12.-

679 78 11
                                    

POV Omnisciente

El moreno al menos pasó una hora arreglándose, teniendo un montón de trajes desparramados en su cama, todavía ni sabiendo cuál colocarse.

-Mierda.-Murmuró Nicolás, sabiendo que si su mano derecha iba a buscarlo lo iba a retar por todavía no estar listo.

De repente algo pasó por su mente, ocasionando que abriera un poco más los ojos y buscara algo en específico. En el momento que encontró el traje que quería, lo observó por unos segundos y sonrió.

No se demoró casi nada en colocárselo y casi en el instante se desabrochó el primer botón, queriendo darle también algo informal.

Se apuró en guardar sus otros trajes y posteriormente se colocó sus zapatos, ocasionando que finalmente estuviera listo.

Y al aparecer tuvo bastante suerte, ya que su mejor amigo, o al menos uno de ellos, fue a buscarlo.

-Menos mal que estás lis...

Manu se quedó completamente callado al verlo, originando que el moreno enarcara una ceja.

-Weón, te veo con trajes siempre pero este te queda muy bien.-Dijo Manuel, por fin terminando una frase, causando que el mafioso sonriera.

-Gracias Manu.-Dijo Nicolás, realmente apreciando lo que su mano derecha le había dicho.

-Naiko! Tienes que venir!.-Gritó el recién nombrado, originando que este fuera casi corriendo, queriendo saber qué pasaba.

En el momento que llegó, este observó por unos segundos al pequeño moreno y habló.

-Bien, Nico, te daré una oportunidad más para reconsiderar la oferta de que estés con nosotros.-Dijo Naiko, provocando que el mafioso riera.

-Lo siento, voy a tener que rechazarla.-Dijo el moreno, haciendo que Naiko colocara una mueca de dolor.

-Te vas a arrepentir.-Dijo su mejor amigo que no estaba en la mafia, con una pausa.-Y ni siquiera si me ruegas para tener otra oportunidad, te la daré. Bueno, tal vez sí pero te va a costar.

-Lo que digas, Naiko.-Dijo el pequeño moreno, teniendo una sonrisa en sus labios.-Ya nos tenemos que ir, Manu?

-Sí.-Respondió Manuel, siendo honesto con el mafioso.-Venía a buscarte pero ya sabes que debía elogiarte primero.

-Bien, vas a ir al club?.-Preguntó Nicolás, ahora hablándole claramente a su otro mejor amigo.

-Puede ser.-Respondió Naiko, tomándose un momento para luego seguir hablando.-Luego les aviso, puedo ir solo.

-Estás seguro? Podemos decirles que vamos a llegar algo tarde...

-Completamente seguro.-Dijo Naikelito, diciéndole la verdad e interrumpiéndolo, teniendo una idea clara de lo que iba a decir.-Vayan no más, diviértanse.

-Está bien, pero cualquier cosa, sabes que nos puedes llamar.-Dijo el moreno, mirándolo fijamente a los ojos.-Los guardias obviamente te llevarán a tu casa o al club.

-Ya lo sé.-Dijo Naiko, ahora teniendo una sonrisa entretenida.-Eres peor que una mamá.

-Te intento cuidar, culiao.-Dijo el pequeño moreno, ocasionando que sus dos mejores amigos se rieran.

Finalmente, Nicolás y Manuel se fueron de la casa del primero en ser nombrado, ocasionando que Naiko aprovechara para ver alguna serie mientras decidía si ir o no.

Entretanto, el detective y el compañero de este ya habían llegado al lugar, originando que el señor Navarro examinara todo el lugar.

Algunas personas los estaban mirando y el señor Navarro pudo entender el por qué.

Posiblemente varios de los que estaban ahí, trabajaban para Nicolás en la mafia, y podían creer que estaban ahí para investigar algo.

-Bien, no te sientes algo... observado?.-Preguntó Edgar, casi en un susurro, ocasionando que el detective lo mirara.-Más encima que hayas venido con traje no ayuda en nada.

