Jueves.
*Volver a empezar y de nuevo sentir algo, nunca estará de más.*
Uriel me ha convencido de hablar con ella, me ha dicho que no puede estar tan mal intentarlo. Una vez más ha ocupado su frase "El que no arriesga no gana" y bueno, creo que yo también voy a empezar a adoptarla. Ahora con más razón después de este día.
Me lo imagine de una forma más catastrófica, me lo imagine tan mal, que ahora me doy cuenta que es verdad que me subestimo mucho, (Como aquella chica siempre me decía).
Aunque no fue fácil, logré acercarme a pesar de que no había ningún pretexto. Solo me aproxime y comencé una plática casual.
Se veía tan linda, tan radiante.
Mientras la conversación se mantenía, no podía dejar de mirar sus labios y sus hermosos ojos marrones, su voz era como una melodía para mis oídos, una verdadera sinfonía.
El camino de regreso a casa fue bastante bueno, de hecho, el mejor en estos últimos meses. No paraba de imaginar la sensación de tomar su mano y sentir la textura de su piel. Me repetía una vez tras otra "Qué perfecta es".
¡Vaya!, tenía tanto tiempo que no pensaba en la perfección de alguien y en como una sola persona te puede hacer sentir cosas tan bonitas.
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En los azares del destino.
Romance"Lyla", solo una palabra y a Kilian parece llegarle una infinidad de sensaciones al recordar aquel nombre, ¿odio?, ¿amor?, ¿nostalgia?, tan solo recuerdos... En este relato conocerás las dos caras del amor, o mejor dicho, cuando este está en su fin...
