Capítulo 3

370 31 1
                                    

End dooooo uh oh wuilowis loviuuuuuuh....

Tu ingles es pésimo Cori.

— Pero admite que te encanta mi voz, seguro y los ángeles están peleándose por mi.

— ¿Ángeles? Perdí a mi amiga.

— Estas celosa, si tu esposo escuchara mi voz seguro y te dejaría.

— No es mi esposo.......aun.

Tampoco me sentía celosa, estaba molesta, irritada, enojada y hasta con cólicos, en peor momento tenía que visitarme Andrés.

Había pasado un día desde la cena la mas incomoda de mi vida, aburrida no cómo creen, si la mamá de mi prometido se encargo de que me divirtiera toda la noche, no se cómo la señora puede aguantar él sueño y él hambre solamente se comió una ensalada que para colmo tenia brócoli, aguanté cada palabra incluso la seguí a su habitación para ver su colección de maquillaje traída de Las Amazonas, agradecí que mis piernas aún seguían despiertas, nunca había dormido tan tarde.

Lo peor lo mas horripilante fue que dormí en la habitación de King, no me juzguen por eso, el hecho de que dormí al lado de mi prometido que por cierto olía muy bien en la misma cama, no quería decir que de la noche a la mañana nos declararíamos amor eterno.

No, no, no y no.

Su cama era tan suave cómo un algodón de azúcar pero no dormí mientras que claro mi querido amor estaba en su sueño rejuvenecedor, dormía cómo un oso al menos deseaba oír sus ronquidos y tener que reírme de eso al siguiente día pero no lo hizo.

Nunca había visto dormir a un Rey pero supongo que King era lo mas parecido.

— ¿Alisson?.

— ¿eh?.

— Wow, te fuiste de este mundo a otra dimensión.

— No es cierto.

— Si y se en que pensabas, oh King, amor mio ven por mi, ven por tu amada que quiere estar a tu lado dormir en la misma cama y en la misma habitación, ¡Oh King quitame la vi.. !.

— ctoria! Victoria Corine deja de decir estupideces y ayudame a leer estos libros que tengo que corregir — digo sonrojada.

— Me has interrumpido, eso no lo tolero estaba a punto de terminar mi primer poema él cual me llevaría a la fama, te importa poco mi vida mi futuro, mi...

— Mi cabeza esta a punto de explotar, y aun tengo que trabajar, así que ¿podrias ayudar a esta pobre damisela en apuros?.

— Por supuesto pero eso si con una condición.

— Presenciaba que esto pasaría, bien dime antes de que salga por esa puerta y no vuelva.

— Una cita, una cita con Josh — mire a mi amiga intentando buscar algún indicio de locura, pero no, lo decía enserio.

— ¿Mi hermano? Pero sabes bien que esta ocupado además es un año menor que tú y...

— Para él amor no hay edad.

Sus ojos brillaron en cuanto las palabras dejaron su boca, si sin duda la había perdido.

Josh mi hermano no se consideraba un hombre Romántico, había tenido que sacarlo de la Cárcel al menos siete veces no es alguien problemático o bueno quizá un poco. Para su edad se veía bastante mayor y no lo es pero cuando es entrenador de boxeo su masa muscular había crecido, las chicas se pegaban como abejas a la miel.

Tenia miedo que algún día esto pasara y mi amiga se fijara en mi hermano, no quiero perderla y temo que saldrá lastimada aunque eso ella ya lo sabe tampoco le negare su mas grande deseo.

— Bien una cita con Josh, ahora ayudame, eso si te advierto que tu virgen corazón puede salir lastimado.

— Al menos mi corazón si es virgen, por que hay otras que hasta él cabello no a sido tocado.

— Corine te estoy pidiendo tu ayuda y no me interesa quien no a sido tocada.

La verdad si me preocupaba.

Soportando Al King©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora