CAPITULO 5

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Len esta en un baile real muy parecido al de cuando cumplió 14, hay muchas chicas que se le acercan pero él huye al jardín del palacio y ahí ve a su hermosa princesa en un bello vestido blanco, un moño grande en la cabeza y unas zapatillas de cristal, él se acerca y la invita a bailar, mientras bailan las rosas rojas de su alrededor desprenden sus pétalos en él aire, él baile se detiene, ambos se miran fijamente e inician a acercar sus labios pero las campanadas de la media noche los interrumpe, en ese momento Rin inicia a sangrar de un costado de su cintura y después inicia a desaparecer lentamente entre pétalos de rosas negras, Len despierta gritando y muy despavorido, Rin al escuchar tales gritos despierta rápidamente y toma su espada para ponerse en guardia.

Rin: ¡¿QUE SUCEDE LEN?! (Rin mira a Len y ve unas lágrimas en los ojos de Len), ¿es... Estas llorando?

Len: Rin... (Len se levanta y abraza a Rin) menos mal, todo a sido solo un sueño.

Rin golpea a Len en la cabeza.

Rin: Ya deja de fastidiar, debemos seguir o no llegaremos al próximo pueblo antes de que se él sol se oculte.

Len: Perdon...

Ambos vuelven a montar a sus caballos y continúan su viaje, cuando inician a adentrarse al pueblo ven que los habitantes del lugar están muy estresados y temerosos y cuando pasan cerca de un grupo de chicas escuchan que una chica dice que ya no soporta que todos los domingos en la noche él grupo de bandidos vaya a quitarle una gran parte de sus cultivos, Rin y Len continúan hasta que llegan a un lugar donde hospedarse por esa noche.

Ia: Aquí tiene la llave del cuarto.

Rin: Muchas gracias, disculpe ¿por que todas las personas están muy alteradas?

Ia: Es por que un grupo de bandidos viene todos los domingos a quitarnos parte de nuestras ganancias, no podemos hacer nada al respecto ya que si no obedecemos amenazaron de matar a todos los niños.

Rin: Que horrible.

Ia: Si pero ustedes no tienen de que preocuparse, después de todo solo están de paso.

Rin y Len se van a su cuarto, en cuando Len parece dormido Rin se cambia de ropa y esta lista para salir.

Len: ¿Realmente tienes que ir?

Rin: Pensé que ya estabas dormido.

Len: Solo fingí, sabia que tu irías, después de todo es lo que hace él sol resplandeciente... Pero tengo miedo de que algo te pase.

Rin: He hecho esto por mucho tiempo, no deberías subestimar mi fuerza.

Len: No te subestimo, se que eres muy fuerte pero creo que no estaría de mas que yo fuera para ayudarte.

Rin: No necesito de tu ayuda, es mas tu te volverías un estorbo.

Len: Claro que no, soy muy bueno luchando con la espada, prometo que no estorbare.

Rin: Escucha bien Len si algo te pasa na recompensa se esfumara y no podre salvar él orfanato, y no quiero que eso pase además recuerda que en un inicio dijiste que arias lo que yo te dijera y ahora te digo que te quedes aquí.

Rin se va  y se dirige al centro del pueblo, mientras se dirigía al lugar sus pensamientos rebelan la verdad.

Rin: "Lo que dije en parte era verdad pero en realidad yo no quiero que nada malo le pase, no se como pero creo que me e enamorado de el".

En cuando llega a su destino ve a las personas haciendo una fila para entregar parte de sus ganancias a los bandidos.

Jefe de los bandidos: ¿Me quieres ver la cara de imbécil? Esto no es ni la mitad de lo que debes entregar.

Hombre: Perdón pero no tengo mas, mi hijo esta muy enfermo y gasto mucho en sus medicamentos.

Jefe de los bandidos: A mi no importa tu hijo, es mas si él muriera te quitarías un gran peso de encima, ahora daré él ejemplo contigo de lo que le pasa a quienes me desafían.

Los demás bandidos a sujetan al hombre de los brazos y se él jefe se acerca a él con una espada para degollarlo, él levanta la espada y poco antes de que isiera algo una pequeña navaja pasa cerca le hiere la mano y voltea a ver para descubrir que se trataba de él sol resplandeciente quien de lejos había aventado la navaja para evitar la muerte de hombre.

Jefe de los bandidos: ¡¿QUE ESPERAN? VAYAN POR SU CABEZA!

Todos los bandidos van tras él sol resplandeciente pero él es demasiado hábil en el manejo d la espada y logra vencer a todos golpeándolos de manera a que quedan inconscientes, pero aun le faltaba derrotar al jefe, a la distancian len se dirige al mismo lugar que su amada las personas corrían en dirección contraria y cuando ya estaba muy cerca no se veía mas que solo a él sol resplandeciente luchando con ese ser despreciable, pero él  quedo en shock al ver que ese sujeto apuñalo un costado de la cintura de él Sol resplandeciente cayo al suelo, len al ve esto cabalgo aun mas rápido para llegar y ayudarle mientras que él bandido escapo inmediatamente de la escena, len tomo a él sol resplandeciente en sus brazos y se fue en su caballo a toda prisa, Rin estaba inconsciente y perdía mucha sangre.

Len:Por favor resiste, resiste ¡¡¡Rin!!!

RinxLen LA CENICIENTA QUE DEJO DE SERLODonde viven las historias. Descúbrelo ahora