Otoño primaveral.

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Mientras escalaba las montañas blanqupiceas de una provincia prohibida

Una luz tenue adornaba el paisaje como un claro de luna

De pronto me eleve en medio de aquellas dos nubes delicadas y suaves que humedecían mis ropas

Podía sentir como la brisa de aquel cabello de fuego acariciaba mi pecho
Mientras la llovizna del atardecer inundaba mi lecho

Entre tanto caí de súbito en medio de un valle primaveral de tonos cálidos

Era primavera y también otoño en aquel valle

Tonos rojizos y cafés adornaban todo el entorno

Mientras caminaba por las colinas, mis dedos acariciaban aquel horizonte.

Dos cascadas bañaron mi alma y saciaron mis demonios
Derrochando en mi boca la embriaguez del deseo

Aquella noche descubrí el infierno mientras habitaba el cielo
Me sumergí en la séptima terraza del purgatorio
Y probé el elixir del pecado
Mientras me bañaba en el río de los deseos

Entre tanto una canción recurrente deleitaba mis oídos

Mientras los brazos recurrentes de dos hermosas ángeles rozaban mi espalda
Una era fría y la otra era calor
Una era luna y la otra sol
Era un oasis en pleno cielo

Las pude acariciar sin prisa mientras volaban a mí alrededor

Pero en seguida descifre una calidez que era un tanto peculiar en aquellas criaturas
Danzaban en el aire y el cielo se hacía más negro

Solo había una luna en aquel sueño

Iluminando la escena de un beso desesperado por parte de dos cuerpos angelicales

Deiformes figuras vestidas de nada, Pues la desnudez vestía como porcelana sus pieles.

Parecían unirse en aquel baile unísono
Que de pronto se adueñó de mi cuerpo
Elevándome en ellas con su furtivo baile sin celo.

Girones de piel se cruzaban por mi paso

Pude alcanzar aquellas dos nubes voluptuosas y besarlas con mis manos,
Mis dedos tocaron melodías inconcebibles en aquellos instrumentos celestiales.

Era el cielo y el infierno fundiéndose en medio de mi alma ilusoria

Inundando mi piel y calando mis deseos

Rasgando mí pecho
Llenando mis manos con la opulencia de sus cuerpos
Deleitando mis ojos con sus caricias compartidas
Absorbiendo la esencia de mis besos
Y unificando cada parte de nuestros cuerpos


Fue la comunión de tres fuerzas que sin recelo

Fundaron en simetría la composición del universo.

Poesía. "Entorno a la luna"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora