15 días, para que sea mi novia {Justin Bieber y tú}

Capítulo 16

Me desperte por el sonido de mi tonta alarma y me removí entre las sabanas mientras recordaba aquello que había sucedido con Justin. En verdad lo amaba, amaba su forma de besar, y aquella manera de alegrarme los días con una simple sonrisa. Simplemente lo amaba y era hora qué dejara de mentirme a mi misma.

Me levante de mi cama y camine hacía el baño. Me desvestí y adrente a la ducha. Luego de una corta ducha salí y me cambíe para ir al colegio.

Baje a desayunar y me encontre con Justin ya desayunando.

- Buenos días, ángel- dijo dejando un beso en mi mejilla.

- Buenos días, ¿aún duermen?- dije refiriendome a Jeremy, Pattie, Jazzy y Jaxon.

Justin asintío y coloco frente a mi una taza de café y tostadas.

-Desayuna y luego vamos al colegio.

Luego de unos minutos ya nos encontrabamos llegando al instituto. Justin estaciono el auto y bajo para abrirme la puerta.

-Qué caballero.

-Sólo contigo, shawty.

Lo mire y ambos sonreímos, luego, entramos cada quien por su cuenta al instituto.

A lo lejos ví como Rixon se acercaba a mi con una patineta sobre sus manos.

- ¡Hey linda!

- Rixon, ¿qué tal?- le pregunte con una sonrisa.

- Fantastico, ahora que te encuentro.- Rixon era demasíado lindo, a decir verdad. Si lo que quería era conquistarme, lo estaba haciendo a la perfeccion.

- Pues, gracias.. creo.

- ¿Qué haras mañana por la tarde ?- ¿Estaba invitandome a salir? Si eso era, aceptaría. No tengo nada por perder, y sí, se lo que piensan.

Justin

Pero dejenme decirles que jamas nos etiquetamos como novios, por lo tanto yo soy libre de hacer lo que quíera, aún que sólo quiera estar con el. Tal vez lo de Rixon sólo se trataba de amigos. En ese caso saldría con el.

Estaba por contestar cuando una voz masculina lo hace por mi.

- Estara ocupada conmigo, si sabes a lo que me refieron- dijo Justin haciendo un baile con sus cejas.

Rixon sólo lo miro con cara de pocos amigos y se voltío para seguir con su camino. Mire a Justin confundida y el frunzío el ceno.

- ¿En verdad ibas a salir con el?- pregunto sin agrado.

- ¿Porqué no? Parece amigable.

-Porque eres mía.- aquello pareciera que lo haya dicho sin pensar, pero, de todas formas tubo el mismo afecto hacía mi. En realidad no era suya, pero tenía un sierto compromiso hacía el. Eramos algo así como amigos con derecho, pero, ambos sabíamos que si alguno de nosotros salíeramos con alguien, nos enfadaríamos, por el sólo hecho de proteger lo "nuestro"

-El sólo hecho de que nos besaramos no quiere decir que sea tuya.

- ¿A qué te refieres?

- Si quieres que sea tuya tendrás que pedirmelo.