Algo diferente

Un sitio ¿Bonito?

Este chico me encanta. Se nota que le gusto de verdad... Y bueno creo que también se nota que me gusta, esa sensación de nerviosismo mezclado con entusiasmo y muchas ganas de verle, no se tiene con cualquiera la verdad. Pero bueno, dejando ya a parte mis sentimientos o los suyos sobre ambos, quiero hablaros de algo que nos pasó a los dos.
Quiero dejar aquí testificado que pasó aquello, para que en un futuro cuando se me olvide todo esto, lo lea de nuevo y así nunca poder olvidarlo, además de que así mucha gente conozca esta experiencia a ver si le ha pasado también.

Todo comenzó una mañana cualquiera, yo me desperté sobre las 10 a.m más o menos (algo más temprano de lo habitual), desayuné (un trozo de pan solo) y me fui corriendo literalmente, porque habíamos quedado él y yo para eso mismo, hacer algo de ejercicio. No teníamos ruta prevista, nos dejábamos llevar por la intuición.
30 min después, aún seguíamos corriendo, yo al menos algo más exhausta, él no se, pero supongo que si... Todo eran cuestas o escaleras. Sinceramente, no sabía donde nos habíamos metido. Era un lugar muy bonito pero a la vez muy raro, me explico , no vimos a nadie más a parte de nosotros, bueno, miento, vimos a algunas personas asomadas a las ventanas, pero justo cuando pasábamos las cerraban rápido y se escondían. No entendía nada.
10 min después llegamos a un mirador de la ciudad ¡Tenía unas vistas espectaculares!
Hicimos una parada para descansar un poco, así mismo nos sentamos en un banco que daba vistas al gran paisaje, uno al lado del otro, sin mirarnos, sin apartar la mirada del paisaje. Parecía habernos absorbido.

En ese momento yo sentía la necesidad de besarle. Sería nuestro primer beso. Pero no me atrevía a dar el ese paso y parece que él tampoco. Así que seguí observando las grandes vistas.
De pronto, sentí como si alguien me acariciaba la nuca. Fue muy agradable, quería volverlo a sentir. Y así fue. Ay... Que caricia más suave y reconfortante. Le quería decir que me encantaba pero me daba miedo que si le decía algo parase. Aunque parece que no hizo falta decir nada para eso. Así que le dije:

-Oh vaya, has parado. Me estaba gustando.
(Se quedó mirándome como si lo que había dicho no fuera para él)
-Holi, ¿Me escuchas?
-Ay, claro que te escucho, pero es que no había entendido lo que habías dicho, ¿Él qué te estaba gustando? Y ¿Qué he parado?
- jajajaja que gracioso eres, no te hagas el tonto, que te lo decía como un cumplido
-Oye, ya hablando seriamente, yo no te he tocado ni hecho nada.
-¿Cómo? ¡Pero si me estabas acariciando la nuca! No entiendo a que viene decir eso...
- ¡Qué yo no te he hecho nada de eso! ¿Vale?
-¡Ok!
Mi última respuesta fue muy borde, no entiendo a que venía esa manera de tomarme el pelo. Parece que me equivocaba en la idea de que yo le gustaba de verdad.
Justo después de lo sucedido, le miré con cara de medio enfado, el me dirigió otra pero en cambio la suya era una mirada sorprendido y extrañado. No entendía nada la verdad.
En un momento en el que nos estábamos mirando, él cambia de pronto de expresión, a la de muy sorprendido y extrañado. De hecho, dio un pequeño salto del banco.
Le pregunté que que le había pasado, y me dijo que había sentido como si alguien le tocase el pelo y el culo.
Al oir eso empecé a partirme de risa, me parece que ya entendía todo. Era una de sus bromas.
Muy asustado me dijo que me callase que se quería ir de ahí, él de verdad no me había tocado y que parece que yo a el tampoco, pero había sentido como si alguien lo hubiese hecho.
Mi mirada cambió totalmente. Ahora estaba asustada. También me quería ir. Así que le cogí de la mano, y tiré de él para irnos rápido de ese lugar.
Cuando ya nos estábamos yendo, sentimos como si alguien estuviera poniendo sus manos sobre nuestras espaldas, así mismo empujandonos. De hecho, eso hizo que nos fuéramos más rápido, no porque tuviéramos más miedo y aceleraramos el paso, que también. Si no por el impulso que nos dieron por detrás .