detrás de tus párpados ; hyungwonho

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Entre enredos
Hyungwon

La primera noche todo estaba muy nublado, mis oídos parecían estar bajo agua y mi mente flotaba entre lo que quería hacer y lo que no podía. Te escuchaba en mi oído izquierdo, estabas haciendo un alboroto en el pasillo sobre darme un cuarto privado ya que nunca me gustó compartir con nadie que no fueras tu. Sonabas sumamente triste mientras le gritabas a las enfermeras sobre sábanas de algodón y almohadas de pluma. Al parecer estuviste llorando, ya que el doctor notó que finalmente te habías calmado cuando entró a la habitación. Me hubiera gustado decirle que en realidad nunca estás completamente en paz, que tu cabeza maquinadora era un grano en el culo desde que te conocí.

Al segundo día vino mi madre. Siempre se llevaron bien entre ustedes, ella decía "Es un don, Hyungwon, toda la gente que te ama se lleva bien entre sí", es gracioso que tu respuesta "¿Y quién se iba a llevar mejor que las dos personas que más te aman en el mundo?" sea lo único que se me repita en la cabeza cuando mi mamá te llamó hijo. Cuando se fue, me dijiste que trajo mis flores favoritas, las violetas. En realidad me dan igual, lo que a mi me gusta es ver lo lindo que brillan tus ojos al verme feliz. Cuando me miras así, hasta puedo creer que me amas más que mi madre.

Al tercer día me visitaron Hyunwoo hyung y Jooheon. Jooheon lloró tanto que una enfermera le debió pedir que mantuviera la compostura para no alterar a los demás pacientes. Ambos me contaron sobre lo que estaba pasando en sus vidas, como Kihyun hyung no quiere venir a verme porque "Si no lo veo no es real". Quise pedirles que le dijeran que lo entendía, que no era su culpa. Quería que me dijeran dónde estabas, si no te escuchaba me podría ahogar en esa pesadez que me persigue.

Pasó un mes, me mantenías al tanto de cada día, cada día que no abandonaste mi oído izquierdo. Pasó un mes hasta que explotaste otra vez, te escuchaba decirme que era egoísta de mi parte hacerte esperar tanto, no llorabas porque el enojo de que no pudiera sentir tus manos tocándome te sobrepasaba. Dijiste que no tenía por qué comprar malditos anillos si eso significaba que hubiera llegado a tiempo a casa, que hubieras estado perfectamente bien con solo un pedazo de plástico alrededor del dedo mientras estuviera contigo. Mi cuerpo estaba desesperado por reaccionar ante tu dolor, quería abrazarte y contenerte contra mi corazón. Lastima que la pesadez era mayor a mi pasión.

Y hoy tengo muchísimo sueño como para responder a tu lágrimas, lo único que te pido, déjame descansar un poco. Tal vez mañana pueda volver a nuestros recuerdos.

☁️
nota de autora
finale chan chan chan
mad