"Entre Luz y Sombra" (Donghae x Fan) Cap. 2

33 4 1
                                    

Título: "Entre Luz y Sombra"
Duración: 2 / ??
Pareja: Donghae x Fan (Tu)
Apariciones: Lo verán a lo largo de la historia, aparecerán algunos nombres conocidos ^^
¡Apta para todo Público!

Narras Tú:

-¿Pero... que?- me pregunté al llegar al lado del arbol -¡Oye! ¿Donde estas?- dije en voz alta, no obtuve respuesta. Volví a casa y cerré la puerta. Cuando comencé a caminar a la cocina oí un estruendo en el piso de arriba, caminé rápido por las escaleras. Me acerqué a mi recámara, la ventana estaba abierta de par en par, las cortinas bailaban con el viento, los papeles que estaban en la valija con la máquina de escribir estaban regados por el suelo, cerré la ventana y comencé a juntar los papeles del suelo...


Sentí el aire que entraba por la ventana antes, y me giré lentamente, allí estaba abierta una vez más.

Luché con las cortinas color blanco y volví a cerrar la cortina.

-Esta casa es... extraña- dije trabando la ventana y girandome hacia las hojas.La cama estaba totalmente destendida, pero en el centro estaban las hojas apiladas. Me puse una mano en la frente, ¿Es que acaso estaba quedando loca?

