spring day - jjk

XXIII.

⌲ Peor de lo que pensaba. Siento mucho si es un capítulo frío y distante. Siento mucho si todos los acontecimientos pasan demasiado rápido. No sabía de qué otra manera escribirlo.

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-¿Estás ya? -le grito desde la puerta.

-¡Sí! ¡Espera! !No! Necesito otra batería para la cámara -le veo entrar corriendo a su habitación.

-Jimin nos está esperando abajo -le digo mientras sale ya de la habitación y se pone los zapatos.

-Ya está, ya está.

Jungkook parece algo mejor hoy, pero todavía no es completamente él. Sigue con los ojos hinchados y a pesar de que finja que todo está bien, que el día de ayer es solo un vacío, ese vacío todavía no se ha llenado.

Le estuve acariciando la cabeza para que se durmiera después de que Jimin se fuera, pero creo que me acabé durmiendo antes.

Coge la maleta y bajamos por el ascensor. Estoy nerviosa, ambos lo estamos.

La puerta del ascensor se abre y Jimin aparece delante de nosotros.

-Sabía que ibais a aparecer por este ascensor -dice riéndose.

Nos ayuda con la maleta y las metemos en el taxi. El aeropuerto queda algo lejos, así que me acabo durmiendo en el hombro de Jungkook. A pesar de que ayer me durmiera antes que él, siento que no he dormido, que tenía los ojos cerrados, pero no descansaba de lo preocupada que estaba.

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Cuando llegamos al aeropuerto Jimin hace todo el check -in por nosotros. Según él, es lo que tendría que hacer un hyung, pero lo más probable es que lo esté haciendo para que Jungkook esté relajado aunque no sirve de nada porque no para de mirar por todos lados.

-Jungkook, ¿por qué no vamos a comprar algo de beber mientras Jimin termina? -es la segunda vez que le pregunto y creo que esta vez sí que me ha hecho caso.

Nos dirigimos al Starbucks más cercano. Jungkook va unos pocos pasos por delante mío con los auriculares puestos.

Quiero cogerle de la mano, agarrarle y no soltarle. Decirle que todo va a estar bien, que no se tiene que preocupar por nada. Quiero pararle, quiero mirarle, quiero que se olvide de todo.

Miramos lo que tienen. Jimin quería café con hielo.

Pedimos y damos mi nombre por si acaso. Mientras esperamos veo cómo Jungkook cierra los ojos y murmura suavemente las canciones. Se está protegiendo en la música, yo hago lo mismo.

-Jungkook -le llamo para comprobar que solo se está protegiendo y no se está hundiendo.

Pero no me hace caso.

-Jungkookie -le llamo otra vez posando mi mano sobre su hombro.

Se quita el auricular y sonríe.

-Tengo una idea -le empiezo a decir.

-¿Qué idea?

-Te gusta la fotografía, ¿verdad?

-Sí...

-¿Y por qué te gusta?

-No sé, porque estoy captando un recuerdo -me contesta como si fuera una pregunta.

-Yo creo que te gusta contar historias, eso es lo que sentí cuando vi tus fotos.

-¿Historias? -se queda pensando-. Puede ser.

-¿Y qué te parecería captar esas historias de otra manera? ¿Qué te parecería si las historias que captas tienen forma y sonido?

-No entiendo.