¿Yo puedo intentarlo?

Loki se quedó en silencio.

-_________ ten cuidado-

Peter se colocó frente a mi, mire a Bruce, había levantado la mirada justo en el momento en el que le había pegado a Loki.

-¿Quien eres tu?-

-Eso no te incumbe-

-Ahora que recuerdo, no te cayó una muralla-

Loki apunto su lanza hacia Peter y con un golpe de su rayo, Peter cayó lejos. Se acercó a mí.

-Eres muy valiente niña-

-Oye Loki-Mi padre apareció frente a la entrada en su traje, apunto con su mano a Loki- Creo que no has aprendido la lección todavía-

-Tranquilo hombre de metal-Dijo sin quitarme la mirada de enzima- Ya me voy, solo quería ver qué tanto aguantaba su mascota, pero creo que encontré una nueva distracción-

Sentí un escalofrío recorrer mi cuerpo, Loki tomo mi mano y le dio un suave beso, entonces golpeó la lanza contra el suelo, una especie de neblina verde lo cubrió por completo y luego desapareció.

Miré mi muñeca confundida. Entonces mis padres se acercaron. Stark le pidió a Jarvis que me escaneara, mientras que mi otro padre hablaba con Bruce. Natasha no tardó en llegar.

-Peter-Me acerque a él apenas Jarvis termino de examinarme-

-_________-Se sacó su máscara-¿Estás bien?-

-Si, no pasó nada, tú cómo te encuentras-

-Me dolió un poco el pecho, pero estaré bien-

-¿Así que el famoso hombre araña?-Dije sonriendo-

-¡Peter!-

Gwen se detuvo al vernos, su mirada paso de uno en otro, no fue difícil atar cabos.

-¡Tú!-

Peter se ganó delante de mí. Mis padres se quedaron en silencio observando. Natasha estaba al lado de Bruce y Clint, quienes parecían entender mejor que yo lo que sucedía.

-Tranquila Gwen, no hagas un escándalo-

-¿Gwen?-

-Bien que nos engañaste a todos-Dijo molesta-¿Cómo es posible que fueras tan mala en todas las materias?, Obvio lo fingias solo para estar cerca de el-

-¿Que?-Dije molesta- ¿Crees que todo esto es por Peter?, para tu información, lo menos que me interesa es conseguir un novio-

Peter seguía entre medio de nosotras. No fue difícil correrlo con la fuerza que tengo.

-Eres una maldita mentirosa ________-En ese momento sentí como golpeaba mi mejilla-

-Oh, no debiste hacer eso-Dije levantando mi mano-

-Alto jovencita-

Mi padre Stark tomo mi muñeca, evitando que la golpeara. Me quedé en silencio. Las miradas se posaron sobre mi. Papá me sostenía con el guante de su traje, por lo cual era imposible safarme.

-Te quedas con ella solo porque tiene poderes y unos padres iguales a ti-Peter miro al suelo en silencio- Para mi todos ustedes son unos fenómenos-

-Sueltame-

-No dejaré que hagas una estupidez-

-No pretendo hacerlo-Dije evitando sollozar-

Mi padre soltó un pequeño suspiro, soltó mi muñeca, me acerque a Gwen quien detrocedio instintivamente.

-Mas vale que te disculpes con ellos, porque ellos son los héroes, yo por otra parte podría no ser tan buena persona-

Después de decir eso salí del gimnasio lo más rápido posible. Llegué a la motocicleta de papá.

-Jarvis, sácame de aquí-

-Entendido señorita-

La motocicleta anduvo en piloto automático, hasta llegar a un gran árbol, que se encontraba dentro del parque más grande de la ciudad. Me senté a los pies del árbol. Tome mi rodillas y escondí mi rostro en ellas.
Mi vida como una chica normal había acabado. Tenía sentimientos encontrados. Por una parte me sentía triste, también me dolía la manera en que me miraron cuando intenté defenderme de lo que Gwen me había hecho, me faltó el respeto, no pretendía pegarle con toda mi fuerza, pero me miraron como si me acabara de convertir en Hulk.

-No es fácil ser la oveja negra-

Di un pequeño salto, limpie mi rostro lo mejor que pude y levanté la vista. Loki se encontraba frente a mi, tenía su cabello despeinado, llevaba una polera de color verde claro, la cual tenía unos botones en la parte del cuello, los que llevaba desabrochados y unos pantalones negros. Choque mis muñecas instintivamente.

-Tranquila no vengo a pelear -Dijo levantando sus manos-

-Es una lastima porque yo sí quiero, por tu culpa todo el mundo sabe quién soy, ahora no podré llevar una vida normal...-

-¿Y eso es algo que de verdad quieres?-Dijo cruzándose de brazos-¿De verdad ser normal es tan entretenido?-

-Tu jamás lo entenderías-

-Puedo intentarlo-

Quizás se debía al tono de su voz, o como se veía con esa ropa tan normal y modesto, pero parecía ser sincero. Choque mis muñecas para que los guantes volvieran a su forma original.