Ya no queda nada. \\
Es de madrugada y todavía aquí,
intentado borrar la tristeza,
o pintarla de un color más alegre.
Todos caemos alguna vez, pocos se levantan,
otros se quedan a mitad del camino,
y los demás se consumen en el abismo.
Daría lo que fuera por poder sonreír como antes.
Pero, \\¿Cómo enfrentarse a si mismo sin salir dañado?
Vendería mi alma por estar junto a ti,
por qué solo tú me haces feliz,
por qué solo tú me comprendias.
Este dolor me tiene segando los ojos a la realidad, a las demás personas, por qué no puedo entender que no puedo obligar a alguien a estar conmigo.
Decías que quizás la vida no era para ti
pero que tenías miedo del futuro
decías que pensabas en mí
y perderte fue un golpe duro.
Que los para siempre son promesas que depende que los labios que las sellan serán eternas, o efímeras.
Y no sé si sólo es parte de tus juegos
o si realmente te has ido
si todo lo que he vivido era más que otro de tus engaños.
Te guardo rencor, pero no puedo dejar de querer, la idea de olvidarte no ha pasado por mi mente. Has dejado de mi, un cuerpo vivo pero con el corazón inerte.
Hay más recuerdos que estrellas en el cielo, me decías mirando el universo encima de nosotros y yo recuerdo lo feliz que era sin esto que me está matando.
También decías que no hay nada más bonito que la luna con forma de sonrisa , y para mí la luna solo es un columpio donde morir.
Dile a la muerte que no le tengo miedo,
más temor tengo a la vida,
soy alguien que escupe versos sin título,
y que decidió matarce en tu sonrisa.
La brisa que agita mi pelo se ha llevado también mis deseos de vivir.
Ahora pertenezco a la noche.
Lo siento por hacerte ver el mundo con mis ojos, yo te advertí del peligro de amarme.
Pero decidiste ignorarme y arriesgarte a besarme, sin saber que probabas el sabor de la muerte.
Quiereme fue un suicidio, por qué tengo mi corazón guardado en una caja fuerte, pero me gustaría entregarte estos versos (y un poquito de mi corazón).
