Solo una vez.
Solo una maldita vez le había ganado al heterocromatico ¿Y que le había quitado? Un pase para poder ir al hospital.
¿Por qué Todoroki querría ir al hospital?
Pateó su caja vacía con el papel en mano, al menos le había prohibido el paso al hospital durante un mes al bastardo.
— Tercer piso... — Leyó el pase una vez recostado en su cama. Recordó la vez que escucho hablar a Midoriya y Todoroki en la entrada charlando sobre su vida y como había ganado aquella cicatriz. — Su madre... Ugh... No podrá ver a su jodida madre durante un mes por mi culpa...
Una parte de él quería burlarse y gritar de felicidad y la otra lo carcomía de culpa, era un choque de emociones y el odiaba que le pasará eso.
Pero Todoroki no se lo había pedido de vuelta. Y tampoco es como si esperara que el heterocromatico le hablará.
Metió el papel arrugado a su pantalón y salió arrastrando los pies para ir a la sala común que compartían los hombres, de seguro ahí se encontraría Todoroki con los demás.
Acostumbraban hacer reuniones para jugar videojuegos, ver películas e incluso hablar de chicas.
A Bakugō no le interesaba nada de eso.
Llegó a la sala común encontrándose con Todoroki y los demás sí, pero no estaba solo, para su grata sorpresa habían invitado a las chicas y él estaba sentado aún lado de Momo.
— ¡Oh, Bakugō! — Kirishima empujó a la pelirrosa a su lado para saltar el sofá y correr hacia el rubio. — ¡Qué bueno que viniste, esto apenas va a empezar! — Bakugō no se quejó cuando su amigo paso un brazo por sus hombros y lo obligó a acercarse a los demás para sentarse enfrente de donde se encontraban sentados Todoroki y Momo.
— ¡Sigo yo! — Grito Kaminari tomando la botella vacía de vidrio que estaba en el centro y haciéndola girar, todos callaron y miraron la botella, Bakugō seguía sin decir nada con el ceño fruncido.
¿Cuánto tiempo llevaban jugando? ¿Y a cuántas mujeres ya abra besado Todoroki? Se preguntaba el rubio cruzado de brazos viendo la botella y luego al frente de el donde estaba el heterocromatico que parecía molesto.
Ambos cruzaron miradas incómodos, Todoroki desvió la mirada y Bakugō chasqueo la lengua mirando de nuevo la botella quien lo apuntaba a él y a Midoriya.
— ¿¡Qué con esa mierda!? — Se paró furioso alejando a Kirishima y provocando risas en algunos, el peliverde solo movía las manos negándose rotundamente.
— Tranquilo Bakugō-kun, tú no tienes que hacer nada. — Tranquilizó Uraraka tomando de los hombros a Bakugō y obligándolo a sentarse de nuevo.
Bakugō pareció tranquilizarse un poco hasta que la castaña siguió hablando.
— Deku-kun tendrá que hacer todo el trabajo. — Los demás comenzaron a reír mientras empujaban al peliverde, Bakugō intento pararse de nuevo pero su cuerpo no le respondía, empezó a gruñir y mirar mal a la castaña a su lado quien anteriormente lo había tocado.
— T-Te mataré, ca-cara redonda. — Murmuró apenas al hacer tanta fuerza, Uraraka comenzaba a sentir náuseas.
— ¡No quiero! ¡Kacchan va a matarme! — Grito Midoriya quien ya estaba cerca y seguía siendo empujado.
— ¡Te mataré si das un paso más! — Gritó Bakugō molesto y Midoriya no quería ir en contra de aquellas palabras.
Todoroki quien sólo estaba de espectador decidió intervenir pero se detuvo al recordar que a Bakugō le gustaba Midoriya, solo le quedaba ver como la cara del peliverde ya estaba a punto de tocar la del rubio, eso hasta que lo único que beso Midoriya a duras penas fue el puño de Bakugō en su cara golpeándolo.
Todos retrocedieron y las chicas fueron con Uraraka quien no tolero tanta fuerza que hacía el rubio y vómito.
— ¡Todos mueran, pedazos de mierda! — Grito sacando explosiones de sus manos. Camino a grandes pasos de nuevo a su habitación, definitivamente Bakugō odiaba aquellas reuniones.
No tenía por qué tolerar a aquellos idiotas ni sus tonterías, tampoco tenía que besar a nadie, estaba harto de eso, antes de entrar a su habitación escucho gritos de sorpresa y alegría.
Pronto le llegó un mensaje a su celular, al tomarlo dejó caer el pase del hospital al suelo chasqueo la lengua al recordar para que había ido en un principio a la sala.
Tomó el papel distraído por estar leyendo el mensaje que le había mandado Kirishima.
Era la razón por la que habían tantos gritos aún estando tan lejos Bakugō los escucho.
Arrugó el papel y lo hizo cenizas en su mano sin dejar más que una mancha negra.
Pelos de mierda:
K: Yaoyorozu-san acaba de besar a Todoroki, debiste de ver su cara. √√
ESTÁS LEYENDO
Box of Kisses. [TodoBaku]
FanficEl juego era simple. Quien besaba más personas al final se quedaba con los objetos de la caja. Los objetos de la caja y las ganas de ganarle al contrario era lo que los mantenía en el juego. - Todoroki x Bakugō.