Cartas de un desconocido.

Racional

Cerré los ojos tratando de dormir.

¿Cuántos días habían pasado ya?

Me siento realmente mal, creí que decirle a alguien mi secreto me daría paz.

Pero realmente estaba muy equivocado, no había logrado nada más allá de orillarme a crisis nerviosas e impulsos llenos de pánico.

Me removi inquieto entre las ligeras sábanas que cubrían mi cuerpo.

¿Por qué me inquietaba tanto?

En realidad no había nada que yo pudiera hacer.

Si Kenny decidía decirle todo a Craig no podía evitarlo o cambiarlo.

Aparte no es como que Kenny estuviera obligado a cumplir su promesa, yo no soy nada para él.

Yo simplemente fui ingenuo al confesarme con él.

Pero...

Lo hecho, hecho esta.

¿No?

Frote con fuerza mis ojos con la esperanza de relajar mis párpados.

Yo no soy lo suficientemente bueno para lograr  cambiar la visión que Craig tuviera actualmente de mí.

Eso no... No estaba en mis manos.

Suspire con fuerza.

Realmente odio el insomnio, esa maldita sensación que me oprime el pecho, con tanta fuerza que siento que al cerrar los ojos moriré.

Esos pensamientos tan confusos que terminan en sensaciones amargas y dolorosas, que lentamente me hacen parte de ellas, me desdoblan e inmovilizan hasta hundirme.

¿Por qué no podía simplemente ser alguien sano?

¿Por qué no podía simplemente estar bien?

Me levante con cuidado, tratando de no hacer ningún ruido.

Cruce mi habitación sintiendo el frío subir desde mis pies a la cabeza.

Me relajo sentir el frío por todo mi cuerpo, cerré los ojos y decidido salí de mi habitación.

Realmente amo a Craig, realmente deseo hacerle saber como me siento, pero soy tan malo que estoy seguro de que me rechazará, estoy tan enfermo que seguramente se reirá de mi.

Nadie quiere estar con alguien como yo.

Y en el caso de que él decidiera estar conmigo, terminaría por cansarse de mi y dejarme al poco tiempo.

En cualquier caso terminaría solo, como siempre, con la única compañía de la ansiedad.

Con las mismas paranoias de siempre puesto que yo no soy alguien de bien, es imposible que alguien como yo encuentre algo similar al amor, solo me ecuentro con la lastima.

Solo me harían daño, o yo volvería imposible para alguien estar conmigo.

Nadie aguantaría mis miedos, mis inseguridades, todas mis paranoias, o la depresión y mucho menos la ansiedad.

Si yo no soy capaz de tolerarme, no puedo esperar a que alguien se enamore de mi, o que mínimo me quiera.

Seguro que Craig solo estaba conmigo por lástima.

-Uhg... - sin siquiera darme cuenta había bajado las escaleras.

Sentí un escalofrío recorrer mi espalda, e inquieto camine hacia la cocina.

Con el único objetivo de hallar mi paz, bebiendo tanto café que los problemas se fueran de mi mente.

Sonreí ligeramente complacido con la idea.