Capitulo 1

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Ahí estaba yo otra vez, mi pelo se veía mucho mas claro de lo normal. Escuchaba a mamá reír a lo lejos, yo no paraba de brincar, como si mi vida dependiera de eso. El día estaba soleado, con una temperatura agradable, las flores le daban ese toque de alegría al patio de la gran casa en la que estábamos. Me acerque a cortar un par de flores, habían de varios colores, pero la que capturo toda mi atención fue una rosa roja. Me acerque a cortarla, cuando me levante vi a un hombre con un arma que a lo lejos me miraba fijamente. Lo único que hice fue gritar y correr hacia mamá.

Desperté de un salto, otra vez el mismo sueño. Tire suavemente de mi pelo mientras me incorporaba cómodamente en la cama. Intente calmarme y sacar esa imagen de mi cabeza, esto era algo que había soñado desde pequeña y hoy a mis 18 años aun no dejaba de soñar.Tome mi celular eran las 5:20 am, normalmente me levantaba a las 7:00 am sabia que no podría volver a dormir por lo cual me levante y fui por un café. Camine hacia la cocina sin hacer mucho ruido, cosa que en mi es siempre bastante imposible, en cuestión de segundos llego mi madre.

–¿Otra vez la misma pesadilla?– pregunto mientras me acariciaba la espalda, yo solo me limite a asentir con la cabeza– Amelia quizás deberías tomar algunas semanas de descanso, de seguro te ayudaran

–Má, tu sabes que ahora no puedo– le conteste mientras le incorporaba la azúcar a mi café– quizás después que pasen los primeros exámenes en la universidad quizás podemos ir a algún lugar, incluso podemos ir con el tío Matt

Matt Collins era un gran amigo de mi mamá, como también lo fue de mi padre según ellos mismos me cuentan. Desde que papá murió, Matt se a convertido en un apoyo fundamental para mamá y para mi, tanto económicamente como psicológicamente. El ha sido el encargado de formar en mi la imagen de mi padre, ya que no tengo ni fotos ni recuerdos de el. Mamá me comento que murió en un accidente que tuvieron ellos en la casa donde vivían, la cual se incendio y solo se salvo mamá y yo. El había sido un héroe y estoy segura que desde el cielo sigue cuidando de mi.

–Claro–Sonrió mi madre– estoy segura que le encantara la idea, mañana mismo lo llamare para que así se pueda organizar.

Le sonreí de vuelta, después de todo no me vendría mal un par de días de descanso. Los exámenes en la universidad, y las ideas de mis proyectos literalmente no me dejan ni respirar. Así pasaron el resto de las horas, entre charlas con mi madre. Luego de una reconfortante ducha, finalmente tome mis cosas y salí del departamento. Saque las lleves del bolso y abrí el auto,el cual había sido un regalo de tío Matt, el cual que agradezco todos los días ya que sin el probablemente me saldría mejor dormir en la universidad, que volver a casa. El transporte aquí no es muy eficaz.

Mi primera clase del día era el taller de escritura y redacción, definitivamente es una de mis materias favoritas. Estacione donde normalmente solía hacerlo, saque las llaves y mi bolso, a los segundos un auto rojo estaciono como de costumbre a mi lado.

–Buen día negra– reí, ante su apodo– ¿preparada para el examen?

–Obviamente–conteste– la única que no se prepara eres tu Camila

–Bueno, bueno hay que aprovechar que los demás lo hacen– dijo como si nada mientras caminábamos hacia la sala– El viernes harán una fiesta los de la facultad de negocios y nos invitaron ¿que dices?

– Cami, es lunes– me limite a contestar y seguí caminando hacia la sala, tenia muchas cosas en la cabeza como para pensar en una fiesta ahora.

El resto de la mañana transcurrió normal, Cami siguió insistiendo incluso durante el examen con el tema de la fiesta, siempre bajo el argumento que hace días que no salimos juntas. En eso tenia razón, no había alguna motivo en especial por el cual no quería ir, solo no sentía ganas de salir. Y eso era lo que mí amiga jamas podrá entender.

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