Capítulo único

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Tomó una gran bocanada de aire y silenciosamente se dió ánimos asi mísmo. Estaba nervioso pero listo.
Llegó a la puerta del Hope world y sin permiso alguno, Jungkook, con un cafe entre manos, entro al estudio de su alegre hyung. Este lo vió sorprendido pero en ningun momento le negó el paso

—JungKook, ¿qué haces aquí?

—Queria traerle un cafe hyung

Hoseok se sentía algo frustrado por la presencia del castaño y aúnque le encantaba que el pequeño chico le hiciera compañía, seguía molesto y triste, por su culpa. Si el seguía allí estaba seguro de que no aguantaría las ganas de volver a abrazarlo y besarlo

Exasperado, volteó su silla para poder mirarlo directamente —Te he dicho que no queria verte hasta que tengas una respuesta, no vuelvas esto más difícil para mi, ¿esta bien?— La situación no podía ir a peor, Hoseok ahora nisiquiera quería verlo

—Pero hyung yo...

—¿Esta bien?— repitió autoritario

—Esta bien— resignado, salío del estudio no sin antes dejar el café en el escritorio del contrario

Cuando Hope escuchó la puerta cerrarse, suspiró y agarró el vaso de café para examinarlo.
Era su café favorito, el que solo el maknae sabía hacer. El amaba ese café, casí tanto como lo amaba a el.

💐

Al llegar a su cuarto, Jungkook se arrogó a su cama boca abajo cubriendo su rostro con su almohada, frustrado.
Le dolía que su hyung lo tratase de esa forma, solo porque no tenía una respuesta concreta. Aún se sentía inseguro sobre que debía responder. Pero ¿por qué?.

Ya habían pasado unas semanas de esa repentina declaración por parte de Hoseok, y Jungkook se sentía indeciso para responder, pero no esperaba que su inseguridad provocará que su hyung lo ignorara como lo estaba haciéndo. El no quería estar sin sus abrazos y besos. No quería dejar de ver sus sonrisas. No quería dejar de escuchar su voz. A pesar de todo, Jungkook no quería perderlo.

💐

Semanas atrás

Jungkook, había empezado su día como todos. Se duchó, vistió y bajó a desayunar. Era día libre y su único plan era jugar videojuegos todo el día. Ninguno de sus mayores parecía estar en casa y eso hacía de su mañana aún más perfecta.

Se sentó en el sofa de la sala de estar para comenzar a jugar y se pusó cómodo. Cuando estaba a punto de empezar, el sonido de unos pasos llamaron su atención e inevitablemente miró quien era la persona que los provocaba

—Hey, JungKook

—Hola Hobi hyung. Pensé que no había nadie en casa, Jin hyung iba a salir hoy y creí que todos irían con él— habló, restándole importancia al tema —Podriamos jugar videojuegos hasta que los demas vuelvan, puede sentarse a mi lado si quiere— sonrió mostrando sus lindos dientes de conejo y le hizó un espacio a su hyung para que se sentase a su lado

Hoseok sentía morir de la ternura con el chico que estaba sentado en el sillón, quería acercarse a el solo para llenarlo de besos y abrazos. El provocaba que su corazón latiera con fuerza, que el aire llegara a sus pulmones de manera dificultosa, que sus manos sudarán y que sus piernas temblaran. Se sentía muy nervioso frente a aquel chico.

Jungkook no había notado como Jung jugaba con sus manos nervioso y tampoco noto el ligero sonrojo de sus mejillas

—Yo... debo decirte algo Jungkook. Es importante asi que debes escucharme, ¡por favor!

¿Amor o confusión? - HopekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora