Capítulo 1:Yoonji

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La luz roja lo mareaba, el perfume fuerte y barato que danzaba por el aire junto al humo del cigarro retorcían su estomago, nunca se había sentido tan incomodo. Ese lugar era, a su vista, repugnante.

Sostenía en su temblorosa y sudada mano el papel con el nombre de aquella mujer de la que tanto le habían hablado.

"Yoonji" susurró Jimin, era un bonito nombre.
Sus amigos de la universidad, quienes frecuentaban prostibulos como en el que se encontraba, decían maravillas ella chica:

"Es tan hermosa, podría ser sin problemas una idol no entiendo que hace trabajando como acompañante"

"Si que sabe chuparla eh"

" Su cuerpo es wooow"

Por eso el pequeño rubio solo sentía curiosidad por ella, y por supuesto que también estaba nervioso, pues nunca antes había estado con una mujer, nunca besó, abrazó o siquiera tomó la mano de alguna, y muchos menos había tenido sexo.
Su hyung sabiendo esto, pensaba que si su hermanito probaba estar con una chica, tal vez así lograría "curarse" de su homosexualidad.

Jimin al principio desaprobaba aquel estúpido pensamiento, pero realmente estaba muy pero muy agotado de los constantes insultos y mal tratos que recibía por parte de su familia desde que se enteraron de su orientación sexual,así que esa es la razón por la que se encontraba en aquel extravagante burdel. Lo que uno hace por la aceptación de los demás,¿no?.

"Buenas noches,
¿En que puedo ayudarlo?"

Preguntó un mozo delante de la mesa en donde estaba sentado,pestañó seguido y le extendió el papel a lo largo de la mesa, el camarero lo tomó y al leer el nombre que allí estaba escrito alzó sus cejas.

"Yoonji... ha sido bastante solicitada ultimamente, es muy hermosa, pero también muy cara para los servicios que ofrece señor"

Jimin frunció el ceño, confundido.

"¿A que se refiere?"

El mozo sonrió.

"Pues ella a diferencia de las demás chicas de aquí, es solo una acompañante, puede contratarla para ir a una fiesta con ella si no tiene pareja, o tal vez invitarla a comer o simplemente charlar, si no tiene con quien hacerlo, aunque no es de su preferencia hablar..."

Jimin se preguntó porque sus compañeros le habían recomendado a alguien que no podía darle sexo. Tal vez ellos habían malinterpretado a Jimin cuando el preguntó por una acompañante, al parecer ese no es el termino que se utiliza para referirse a una mujerzuela en el ambiente, si no para quién literalmente hace compañia.

"Maldito inútil" se dijo a si mismo en sus pensamientos.

"Ella no se acuesta con sus clientes, pero déjeme decirle que si usted busca placer, ella se lo puede dar de otra manera... me entiende,¿ verdad?"

Agregó.

"Si, entiendo, de igual manera requiero de sus servicios"

Podría haber desistido de aquella mujer, e ir en busca de otra que si ofreciera el tipo de servicio que estaba buscando, pero esas advertencias solo incentivaron más su curiosidad por ella.Además,pensó que invitar a una fémina a cenar o a charlar, sería un buen comienzo. Mucho mejor que tener sexo,sin nisiquiera conocerse.

"Ok, iré a buscarla, enseguida esta con usted, mientras espera puede pedir algo en la barra si desea"

Jimin asintió, el hombre se alejó, fue allí cuando comenzó a temblar aún más de los nervios, sacó su celular,se vio en el reflejo del mismo, su cabello estaba bien, miró su vestimenta y Dios, realmente no le gustaba como su hermano le había dicho que se vistiera, simplemente una camisa color azul abierta dejando ver su pecho y unos pantalones de vestir negros, no eran de su estilo, pero eso lo hacía lucir "más macho" en comparación de su vestimenta usual. Esa y más cosas eran las que tenía que escuchar a diario en su casa, cosas respecto a su sexualidad, a su valor como persona, pero tenía que soportarlo,pues prefería quedarse callado, con su alma doliendo por dentro,que contradecir a su hyung o a sus padres.

Suspiró, y se dijo a si mismo que lo que estaba apunto de hacer, aunque no fuera de su agrado si sería el de su familia, ellos estarían muy felices cuando llegara a casa contandoles sobre su cita, sobre su cita con una chica.Entonces su esfuerzo valdría la pena.

Pero también admitió que la vida le sonreiría,y sería mucho más fácil si el fuera alguien " normal".El era un muchacho lleno de complejos, con su cuerpo, con su manera de ser, con sus sentimientos... y su sexualidad no ayudaba en ello.

Perdido en sus pensamientos, no se percató de que una pálida mujer de cabello negro estaba frente a el,de brazos cruzados ceño fruncido, mirandolo,con ojos grises, gatunos, intensos y sumamente brillantes.
Él levantó la vista y quedando atónito por su extraña belleza supo entonces de quién se trataba.

"Yoonji"

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Espero esta historia sea de su agrado, si les gusto por favor voten y comenten su opinión.

Es totalmente mia, no se permiten adaptaciones ni copias de ningún tipo, todos los derechos reservados.
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La Mujer Que No Lo Es- YoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora