12 de octubre de 1985

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El comediante ha muerto 

Esta mañana me he encontrado un cadáver de un perro en un callejón. Tenía una marca de neumático sobre su tripa reventada, pero lo demás seguía intacto. Decidí comérmelo a la barbacoa siguiendo una vieja receta de un amigo asiático, no quiero alardear, pero me quedo delicioso. No me juzguen, no como hace mucho tiempo, esto de ser alguien temido y vagabundo no te da mucho dinero que digamos. Es cuestión de comer o ser comido.

Ésta barrio me teme y no es por lo horrendo que soy o lo mucho que apesto, eso se los puedo asegurar. He visto su verdadero rostro, lleno de acné e imperfecciones faciales. Las calles son alcantarillas alargadas, y esas alcantarillas están llenas de sangre, y cuando se forme una costra en los desagües todas las alimañas se ahogarán. La mugre acumulada de tanto sexo y tantos asesinatos les cubrirá con su espuma hasta la cintura, y todas las putas y los políticos alzarán la vista y gritarán: "¡Sálvanos!" y yo susurraré: "lol, No...":p

El mundo entero está al borde de presenciar una auténtica sangría. Con tantos liberales, intelectuales y charlatanes, y de repente a nadie se le ocurre nada que decir. A mis pies ésta horrible ciudad chilla como un matadero lleno de niños retrasados, y la noche apesta a fornicación y conciencia sucia.

Esta noche, un comediante ha muerto en una ciudad famosa. Y alguien sabe porqué.
Alguien lo sabe.

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