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Después de leer esas letras blancas en las que ponían "Adopción de Jennie" cogí la carpeta y me senté al pie de la cama, cogí el primer folio que había y empecé a leerlo.

"Jackson Wang asesina a su esposa Roseanne dos semanas después del parto de su hija Jennie, la pequeña se encuentra ahora mismo en el orfanato más famoso de la ciudad, esperando a ser acogida por una familia."

Joder, ahora resulta que el loco de mi verdadero padre que está en la cárcel actualmente se llama Jackson y encima el asesino a mi verdadera madre.

"Jackson se encuentra desaparecido, en cuanto lo encuentren será enviado a la cárcel, acausa de cometer un asesinato."

Y 15 años después, sigue en la cárcel, lo que me asusta realmente es lo que sea capaz de hacer cuando vuelva a ser libre. ¿Y si viniera a por mi, o a por mi "madre"?
Seguí leyendo un rato más hasta haber leído todos los papeles que se encontraban en aquella carpeta roja, la volví a guardar en su sitio y ordene la habitación de mi madre.

Fui a darme una ducha de agua caliente y me puse ropa de salir a la calle, peine mi cabello para cuando fuera la hora de ir a casa de Lisa estar ya preparada.
Faltaban aún dos horas para que fueran las cinco y media así que decidí jugar un rato a la consola.

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Iba camino a casa de Lisa, hasta que noté una mano acariciar mi hombro. Vaya, era Min Yoongi, iba con una camisa, unos pantalones ajustados y unos zapatos bastante bonitos.

– ¡Jennie, que sorpresa verte!

– Hola Yoongi, ¿Qué tal? – Dije con un tono agradable.

– Bien, ¿Y tu?

– Me alegro, yo estoy...Bueno, se hace lo que de puede – Dije desanimada.

– Oh... ¿Que pasó?

Nada, bueno no quiero acordarme, oye debo irme quede con Lisa y llego tarde.

En cuanto Yoongi escuchó el nombre de Lisa se puso bastante rojo y sin quererlo en su cara se dibujó una sonrisa.

– Esta bien, yo hoy tengo cena familiar, eso explica mi vestuario, adiós.

– Adiós – Dije mientras retomaba mi camino hacia casa de Lisa.

Pasaron unos diez minutos hasta que llegué a casa de mi mejor amiga y toqué al timbre.

– ¡Jinnie! – Dijo Lisa con cara alegre.

– ¡Lisaaa!

Nos dimos un abrazo y nos dirijimos a su habitación, estuvimos toda la tarde hablando sobre los chicos, luego de los estudios y finalmente le conté lo que vi en la carpeta roja, ella se quedo helada, vio que puse cara triste e intento animarme y finalmente para animar el ambiente nos pusimos a ver una película.

Palomitas, refresco y película con tu mejor amiga ¿Puede haber algo mejor?

El tiempo pasó volando y ya eran las nueve de la noche a si que decidí irme a mi casa. Cuando llegué vi a mi madre que estaba preparando la cena, la saludé y me fui a mi habitación a ver vídeos de Youtube en el portátil, una noche de sábado con el portátil.

A Crazy LifeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora