-28-

759 64 49
                                    

-¿Por qué no me contaste? -regañó Bradley.

-Lo siento... es que no quería molestarte.

Suspiró y le dio un abrazo.

-Sabes que siempre puedes contar conmigo Cly.

-Gr-gracias.

**

-Clyde, ¿te sientes bien?, si quieres podemos ir a mi casa.

-No -sonrió- estoy bien

Ambos se encontraban sentados en la banca situada frente al lago, Kevin no había tenido tiempo para salir con él.

-Te ves algo decaído.

-Supongo que es normal.

Le miró buscando respuestas.

-Solo... unos chicos me golpearon. Nada importante.

-Clyde -tomó su mano y entrelazó sus dedos- te prometo que desde hoy nadie te hará daño.

-E-eso no es necesario, fue hace un par de meses.

-No me perdonaría verte así otra vez.

El ojiazul se fue acercando al rostro contrario, sus labios rozaron, pero fue alejado y empujado a la orilla del lago.

-¿Qué te ocurre?

-¡No puedes hacer eso!

-¿Desde cuándo te importa lo que me pasa?

-¿Qué te hace creer lo contrario?

-"Nunca tendría algo qué ver con alguien así", ¿te suena?

-Clyd-

-Stan, me haz hecho menos durante mucho, mucho tiempo. Ya me cansé.

-Ya admitelo -interfirió Stoley- tienes miedo de que te vean como lo que realmente eres.

-¡Cállate!, como si de verdad te gustara.

-No eres el más indicado para acusarme de algo así -se paró y tomó la mano del más bajo, yéndose mientras lo ignoraban.

[***]

Pasaron las semanas y Stan solo podía pensar en lo mucho que desprecia a Kevin por besar los labios de Clyde frente a él, sin saber cuándo, cada vez que los veía sentía una punzada en el estómago. Se sentía decidido.

-Clyde, el entrenador dice que lleves esto a-a los vestidores -avisó Butters.

-Claro -dijo y obedeció, cuando entró, se percató del sonido de unas cadenas.

-Oh salchichas, tuve un deja vú -maldijo y se fue.

El castaño al ver que no podía salir, se sentó en el suelo a esperar a que su novio le buscara. Kevin es así, siempre atento a él, pero no de manera obsesiva, sino de una forma especial.

-¿Qué haces aquí? -preguntó rápido mientras se paraba.

-Necesito hablar contigo.

-Stan, ya te superé, ¿tanto te molesta verme feliz?

-¡Me molesta que seas feliz con el bastardo de Kevin!

Dio un paso atrás.

-Me molesta que te abrace, que te tome de la mano y que te bese, ¡quiero hacerte mío y no me importa esta vez lo que los demás digan!

Gritó y lo aprisionó contra los lockers, alzó sus piernas, colocandolas en su cadera y Clyde con miedo a caerse las enredó, quedando sus rostros a una corta distancia.

Y lo besó. Stan Marsh lo estaba besando.

-Clyde, abre la boca -ordenó para luego meter su lengua y chocarla contra la de Donovan.

¿Para qué resistirse?, por fin su fantasía se estaba cumpliendo. El ojiazul se separó y bajó a su cuello, oliendo su aroma y besandolo.

-Dime que no hiciste esto con él -susurró en su oído.

-N-no.

Sonrió al recibir esa respuesta, alzó su vista y cuando sus ojos chocaron, le preguntó lo que hace meses probablemente le hubiera dado asco.

-Clyde, ¿te gustaría salir conmigo?

03-02-18

I don't care. *Styde*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora