Encuentro consuelo en las cosas tristes...
En las flores arrancadas,
secas y guardadas;
en los días que el sol se esconde.
En la música lenta...
con las palabras más profundas,
como lo desconocido del mar,
como tu esencia
y tu manera de pensar.
En la soledad de la madrugada,
donde se escucha la mudez de los pájaros,
de la habitación,
de la ciudad...
Donde solo se reproduce lo que tiene para decir la cabeza,
y esta en repetición pensarte
pensar en la vida,
en mis viejos,
en las amistades perdidas,
o que se apagaron sin explicación,
como el fuego de una vela recién prendida.
pensar en los miedos,
en los cambios,
en el temor a lo desconocido...
en lo difícil que es arriesgarse.
Qué difícil es
saltar al vacío
sin saber donde vas a caer.
si en tus brazos
o en el concreto...
más concreto
en esta vida nada es.
