En aquel momento, podía decir que no podía sacármela de la cabeza, había pasado tan solo un momento, y ya estaba caminando camino al trabajo, pero, esa sensación, estaba aun grabada en la piel que se erizó, como en mi mente, que no dejaba de pensar en eso.
La única palabra que podría utilizar para definirlo, es, raro, solo, no podía entenderlo bien.
Y la razón por la que fuese esa palabra, era precisamente por lo ambigua que podría ser.
No entendía bien aquello, ni el porque, pero recuerdo haber llegado a la tienda sin haberme dado si quiera cuenta, y cuando sentí que choce con la realidad a la par que abría la tienda haciendo consciente el que ya había llegado, me di cuenta que me dolían las piernas incluso mas que antes, pero que no lo había llegado a notar, a causa de solo estar concentrado en ello.
La única imagen que permanecía en mi cabeza era aquel cuadro, con ella dentro, aquella imagen sacada de una leyenda antigua.
A penas escuchaba lo que decía Mey, mi jefa, a penas podía sentir en donde estaba sentado, y mis ojos estaban estáticos mirando una mesa de madera que llevaba en ese lugar por hacía un mas de semanas, llena de polvo y con manchones extraños, pero no me estaba fijando en ello, si no en lo que tenía en mente.
Mey siempre ha sido muy amable, y teniendo un sentido de culpa como el suyo, el a veces pensar que mis miradas perdidas se basaban en que sintiera dolor por algo que ella alguna vez hubiese dicho, su manera de compensarlo era solo hablándome y buscándome, era lindo, pero, también me hacía sentir un poco incomodo en ocasiones.
Pero en esa ocasión en particular, me pregunto el porqué me había levantado tan temprano.
A decir verdad, no tenía ganas de explicarle lo que había pasado la noche anterior, pero, quería decirle algo, y creo que en ese momento solo salió, lo necesitaba, y de un momento a otro, sin darme cuenta me estaba quedando sin saliva describiéndole en 400 palabras un simple vistazo en un panorama con una chica en el.
Pero algo que ella dijo, algo que me hizo darme cuenta, mencionó, tan solo como una pregunta para seguir la conversación
.- "¿tenía lindos ojos?"
Describir la conversación que surgió de eso, es tan innecesario como interesante, porque no pude sentir en ella que algo despertó mas allá de una sencilla cosa, y tal vez fue por la falta de percepción, o tal vez por el hecho de que no supe tomar bien el que no me había dado cuenta, pero en ese momento ella me hizo ver que no le había visto a los ojos.
Y si los ojos han de ser la ventana del alma, donde yo pude sentir que vi mas que eso, sin verlos, ahora tenía un porque de querer volver a verla.
Con el paso de las horas, mi mente fue aflojando ese pensamiento, aún con la idea marcada de querer verle de nuevo, mas ahora dándole espacio a que otras cosas ocupen mi concentración, al final, salí del trabajo algo temprano pues Mey me dejó, diciéndome que ella cerraría.
Y camino a casa solo podía notar, ese mismo pensamiento en mi mente pidiéndome atención, a la par de que mi mente solo se fijaba en aquello desde lejos, aceptando la idea de querer volver a verle, pero ahora con un sentido mas tranquilo y menos mistico.
Y cuando llego la hora de decidir porque ruta ir, de noche en este punto, decidí tomar aquel mismo camino por el que vine, tal vez por la esperanza de volverla a encontrar, o por la idea de contemplar aquellas colinas ahora con tranquilidad y soledad.
A lo que no pude sentir sorpresa, pero si emoción, ya era algo esperado, pero mi corazón volvió a latir con rapidez, y mi mente asociaba ese mismo sentir con el anterior, queriéndolo o no, volviendo a sentir aquel escalofrio que en este punto era recurrente en esta situación.
La verdad, solo pude acercarme, ahora seguro, ahora nervioso, ahora ansioso por verla de cerca y con mi mente en blanco, queriéndole hablar, tan solo preguntándole lo primero que se me ocurriese.
Curiosidad, ansiedad, interés, inmersión.
Creo que en algún punto llegue a sentir que me estaba enamorando de alguien a quien solo he visto una vez.
A cada paso que daba se hacía mas corto y nervioso, y no podía evitar temblar mientras suspiraba por no poder acercarme mas.
Había algo que me pedía ir y preguntarle si le gustaba Led Zeppelin.
Y había lo que me decía que le preguntase su nombre y le dijese que le quiero conocer.
Y después solo estaba yo, callado, con los ojos abiertos y las orejas atentas, en algún punto hasta pude fantasear con el olor que podría tener.
Mi mirada, estaba llena de fascinación y intriga, y cuando mis ojos empezaron a lagrimear y me di cuenta que estaba sintiendo un remolino en el estomago supe que algo debía hacer.
Mordía mis labios mientras cerraba mis ojos viendo al suelo, apretaba mi estomago mientras apretaba mi puño cuando sentía ese remolino crecer, y ese sentimiento indescriptible presente.
Sentía que algo me atacaba, y aún, aún no comprendía el qué.
Estaba forzando mis pies a dar un paso tras otro, y mi mirada a mantenerla en ella mientras lloraban mis ojos, apretaba mi estomago con mi mano mientras apretaba el puño con la otra, y había algo que debía hacer
Lo veía, lo sentía, viví un instante en el que tenía algo marcado, viví ese instante donde debía ir a preguntarle un porque.
Y llegando a la cuspite de la desesperación y la intriga, donde algo me hacía arder por dentro, solo pude contemplar desde ahora no mucha distancia, lo que me hizo solo abrir mis ojos y contemplar.
Solo pude ver como se levantaba y limpiaba sus piernas después de haber estado tanto tiempo sentada.
Y ahí fue cuando pude notar una simple cosa.
Al mismo tiempo que ella se levantaba del suelo, al mismo tiempo que miraba sus piernas para saber donde sacudir con sus manos, y al mismo tiempo cuando empezó a ver a los lados por precaución y me vio, creo que ahí me di cuenta de algo.
Que esa fantasía era una imagen diferente a la que tenía en mente.
Su mirada, por dios, creo que su mirada fue lo único que no podré olvidar en mucho tiempo.
Era incertidumbre, y miedo.
Y la mía interés, de admiración.
Creo que en un momento me cambió de ansioso, y nervioso, a extraño, a, miedo.
Solo, veo sus ojos como recuerdos en mi cabeza, y solo puedo sentir como esa fantasía, ese misticismo, como esa sensación de perdida y encuentro conmigo mismo a traves de un lugar, y una persona, que veía por primera vez.
Solo siento como ese sentimiento estalló en un segundo.
Y solo recuerdo, que no quiero recordarlo otra vez.
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Solo un instante
Roman d'amourLa primera parte de un cuento corto Donde se cumplió la fantasía de un simple chico, cansado no solo de su aburrido día a día, si no de un dolor que aun no ha sanado Una fantasía hermosa, y triste al mismo tiempo