-Edgar.-Gruñó Jaime, no diciéndole "cállate" directamente pero su mejor amigo entendió el mensaje.

-Si te doy varios tragos, te pones más simpático?.-Cuestionó el ruloso, logrando que el señor Navarro lo mirara fijamente, con un rostro neutro.

-Puede que sea peor que ahora.-Dijo el enojón, tomándose un momento para luego continuar hablando.-En verdad quieres arriesgarte?

-Mejor no.-Dijo Eddie, ni siquiera queriendo imaginarse cómo sería eso.

-Muy bien.-Dijo el señor Navarro, volviendo a contemplar el lugar, todavía notando aquellas miradas, de hecho, alguien se estaba acercando a ellos.

-Detectives, creo que se tendrán que ir antes de que nosotros los echemos.-Dijo aquél desconocido, siendo no muy amable claramente.

-Que yo sepa, esto es público.-Dijo Jaime, mirándolo directamente a los ojos, no teniendo ni una pizca de miedo de los hombres del pequeño moreno.-Así que no nos iremos.

-No digas que no te advertí.-Gruñó el hombre, agarrando del brazo al detective, y este ni siquiera alcanzó a defenderse en el momento que alguien más interrumpió aquello, empujando fuertemente al desconocido.

-Bueno, qué manera es esa de tratar a los detectives?.-Preguntó Nicolás, estampando a su trabajador contra la pared con una mano, con un tono furioso.

-S-Señor creí que...

-El detective Navarro y Gaete son más que bienvenidos acá.-Gruñó el moreno, no dejando que hablara en ese momento.-Espero que te quede claro porque no me gusta repetir las cosas.

El desconocido asintió en el instante, ocasionando que el moreno lo soltara. No obstante, llamó a otro de sus hombres y le dijo algo en el oído, causando que este asintiera y se llevara al primero en ser nombrado de ahí.

Edgar y Manuel, cuando el mafioso tenía a aquél hombre contra la pared, no sabían si mirar esta escena o la expresión de sorpresa del señor Navarro, quien nunca había visto al moreno así, ya que este, cuando estaba con él, parecía bastante relajado aunque tenía claro que no lo era, por algo era jefe de una mafia. No obstante, estaba completamente asombrado.

-Bien, esa sí fue una entrada.-Dijo Nicolás, actuando como si nada hubiera pasado y teniendo una leve sonrisa, mirando a sus amigos.-Lamento que aquello haya ocurrido.

-No importa.-Dijo Jaime de repente, finalmente hablando, logrando que la atención del mafioso estuviera en el detective, aunque siempre la había tenido.-Es lógico que tus hombres reaccionaran así.

-Qué pasó con él?.-Se atrevió a preguntar Edgar, esperando no oír lo que estaba pensando en ese momento.

-Nada serio.-Respondió el moreno, sabiendo a qué se refería.-Tranquilos, no estará en su lista de desaparecidos.

Edgar pareció conforme con aquella respuesta, provocando que volviera a hablar.

-Yo, con Manuel, iremos a pedir algunos tragos.-Dijo el ruloso, queriendo dejar solos al mafioso y detective.-Yo ya sé qué quieres, Jaime, y supongo que tú sabes qué quiere el Nico, no?

Manu asintió, originando que el ruloso lo siguiera al bar.

El detective y el mafioso se quedaron en silencio por unos segundos.

-Te ves bien.-Dijo Jaime, causando que el moreno sintiera un leve calor en sus mejillas.

-Muchas gracias, Jaime.-Dijo Nicolás, siendo honesto con él.-Tú también te ves muy bien. Lamento que el Edgar te haya llevado a comprar ropa actual.

-Algo bueno saqué de eso.-Dijo el enojón, con una pausa.-Pude comprarme unos pocos trajes.

-Espero verlos otro día.-Dijo el moreno, admirándolo por unos segundos y notando una leve sonrisa en los labios del detective, haciendo que sintiera una corriente por todo su cuerpo.

Criminal (Jainico) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora