CHAPTER I.

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15 de Agosto - 4:00 pm

- "¡Corten!"

El productor gritó logrando que su voz hiciera eco por la pequeña habitación, acompañado de un movimiento con su mano izquierda por sobre su cabeza como si estuviera tratando de ahuyentar una mosca o algo por el estilo.

Florencia Estrella estaba en la mitad de su diálogo sobre el feminismo y el poder que el concepto en cuestión ha tomado en los últimos años cuando el productor la paró antes de poder terminar de formular la oración.

Flor tragó saliva, tratando de volver a la realidad y relajar sus facciones de actriz seria y comprometida que adoptaba cada vez que asistía a castings. Inhaló hondo, tratando de controlar los nervios que la habían acompañado desde el momento en que pisó ese lugar.

Eso es todo. Este es mi momento.

Sonrió como pocas veces una persona sonríe en el día. Una muestra de pura satisfacción y alegría. - "Bien... ¿Cuándo empiezo?"

El productor, un hombre de apariencia física poco agradable para la vista de Flor, largó una risa amarga desde lo más profundo de su garganta al mismo tiempo que ladeaba su rostro para encontrarse con la mirada de su compañero, otro hombre de apariencia física poco agradable. Le murmuró algo en el oído que Florencia no pudo descifrar en lo absoluto antes de girar su atención de regreso a la chica.

- "Me temo que no eres exactamente lo que estamos buscando. Gracias por venir."

Los ojos de Flor se abrieron como platos, totalmente incrédula. No podía evitar sentir cada fibra de su cuerpo invadirse con la amarga sensación de derrota. Por un segundo logró detener las palabras dentro de su boca, pero cuando el productor y su colega le dieron la espalda con la clara intención de abandonar el pequeño salón de castings, no se contuvo más.

- "¿Cómo que no soy lo que están buscando?" - elevó la voz, causando que el susodicho se girara sobre sus talones. - "Esta es la tercera vez que me llaman para pedirme otra audición. ¿Si no era lo que estaban buscando por qué no me lo dijeron la primera o la segunda vez que me llamaron?"

Flor no era de esas personas las cuales dejaba que una mala audición les afectara a tal grado de ponerse a discutir con los encargados de dicha tarea. Después de todo, así era esta profesión; siempre existía la posibilidad de que no consiguieras el papel, sin importar que tanto te esforzaste o que tan apasionado eres.

¿Pero esto? Esto era bastante parecido a no haber comido por días, semanas inclusive, y que te pusieran un filete de la carne más exquisita de todas frente a ti tan cerca que podrías ser capaz de olerlo. Está cocinado a la perfección, y si no tenías hambre antes, ahora estás que mueres. Comienzas a correr y a saltar obstáculos para llegar a ese filete, ese que tiene tu nombre en él, preparas la mesa con dos velas, te sirves una copa de vino y todo.

Pero de repente llega un productor idiota con el peinado más ridículo de todos y la campera más horrible que Florencia había visto en su vida para quitarte ese filete de carne y decir alguna estupidez como "Oh, ¿Tenías hambre?"

Los actores siempre tienen hambre.

No era como que Flor nunca había sido aceptada en otros castings, porque sí que había realizado otros proyectos anteriormente, pero el saber que probablemente se perdió de muchas oportunidades por darle la mayor importancia a esta pensando que podría ser su primer estrellato ocasionó que el rechazo significara más.

- "Mira, Lucrecia---"

- "Florencia." - lo corrigió por tercera vez en el corto encuentro, ya bastante exasperada. Rodó sus ojos, tratando de hacerlo lo más exagerado y visible posible. - "Me llamo Florencia."

Amnesia. {Flozmin}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora