¡Hey tú!

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Tom era un estudiante universitario al que no podrías describir como normal.
Era irritable, sarcástico y tan impredecible que todo en el podía significar un enigma. Hasta que aquella tímida chica se cruzo en su camino aquella tarde de otoño.
Al llamar la atención de aquella chica no notó las miles de emociones que estaba dejando escapar de sus manos.

-¡Hey tú, fíjate por donde vas!-mi furia no podía ser mayor y el ardor de aquel café caliente me molestaba aún más.
Limpie un poco como pude, e intente ver a donde había ido la culpable de aquel accidente, topandome con una tímida y asustadiza mirada. Parecía un gatito perdido que se encuentra frente a un desconocido.

- Perdón. -murmuro, haciéndome regresar de donde fuera que había ido mi mente.
Si, definitivamente a su aguda voz le faltaba poco para sonar como un maullido.

-Deberias tener más cuidado.-le dije con voz irritada.-Tienes suerte de que ya hayan terminado mis clases .

La culpabilidad en sus ojos me hizo darme cuenta de que en verdad no lo había hecho a propósito, o al menos su torpeza había sido la culpable de todo, así que simplemente termine por asentir y terminar de limpiar mi ropa. Y durante todo ese tiempo ella ni siquiera se había movido, hasta que un celular comenzó a sonar y ella pego un brinquito sabiendo que era el suyo.
Miro el móvil una vez lo sacó de su bolsillo y me dio un rápida mirada.

-Una vez más perdón.-me dijo, a lo que yo sólo asentí aguantando la risa puesto que se negaba a contestar hasta no haber conseguido mi perdón.

-Descuida, igual ni me gustaba tanto mi camiseta favorita.-Bromeé y al instante me arrepentí de haber soltado ese comentario tan sarcástico.

-Te lo compensaré, te lo juro.- las palabras salieron atropelladamente de sus labios y apenas le entendí cuando de su bolsa de mano saco una tarjeta y me la tendió.

La mire extrañamente y leí "Cafetería grano dorado "

-Trabajo ahí, pasa cuando quieras prometo reponer tu café.

"¿Y que me tires otro encima? No gracias."

-Claro. -le di una sonrisa torcida y pareció ser suficiente para ella, pues dio media vuelta y siguió su camino como si fuera una concursante de la serie nazcar.
Cuando pensaba hacer lo mismo que ella y seguir mi camino vi el mensaje de texto en mi móvil.

"Esta noche iré, necesitamos hablar "
Y esa fue mi señal para negarme a estar en casa esa noche, pues francamente no tenia ganas de hablar con mi ex.

"Lo siento, pero saldré con una amiga a tomar un café "

Ahora que veo las cosas desdé esta perspectiva, preferiría haber hablado con Darcy aquella noche.
Al menos hubiera tenido buen sexo de despedida y no el corazón roto por una loca.

N/A: 20 de enero. Publicación del primer capítulo.
Espero les guste y comente si quieren que la sigua. :)

¡Hey tú! | Tom Holland y tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora