- Bueno...em, tú eres una chica muy linda y sinceramente me agradas mucho, tenemos muchas cosas en común y... - Solto un gran suspiro antes de continuar - Mavi, ¿Quieres ser mi novia?
Esperen... ¿Enserio lo dijo? No podía creerlo, me puse muy feliz al escuchar aquellas palabras, con una gran sonrisa asentí y el me abrazo muy fuerte mientras me giraba en el aire.
- ¡Es increible! - Exclamo muy feliz con una sonrisa muy tierna.
Nuevamente extendio sus brazos para luego envolverme en los mismos el cuál correspondí, al separarnos se comenzo acercar lentamente hacía mi, se dirijio a mi mejilla y deposito un beso en esta haciendo que me sonroje un poco.
Al entrar nuevamente a casa, desde la distancia de la puerta escuchabamos sonidos provenientes de la cocina y un olor muy fuerta a quemado.
- ¿Estabas cocinando algo? - Preguntó Tae mientras entraba despacio a la casa, con la mirada muy preocupada.
- No, no estaba cocinando nada - Me acerque y me coloqué junto a él, cuando ambos volvimos a inhalar aquél olor que provenia de la cocina, nuestros ojos se abrieron como platos y ambos nos dirijimos apresuradamente a la cocina.
- ¡Espera Mavi! - Gritó Tae, quién tomó un florero que se encontraba en un mueble de la entrada, removió las flores mientras tomaba mi mano y me guiaba.
- ¿Qué estas haciendo? - Pregunté después de aquel acto, cada vez nos encontrabamos cerca de la cocina y Tae pateo la puerta muy fuerta haciendo que se abriera de golpe, como so fuera una pelicula de acción.
Al entrar, Tae con el florero que tenía en manos comenzo a derramar el agua que se encontraba adentro, pero lo único que vimos fueron a unos Agus y Jimin mojados y confundidos.
- ¡No te preocupes Mavi yo te salvo! - Gritó Tae aún con los ojos cerrados, no comprendí el porqué de ese tal acto, pero el era reconocido por realizar tales actos como estos y más incluso.
- ¿Pero qué sucede? - Jimin habló, mientras con una mano se quitaba el agua que tenía en la frente y veía como Tae giraba en circulos con el jarrón en manos creyendo que estaba apagando el fuego.
Trataba de detenerlo, pero él lo seguía haciendo, Agus solo se resistía a aguantar la risa por Tae.
- Tae, no hay nada tranquilo - Lo tomé de los brazos mientras apartaba el florero y lo colocabá ensima de una mesa.
Cuando Tae abrió los ojos, comenzo a tambelear por todo el lugar lo sujetabamos para que no cayera, hasta que lo sentamos en el sofá de la sala.
- Creímos que la cocina se estaba incendiando, por eso se comporto así - Les dije a ambos quienes aún estaban confundidos por todo esto.
- Debió ser el olor de las galletas que quemamos - Jimin comenzo a reir después de decir alquel comentarió.
Aclaramos la situación y Tae ya calmado, comenzo hablar y también tratar de decirnod el porque de su comportamiento, aunque ya lo había dicho.
- Bueno...estoy mejor - Dijo Tae mientras se posisionaba el el sofá para levantarse - Ire por un vaso con agua - me mostró una sonrisa la cual le devolví y al ponerse de pie quedando a poco centimetros delante del sofá, soltó un leve gritó cuando se cayo al suelo, haciendo que Jimin comenzara a reír sin control.
- Estoy bien, no ha pasado nada - Dijo Tae desde el suelo mientras nos observaba a todos.
Como dije, Jimin no contuvo la risa lo que molesto un poco a Tae y como broma se puso de pie lo más rapido posible, se quitó un zapato para después tirarselo a Jimin que después de sentir algo chocar con su cara paro de reír mirando a Tae de forma seria, esta vez era Tae el que no podía contener la risa provocando que haya una pequeña guerra entre ellos lanzandose cosas entre sí, Agus y yo concordamos que ellos ordenarían todo el desastre que provocarón arrojando nuestras cosas, aunque su pelea nos sacaba un montón de risas.
