El entrenamiento

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Amaneció y Pan no estaba, supongo que se había ido con los chicos.

Me pregunto, a que hora se despertaran si cada ve que Pan pasa la noche en mi cabaña nunca esta.

Me levanté y me vestí, me agarré el pelo y sali.

-ɦoℓɑ.- dije.

-ɦoℓɑ como dormiste?- pregunto Félix.

-bien gracias.-

-y bien, cuando quieres comenzar?- pregunto Pan.

-ahora.- agarré una manzana y me la como en el camino.

-esta bien ahora te enseñaremos a ser una niña perdida.- me dijo Pan.

-esta bien, me gusta la idea.- le dije feliz.

Al fin voy a poder ser parte de ellos.

-empezaremos con el ataque sorpresa.- exclamo Pan.

-esta bien.- dijeron todos y yo me quede ahi porque no sabía como hacerlo.

-no sabes que es un ataque sorpresa?- me pregunto Pan.

-si, si lo se pero no se que estrategia tengan.- le respondí.

-Anika, aquí es Nunca Jamás, tu solo hazlo a tu manera, como una niña perdida.- dijo levantando una EUA y com una sonrisa malévola.

-esta bien.- me fui a esconder con felix.

-esta bien, supongamos que... Joe ven aqui (el lo obedeció) supongamos que Joe es el enemigo.- dijo y el desapareció.

-ahora que tenemos qe hacer?- susurre.

-cuando Pan "engañe" a Joe y el grite: "vamos chicos" salimos dramáticamente, con una mirada intimidante.- explico Félix.

-yo no se hacer eso.- le dije.

-hacer que?- Félix puso una cara... Perdónenme pero era sexy e intimidante.

-hacer eso, lo que estas haciendo.- reímos y Coll nos callo.

-shh.

-esta bien.- susurro Félix.

-ⅉɑⅉɑ.- reí levemente

-tu puedes salir con una mirada sensual.- dijo.

-y como hago eso?-

-no lo se eso es tu especialidad.-

Eso creen los demás? Qué ser sensual es mi especialidad? Wow.

-como asi?- pregunte mientras le daba la mirada más posesiva, y se sensual obviamente... ⅉɑⅉɑ.

-sentí que tus ojos me atrapaban.- dijo

En ese momento aparecio Pan... Déjenme decir que creo que llevan ensayando su mirada por años porque esa mirada no es de principiantes.

En ese momento pan grito y todos salimos... Lo mejor para el final.

Cuando todos voltearon sali caminando, tenía la capucha puesta hacia que me viera misteriosa, parecía un chico... Ese es el punto.

Mientras todos miraban me acerque y me quite la capucha.

Acerque mi nariz a la de Joe (el enemigo) y lo amenaze.

Después me posicione al lado de Pan para que dijera lo demás.

Todos se quedaron boca abiertos no sabía que decir.

-y? Qué les pareció... Lo se soy principiante pero...

-que?! Principiante? Estas loca? Era la mejor en esto!- dijo Pan.

-wow en serio eres experta.- dijeron todos al unísono.

-hasta me dio miedo.- dijo Joe.

Todos reímos.

-ahora que?- pregunto Félix.

-peleas!!- gritaron todos.

-esta bien peleas serán.- todos gritaron de felicidad.

-pe-peleas- (tragando saliva) pregunte.

-si, tu no tengas miedo de pegarles, son chicos, la ventaja es que ellos no temperarán.- Pan susurro la última parte

-esta bien.-

-una cosa más... Nunca pidas perdon, ese es el chiste de ser una chica pedida.

-esta bien ya entiendo.- Pan me dio un beso en la. Ica y rápidamente desapareció.

Me gusto mucho eso que hizo.

-quien empieza?- dijo Alex.

-Anika y Félix!- gritaron.

Félix se sonrojó un poco.

Cuando ibamos a empezar le dije:

-lo siento.- susurre.

Le si un patada en el costado, el ni se inmuto.

-eso es todo lo que tienes?- me trato de pegar con su palo pero lo esquive rápidamente.

-no.- salte y lo pise, lo empuje pero como sus pies estaban bajo los míos no se puedo equilibrar.

El cayo al piso e hice como si le fuera a pegar pero lo levanté.

-wow buena pelea.- dijo.

-gracias pe.-

Félix me agarro la mano y me la torció.

-nunca le des ayuda al enemigo querida.

El me aventó y sentí como alguien me agarraba y de la nada aparecí en la laguna de sirenas.

-que fue eso Pan?- le pregunte enojada... Yo quería seguir luchando.

-no quería que te hicieran daño, nunca sabes lo que el sentido de un chico perdido puede hacer.

-que?

-quien crees que mata a los animales para cenar?- creo que se refería a Félix.

-Félix?- pregunte

-exacto... Ahora siéntate.

Me senté al lado de el y recosté mi cabeza en su hombro, los dos contemplamos la hermosa luna que había y las estrellas también.

En busca de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora