Capitulo 49

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(En el cuarto de Ámbar)

Ámbar: ¿Me vas a decir por qué estás acá? - Dice enfadada. - Igual no entiendo para qué venís a mi casa cuando creés que soy tan mala persona.

Simón: Ámbar, perdóname.

Ámbar: ¿Vos realmente pensás que podés venir aquí y pedirme perdón después del papelón que me hiciste pasar en el Roller?

Simón: Lo siento muchísimo Ámbar pero te escuché hablando con Matteo en los lockers y pensé que Matteo y tú se estaban burlando de Luna y de mí.

Ámbar: ¿Burlándonos de vos y de Luna?, ¿me podés decir que escuchaste?

Simón: Escuché como hablaban de que tenían que hablar y toda la cosa, de que se habían besado.

Ámbar: ¿Vos me estás cargando? Con Matteo ensayábamos para una obra de teatro del Blake que hacemos con Lunita. - Dice un poco más tranquila.

Simón: Ahora lo sé, por eso quería disculparme contigo. Te juro que no pienso las cosas que dije pero estaba realmente enfadado.

Ámbar: Sos muy buen amigo con Lunita pero si pensás tan mal de mí por una conversación no creo que podamos ser amigos.

Simón: No fue solo por Luna. -Dice sonrojándose algo que le extrañó a Ámbar.

Ámbar: ¿De qué hablás?

Simón: Yo escuché cuando Matteo te preguntaba si estabas enamorado de otro.

Ámbar: ¿Y eso que tiene que ver con...? - Dice hasta que entiende porqué el enojo de Simón. - Vos estabas celoso de ese otro chico?

Simón: No, no estaba celoso del otro chico.

Ámbar: ¿Me podés decir de una por qué estabas tan furioso? - Dice perdiendo la paciencia porque no entendía nada.

Simón: Pensaba que yo era el otro. 

Ámbar: ¿Vos estabas celoso de Matteo? Simón, ¿vos gustás de mí? - Dice feliz.

Simón: No lo sé, solo sé que me puso muy mal pensar que te besaste con Matteo.

Ámbar: Osea que estabas celoso. ¿Siempre gustás de tus amigas?

Simón: ¿Somos amigos?

Ámbar: Más que eso, somos pareja. -Dice y ve la cara de confusión de Simón. -De pista, somos pareja en la pista. 

Simón: Entonces, ¿me perdonas?

Ámbar: Sí, pero estás a prueba. 

Simón: Me parece bien. - Dice y la abraza, algo que les vino muy bien a los dos hasta que Luna los interrumpió.

Luna: Me parece que ya se arrreglaron. -Dice riendo. 

Ámbar: Lunita, ¿qué querés? - Dice un poco enfadada por que los había interrumpido.

Luna: Mi mamá me mandó a invitar a Simón a cenar. ¿Te quedás?

Simón: Sabes que no puedo rechazar la comida de tu mamá. - Dice riendo.

Luna: Ámbar, ¿quieres venir también a cenar con nosotros? 

Ámbar: ¿No le importa al personal que cene con ustedes?

Luna: Claro que no, estás invitadísima. -Dice riendo.

Ámbar: Bueno, está bien. ¿Vamos?- Dice y bajan los tres a cenar.

Luna la había invitado a Ámbar a cenar porque su madre le había dicho que la señora Sharon había salido esa mañana por un viaje de negocios y no regresaría en una semana, aunque la realidad era otra. Rey había encontrado información valiosa sobre la identidad de Sol Benson y habían ido a comprobar si esta era cierta.

(En el Jam&Roller)

Nina, Gastón y Matteo estaban intentado planear algo para poder averiguar que pasaba con Tamara, pero este último solo podía pensar en la "Chica Delivery" y en el guitarrista. La verdad que le había extrañado mucho que Ámbar no estuviera, pero mucho más la actitud de Simón. Estaba seguro que algo había pasado entre Ámbar y Simón después de que Nina y Gastón le contaran lo que pasó antes de que Luna  él llegaran,  pero no podía descifrar el motivo. Por eso, decidió dejar a Nina y a Gastón solos en la cafetería del Roller e ir a llamar a Luna para saber que había pasado con Simón.

Gastón: ¿Vos sabés que pasaba con Simón?

Nina: No, la verdad que me sorprendió su actitud.

Gastón: Seguro Ámbar le hizo algo, Simón no es así.

Nina: Ámbar no siempre tiene la culpa, igual y Simón malentendió algo o tuvo un mal día.

Gastón: Tenés razón, además que Ámbar está diferente.

Nina: ¿Diferente?

Gastón: Sí, más humilde. Desde que vos y ella son amigas cambió mucho.

Nina: Yo no creo que Ámbar haya cambiado, es solo que ahora no tiene miedo de mostrarse tal y como es.

Gastón: Cada vez me sorprendés más, Nina. 

Nina: ¿Yo te sorprendo? 

Gastón: Sí, sos tan buena e inteligente. Tenés una sensibilidad especial. - Dice mirandola a los ojos.

Nina: Yo no-no creo que tenga nada especial. - Dice bajando su mirada.

Gastón: Sí que sos muy especial, a veces me recordás a Felicity. - Dice riendo por su comentario ya que para él es imposible que Felicity y Nina sean la misma persona. - Oye, hace tiempo que no postea nada, ¿le habrá pasado algo?

Nina: No sé, igual y no tiene inspiración. A muchos escritores les pasa eso. Leí un articulo en una revista científica que decía que al menos un 78% de los escritores sufren al menos una vez en su vida un bloqueo que no les permite escribir.

Gastón: Pues espero que vuelva a escribir pronto, a mí me encanta leer sus posts.

X: ¿Ya andás hablando de Felicity?

Nina y Gastón: ¡Matteo!  -Dice sorprendidos ya que no se esperaban que su amigo regresara tan pronto.

Nina: ¿Ya hablaste con Luna?

MAtteo: Sí y  mi "Chica Delivery" me dijo que vayamos a la mansión para planear lo de Tamara todos juntos.

Gastón: ¿Todos juntos?

Matteo: Sí, Ámbar y el guitarrista ya se amigaron. 

Nina: Bueno, voy a por mis cosas al locker. - Dice para luego irse a los losckers.

Matteo: Así que hablando con Nina de Felicity, ¿cuándo vas a dejar a la chica imaginaria y buscarte una de verdad? Te lo digo por tu bien amigo, Felcity es solo una ilusión. Tenés chicas a tu alrededor que mueren por estar con vos y vos no le das bola. 

Gastón: Vos sabes que yo necesito que haya algo más, una conexión. Como lo que me pasa con...- Dice pero Matteo le interrumpe.

Matteo: Felicity, ya lo sé amigo. Ojalá vieras que hay chicas que realmente valen la pena muy cerca de vos.

Gastón: Igual veo más de lo que vos creés. - Dice mirando por donde venía Nina.

Nina: Ya estoy, ¿vamos?

Matteo: Vos primero amiga.- Dice haciendo que Nina se riera mientras que Gastón seguía pensando en lo que recién hablablan.

Nina, Matteo y Gastón se dirigieron a la mansion charlando y riendo en el camino. Llegaron justo cuando los Valente, Smón y Ámbar tomaban el postre, así que Mónica los invitó a sentarse con ellos para conocer mejor a los nuevos amigos de su hija y para que comieran algo con ellos. Luego de terminar el postre fueron todos a la habitación de Ámbar para planear qué harían para saber que pasaba con Tamara. Tras charlar y discutir ideas por un largo tiempo, lograron encontrar la solución perfecta. Ya estaba todo listo, mañana empezaría la "Misión Tamara".



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