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Para BaekHyun, salir del servicio militar no le entusiasmaba tanto como pensó. El servicio había sido, extrañamente, como unas vacaciones para él. Tuvo entrenamiento por dos años, pero no tuvo que ir de gira en gira, descansando muy poco. Planteó quedarse un año más, pero sabía que de hacerlo tendría que permanecer al menos otros 4 años y luego darse de baja, y no era exactamente lo que quería. Con el poco equipaje que llevaba, tomó un taxi que le llevara al edificio de la SM porque todavía tenía pendientes.

—Arreglaremos tu servicio, pero piénsatelo dos veces. Cuando vuelvas, tendrás que confirmar tu salida de EXO—. Había dicho ZiTao, como si no creyera que BaekHyun no quisiera regresar a ser un idol. Pero había cumplido con su contrato de 10 años, no se sentía con ganas de seguir después de eso. Su corazón dictaba otra cosa.

Saludó a todos a su llegada al edificio en donde había vivido por diez años, y se había despedido de ellos de antemano. Anunció su retirada ante ZiTao y SooMan, que había ido a recibirle, y abandonó el edificio sonriente, como si se hubiera quitado un gran peso de encima. Tomó un autobus a Bucheon, porque quería ir a casa y ver a su familia después de tanto tiempo. Su madre le recibió con sorpresa.

—No sabía que ibas a venir—. Dijo abrazándolo fuerte. Llamó a su padre, quien estaba en la sala y después llamó a su hermano por teléfono. Celebraron juntos la llegada de BaekHyun. Su madre preparó una cena especial con ayuda de su recién llegado hijo.

Por la noche, BaekHyun se paró en la ventana de su antigua habitación y observó las luces de la ciudad. Su día había sido maravilloso, pero tenía mil pendientes. Checó su cuenta bancaria por internet y luego fue a la sala, donde estaba su madre.

—Tengo que contarte algo—. Dijo mientras se sentaba frente a ella. La mujer bajó el libro que estaba leyendo, le vio curiosa y dijo:

—No habrás matado a alguien, ¿verdad?— BaekHyun rió.

—No, es sobre algo que sucedió hace mucho tiempo.

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El centro Park era una institución ubicada en Los Ángeles que ofrecía una segunda oportunidad a personas sin hogar. Les rehabilitaban en caso de tener alguna adicción, les ofrecían asilo un par de días, y preparaban su vuelta a la comunidad. Ofrecían, también, la oportunidad de terminar el colegio y adquirir una carrera técnica para conseguir un empleo mejor. Su fundador era Chanyeol Park, guitarrista principal de la banda The Foreigners, quien se encontraba, en ese momento, revisando cómo funcionaba el lugar. Había aprovechado que tenía unas vacaciones cortas antes de iniciar su gira para hacerse cargo del centro por su cuenta por un par de días, y para revisar también el avance del nuevo restaurante de comida asiática que planeaba abrir no muy lejos de alllí y que iba a ayudar a muchos de sus internos recién rehabilitados a conseguir empleo.

Chanyeol se encontraba en el jardín del centro, jugando con algunos de los niños a los que daba asilo cuando su secretaria llegó avisando que una tal YooRa había ido a verle. Chanyeol se sorprendió un poco, por lo repentino que podía ser la visita de su hermana, pero no dejaba de ser agradable. Pasó antes al baño a lavarse las manos y se secaba con una toalla pequeña cuando entró a su oficina y le vio sentado en el pequeño sofá frente a su escritorio.

—Tú no eres YooRa—. Dijo visiblemente molesto. BaekHyun le sonrió nervioso.

—Hola, Chanyeol.

—¿Qué es lo que quieres? ¿Por qué te haces pasar por mi hermana de nuevo?

Chanyeol se sentó en la silla de su escritorio, lanzando la toalla lejos y con fuerza. BaekHyun posó sus manos en los reposabrazos y jugó con sus dedos intentando calmarse.

The Ring [CHANBAEK]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora