[💥] 7 historias en total ♥.
[ ❄ ] ¡Durante esta semana espero disfruten las historias que aquí se van a publicar!
[🔥] OJO: Este un recopilado de historias para la Week 2018, pero a la vez es un conjunto de las primeras que me atreví a escribir so...
▶Summary: «Katsuki anhela un bebé, y la suerte parece estar de su lado.»
▶Advertencia: Referencia al AU Omegaverse.
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—O-Oye Katsuki...
Todoroki Shotō, un Omega de 18 años se encontraba desayunando con su pareja, un alfa de carácter increíblemente explosivo con quien compartía la misma edad.
¿Cómo ambos habían terminado como pareja destinada? No tenían la menor idea.
—Dime...
No había logrado terminar de hablar pues su pareja se levantó y corrió al baño repentinamente cerrandolo de un portazo.
—¡Shotō!— preocupado el ojirubi se dirigió a la habitación y pegó el oído a la puerta, solo podía escuchar a su pareja... Devolviendo lo que acababa de comer —¡¿Estás bien cariño?!
—¡ALÉJATE!
Aquella orden lo dejo anonadado un momento.
—S-Shotō... ¿De verdad estás bien? Déjame entrar.
—¡MALDITA SEA KATSUKI! ¡ESTOY BIEN! ¡ALÉJATE DE AHÍ!— iba a seguir gritando más un dolor punzante en su estómago lo distrajo —E-Esto d-duele...
Bastó que soltara un leve quejido de dolor para sentir como la puerta era derribada y el rubio al entrar le miraba asustado.
—¡¿Te hiciste daño?!— no era su rutina tener tanta preocupación desbordando de él, pero joder, nunca vió a Todoroki así antes.
—Tranquilo...estoy bien— para demostrarle que lo que decía era cierto se levantó más un mareo repentino le hizo casi volver a caerse —Gracias Katsuki...
Y en ese preciso instante, no supo porqué, pero el rubio de quirk explosivo empezó a ver cómo en un futuro, su Omega era un hormonal, que le enviaba a ir a altas horas de la noche a comprar cosas raras para comer, que debía reposar constantemente.
Y que tras 9 meses, una mocosa le levantaba con sus llantos en la madrugada a él y a su pareja.
Que tras pasar noches sin dormir, tener ojeras y aguantar los caprichos de la niña, ella a los 4 años le enseñaba su quirk: explosiones de hielo.
Y a Katsuki eso último le hizo sonreír de una manera tan dulce que el bicolor se sonrojo ligeramente.
—Oye, mitad-mitad— le hablaba mientras acariciaba sus cabellos y le abrazaba de la cintura dirigiéndose con él a la sala —Debiste decirme antes, bastardo.
Con los mimos que le daba Bakugō, el chico heterocromatico ignoraba lo que pasaba a su alrededor.
Hasta que escuchó lo último que su alfa le dijo.
—¿Cuántos meses tienes?
Así el ambiente, fue arrancado de raíz.
—¿Qué?— fue lo único que logró responderle con una expresión confundida.
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Le rogó que no le llevara al médico, que no era necesario.
Más le ignoraron brutalmente y ahora, tras recibir los resultados, su pareja lucía desanimado.
—Te dije que no era eso, me dolía el estómago...alfa terco— repartía besos alrededor del rostro del mencionado en busca de alegrarle un poco, como resultado el otro le devolvía el doble de besos y le acariciaba el cabello.
—Lo siento, sabes que me hace mucha ilusión eso de... Ya sabes.
—Tranquilo, lo sé.
Enternecido, el Omega de doble Quirk no dudó en abrazarlo, pues sabía que el mayor deseo de aquel tipo de mal carácter era formar una familia.
Joder, verlo hablar con ese gran anhelo en sus ojos lo hacía sentir increíblemente feliz.
Sentía como su abrazo era correspondido.
Era un ambiente muy agradable.
Hasta que de nuevo, el defecto de su pareja renació.
—Pero ¿Podemos practicar, verdad?— preguntó sonriendo con altanería.
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La quinta historia será publicada en unas horas 💕 El sueño me está matando v':
