El Idiota Del Bad Boy - Cameron Dallas [SI#1]

10 Ayudando Al Bad Boy Orgulhoso

(Look de Cameron Dallas)

Él suspiró enojado y se sentó a mi lado. Cuando se sentó pude oler su perfume, era muy bueno el olor. Él tomo su cuaderno y empezó a copiar.

Pasó unos segundos que estaba copiando y el idiota me asusta cutucandome con un lapiz.

— ¿Que quieres? — pregunté poniendo mi mano en el pecho y fulminandolo con la mirada.

— ¿Puedo copiar el comienzo? — pregunto seco, suspiré y asentí, ¿casi me mata solo para pedirme eso?

— No necesitas ni preguntar si es para esas cosas — dije empezando a copiar.

— Entonces ¿podrías sacar tu brazo para que copie? — preguntó frío.

Por un momento pensé que competimos en quien era más seco con el otro.

— Lo siento - hice una voz rara, voz que estaba molesta y que me salía algunas veces — Pero, ¿cómo quieres que escriba? — No quité la vista de la pizarra, ya que estaba copiando.

— Con la mano, duh — respira Hay, no le descuenta el odio aún, vas a salir del salón y eso es lo que no queremos.

Lo vi con una mala cara y pude notar que su ojo estaba morado. Lo miré sorprendida, mismo con esas gafas se notaba el moretón cuando estás cerca.

— ¿Qué te pasó? — pregunté levantándo el tono ya que antes susurrabamos.

— Afuera, están hablando desde que empezaron las clases — iba a protestar, pero el profesor se adelantó — Luego hablo con ustedes — nos miró con una cara de "di peros que los mando a dirección". Salimos da ahí sin nuestras cosas ya que el profe nos mandaría entrar otra vez.

Nos quedamos afuera. Cameron estaba recostado el la pared y yo aún queria saber lo que le sucedió. Soy demadiado curiosa.

Seguro alguien le dio una lección por creerse mucho. Me sentí algo feliz por esa idea pero luego borré mi sonrisa.

Puede que él sea un maldito idiota enojon, pero no puedo quedarme feliz por su ojo morado.

La violencia nunca es la solución.

— ¿Que te pasó? — pregunté otra vez. Él me miró serio y luego miró hacia el techo lleno de telarañas.

— Tuve una pelea con un tipo — dijo sin importancia, yo puse mis ojos en blanco.

— Chicos — suspiré — Vamos a ponerle algo, se te nota mucho — tomé su mano y nos dirigimos a mi casillero. Yo estaba arrastrandolo pero luego él se detuvo.

— Primero, no me toques — rodé los ojos, maldito orgulloso — Segundo, solo es un ojo y tercero, ¿porque te importas tanto? — pregunto el guapo pero amargado moreno.

— Me gusta ayudar a las personas, es sólo eso — abrí mi casillerl y agarré el kit de emergencia. Mi hermana dijo que no era necesario traer esas cosas, pero nunca se sabe cuando se necesitarán. Lo abrí y agarre una pomada con unos productos.

Puse el kit en mi locker para que no esté atajando.

— Quítate las gafas — él lo hizo mientras reclamaba cosas en susurros. Si que estaba horrible su ojo.

Empecé a pasar la pomada en su ojo y él no dejaba de quejarse y moverse.

— Auch, cuidado — atajó mi muñeca con la cual le pasaba la pomada.

— Escúchame Bad Boy, si no te movieras tanto quien sabe dolería menos — Él rodó los ojos y saco su mano de mi muñeca, pasé  cuidadosamente y esta vez no decía nada, aveces se removía porque le dolía, pero no hacía nada más que eso.

Por fin terminé de pasar. No estaba tan hinchado como antes, por lo menos algo bueno.

— ¿Listo? — pregunto serio como siempre.

— Si, está menos hinchado, denada — guardé la pomada en el kit y cerré mi locker.

— Como sea, debemos irnos o el viejo no nos va a dejar entrar si no nos vé atrás de su puerta — mismo ayudándole no puede dejar su orgullo de lado, ¿Que puedo hacer? Es el Bad Boy.

Llegamos ahí y la perilla se estaba abriendo, nos acomodamos como si hace tiempo estábamos aquí. Cameron puso rápido sus lentes y nos recostamos en la pared.

— Pueden entrar, pero ni les ocurra interrumpir mi clase otra vez.

Asentimos y entramos. Todos nos miraron y  luego continuaron escribiendo. Solo espero que pase rápido esta clase.