-No te preocupes, solo es una pequeña broma- oí a alguien a mis espaldas, me giré exaltada, la ventana estaba abierta de nuevo y las cortinas bailaban con el viento. -¿Quien está ahí?- pregunté en voz alta haciendo de mi mano un puño. No obtuve ninguna respuesta. Suspiré y tendí la cama, cuando todo estuvo ordenado me dirigí a la puerta para ir a la cocina. Cuando dí el primer paso fuera de la habitación noté algo acariciarme el cabello, me quedé helada, tomó un mechon de mi cabello y dijo: -Huele bien- Oí una dulce risa detras de mi antes de que la puerta se cerrara. Mi piel se erizó, corri a la cocina, no entendía nada. Me mojé la cara y volví a tomarme la frente. -Debe ser... sueño... si, es eso... ¿El hambre tal vez?- dije y comencé a preparar mi desayuno, continuando con mi vida, tal vez aquello tan solo había sido una ilusión. Cociné algo de arroz, kimchi y vegetales, cuando todo estuvo en la olla comencé a hacerme un jugo de frutas. Fuí a la heladera y tomé algunas frutas, las dejé en la pileta de la cocina y busqué una jarra, fuí a tomar un cuchillo para pelar las frutas y cuando volví a la pileta donde había dejado las frutas... ya no estaban... -Pero... si yo las dejé aquí...- dije con los ojos bien abiertos- No no, debo de estar muy loca- Caminé de nuevo a la heladera, tomé más frutas y las dejé en la pileta, giré en busca de la jarra, no estaba. -Pero, yo la... ok ok ok... ______________ ¡Pon los pies en la tierra mujer!- me dije a mi misma. Busqué otra jarra y volví a la pileta. Las frutas ya no estaban ahí. Me giré hacia la entrada de la casa, no había nadie, giré nuevamente y vi sobre la mesa las frutas y la jarra perdida. Oí otra dulce risa a mi lado, pegué un respingo y miré a mi lado... no había nadie allí. -¿Quien...quien eres?- pregunté al aire. -Tu ya sabes mi nombre...- oí en mi oído, dí otro respingo y fuí a la puerta de entrada. Salí, tomé un poco de aire... "¡No no no no y no! Esto es imposible" pensé, moría de miedo, estaba confundida... Suspiré profundamente y entré de nuevo a la casa, en la puerta dije en voz alto. -Sinceramente no se quien seas, pero... esta es mi casa, por favor, no me hagas daño, yo tampoco lo haré, solo... dejame vivir tranquila, ¿Esta bien?- No obtuve respuesta y continué con mi desayuno, aquel día no ocurrieron más extraños eventos, aunque la sensación y hasta la respiración de algo contra mi oído quedó en mi memoria por el resto del día. Desayune a un lado de la máquina de escribir, prácticamente pasé todo el día escribiendo. Era como si mis dedos se deslizaran libremente por las teclas de la máquina, estaba inspirada, hasta que noté algo entrar por la ventana de mi habitación, era una pluma blanca, tan blanca como la nieve. Quedó apoyada en el suelo, y por mas que el viento intetase moverla ella se quedó allí. Miré por la ventana de la habitación, ya habia anochecido, el cielo estaba cubierto de estrellas, la brisa estaba fresca, miré a los arboles, una vez más, aquel joven estaba parado allí, esta vez con una rosa blanca en su mano. -¡Oye! ¿Que haces aquí?- pregunté- ¡Espera!- dije y corrí a la entrada, cuando llegué no había nadie, solo la rosa blanca que estaba sobre uno de los escalones de la entrada a la casa. Tomé la rosa entre mis manos, su aroma era fresco. ¿Que clase de persona aparecía y desaparecía al momento de acercarse dejando solo una rosa fresca? Entré a la casa y comencé a preparar la cena, aquel día tendría una bonita flor que me acompañase. Cuando estuvo lista volví a mi habitación con mi bandeja de comida. Me senté de nuevo junto a la máquina y esta vez puse algo de música. -Me gusta esta canción- dije mientras oía Happy de Pharrell Williams. Cuando dí las primeras bocanadas de fideos instantáneos, la música cambió. Pasó a ser una canción más romántica. -Ni que estuviera en medio de una cena romántica- dije y cambié de emisora, en la siguiente estaba la misma canción, en la siguiente tambien, y tambien en la que le seguía. -¿Pero que? Ok, sabes que... no oíré musica, listo- dije y apagué la radio. Al terminar de cenar, dejé los platos en la cocina y volví a mi cuarto, busqué un pijama, tomé un baño. El agua estaba realmente tibia, se sentía bien, todas las tensiones de mi cuerpo se liberaron, cerré los ojos y pronto sentí un chorro de agua fria golpear mi espalda. -Aishh- me quejé y salí de la tina. -¿Es que ya no puedo tomar un baño en paz?- pregunté en voz alta enfadada. Volví a mi cuarto con el pijama color celeste y rosa puesto, noté de nuevo aquella risa alejandose. Aun con la piel erizada volví a la cama con la máquina de escribir, una hoja estaba alejada de las demas. "La chica que ayer llegó a perdido un poco la paciencia con mis bromas, hoy comprobé lo bien que escribe, su cabello huele bien... Aun me intriga saber más de ella, solo puedo decir que me gusta como escribe...." La fecha era la misma que aquel día, 4 de abril... Miré la firma una vez más... -Lee Donghae...- dije en voz baja y noté algo acariciarme el cabello. No le di demasiada importancia, ya me estaba empezando a acostumbrar... Me recosté en mi cama, y sin querer me quedé dormida. Los pájaros cantaban, la luz del sol se colaba por las cortinas, abrí mis ojos lentamente. Frente a mi, un chico que me observaba. Abrí mis ojos más grandes y agudicé mi vista, me enderecé en la cama, el joven se había desvanecido. Me refregué los ojos, "Hermosa manera de empezar el día" me dije a mi misma ironica. Me levanté de la cama y me dirigí a la ventana, una vez más, aquel joven estaba allí, mirando a mi ventana, me saludó con su mano y caminó a mi entrada, corrí más que rápido a la puerta de mi habitación y me deslicé por la barra de la escalera, llegué más rápido de lo esperado. Cuando abrí la puerta, no había nadie... Cerré la puerta y al girarme sentí nuevamente una caricia en mi cabello. El timbre de la casa sonó, abrí la puerta sin ganas, y recibí un abrazo. -¿Que dia...- dije y miré de quien venía el abrazo-¿Zhoumi?- El chico se separó de mi y le sostuvo por los hombros. -¿Esperabas a alguien más?- preguntó serio -No, no- dije sonriendo- ¿Que haces aquí?-
Lo invité a pasar, Zhoumi era uno de mis más queridos amigos, lo conocí cuando entró por primera vez a la editorial, el joven chino no sabía donde quedaba la administración del edificio, lo guié hasta allí, francamente nos llevamos bien y amigos como esos no se consiguen facilmente. -Vine de visita, ademas de que fué un casi mandato de tu amiga Sulli- rió sentandose en una de las butacas de la cocina. -¿Porque no me sorprende?- reí- Ven que te muestro la casa- Así comencé un pequeño tour por la casa, cuando llegué a mi habitación me cambié de ropa en el baño mientras Zhoumi leía mis creaciones. Me puse algo cómodo, al volver a mi recámara, el chino leía las notas del anterior dueño de la máquina de escribir. -¿Lee Donghae?- me preguntó -Si, es el anterior dueño de la máquina de escribir- dije acercándome a la ventana, no había nadie en los los arboles... solo otra rosa. Bajé las escaleras corriendo, oía Zhoumi gritarme pero no le hice caso, al llegar a donde estaba la rosa, la tomé en mi manos, miré al frente, el joven estaba allí. -Hola...- me dijo sonriedo. Su voz... me era familiar. -Hola, al fin te dignas a hablarme- le dije. -Lo siento, pero...- dijo y miró a la ventana- Tu amigo Zhoumi te observa- agregó. Miré hacia la ventana de mi habitación y dije: -Si... espera... ¿Como sabes su nombre?- pregunté, al girar al verlo de nuevo, el chico ya no estaba.


Fin Cap. 2

Comentario+Votacion:Actualizacion 

Marii



"Entre Luz y Sombra" (Donghae x Fan) Where stories live. Discover now