Me desperté gracias a unos ruidos muy fuertes, hasta que me despejé y me dí cuenta que era mi vieja con la cumbia a todo volumen, me tapé la cabeza con la almohada e intenté apaciguar el molesto sonido que interrumpía mis dulces sueños, no me desagradaba la cumbia pero la prefería a un horario más normal y no un sábado a las diez de la mañana.
Dándome por vencida bajé las escaleras y me fuí a preparar café, aunque sea verano me daba igual, con el café no se jode.
Mi mamá al verme puso cara de culo y yo le sonreí con inocencia.
- Te podés vestir que está tu papá y tu hermano? Tené un poco de respeto nena ya te dije - otra vez con lo mismo, uno no podía andar con una remera grande sin corpiño que ya te rompían los ovarios, me hice una tostada y me senté en la mesa, ya me habían cagado la mañana dio mío.
Miré a mi papá que estaba en la computadora con cosas del trabajo y mi hermano estaba distraído con un gameplay de Minecraft, era igual ya que ninguno me prestaba atención así que para que molestarme.
- Después de comer me cambio
Terminé el café y la tostada, lavé la tasa y me fuí a cambiar.
Me puse una remera suelta y un short blanco junto con mis zapatillas negras.
Al bajar las escaleras mi mamá otra vez estaba ahí lista para revisarme.
- Te depilaste no?- levanté los brazos y comprobó que me había pasado la Gillette un día antes, aunque lo tendría que hacer otra vez mañana ya que el pelo me crece súper rápido, si así crecieran mis esperanzas...
No sé qué manía tenía con los pelos si eran de lo más naturales y mi vieja estaba peor que Hitler.
Salí a las clases de teatro aunque insistiera en llevarme ella, no sé qué tenía con tratarme como una nena a pesar de tener ya los 16 añitos y faltaba poco para los 17.
Al salir a la calle hice tres pasos y un hombre no dejaba de mirarme, yo arqueé una ceja esperando a ver que quería pero solo me miró lacivamente provocándome terrible asco, rodé los ojos y dejé de prestarle atención, seguro ahora estaría viéndome el culo.
Seguí mi camino hasta la casa de Trish y llamé como niño que pierde la pelota.
- Triiiish- segundos después salió mi amiga con su sonrisa de feliz cumpleaños.
- Hola miamor- me agarró las mejillas y me dió un beso en la frente, yo reí y rodé los ojos.
- Dale, nos van a cagar a pedo- le pasé un brazo por los hombros y seguí el camino a clase de teatro.
Al llegar el profesor nos miró con mala cara y le sonreímos como niñas pequeñas, rodó los ojos y nos dejó pasar al pequeño teatro donde ensayábamos.
- Cath te dejo por hoy, Trish lo mismo- resopló y entramos, satisfechas.
***
Terminada la clase decidimos ir a Starbucks, obviamente nos faltaron los "piropos", los silbidos y las miradas de querer garcharnos pero como siempre las ignoramos, yo hacía bromas y me burlaba de algunos provocando que Trish se riera en todo el camino.
Al llegar pedimos nuestros batidos, yo de chocolate y Trish de un sabor raro que no llegué a entender, como siempre ponían mal mi nombre, lo que me exasperaba, ni que fuera tan difícil. Aún así estaba rico y disfruté mi batido de cheta.
En realidad no me gustaban las grandes cadenas y prefería comprar en un local independiente, por ejemplo Mc Donald's era lo que no quería, hamburguesas caras, el Paty más barato que encontraron y seamos sinceros, la gente va a Mc Donald's sólo porque es Mc Donald's y me parecía una completa estupidez, es que vamos, a ese precio conseguía algo mucho mejor y más rico.
- Tu vieja sigue haciendo chequeo de axilas?- Trish me sacó de mis pensamientos e hizo que soltara una ligera risa.
- Sip, esta mañana hubo- le guiñé un ojo divertida.
- Como sabés me parece una idiotez y no deberías dejar que te controle, si a vos te gusta andar como el peludo de star wars(foto a principio de cap, cofcof) mambo tuyo loca.
- Si pero sabés que soy pacifista y mejor esperar a vivir sola para ser libre- levanté los hombros en señal de que no me importaba
Trish era 100% feminista y la adimaraba, una vez escondió todas las máquinas de rasurar de su casa para hacer enojar a su mamá y lo consiguió, luego de eso tuvieron una gran discusión y ya les da igual la vida de Trish.
Yo también lo era pero prefería llevar las cosas en paz en tema familia así que me limitaba a hacer las cosas sin rechistar, cuando había que discutir, discutía pero no con tanta frecuencia como lo hacía Trish, yo sólo lo hacía en casos extremos. Como esa vez que mi mamá se enojó porque no quería comprarme zapatos para navidad, me parecían un gasto absurdo ya que los usaría una vez y luego volvería a mis cómodas zapatillas, finalmente me gustaron unos negros altos tacón aguja y ahí están juntando polvo, si yo hablo al pedo.
Al terminar nuestros batidos salimos del Starbucks y volvimos a nuestras respectivas casas.
Al llegar saqué mi celular y le texteé a Trish
Cathy Can:"Llegaste Loki?"Trishura: "sip, todo bien"
"Un chabón me tocó el culo y le dije que le toque el culo a su vieja ;)"Cathy Can:" lpm pajeros de mier**"
Trishura: "mal jaja pero bueno lo importante es responderles y hacerles ver que no nos intimidan. Besos bebé voy a dormir"
Cathy Can:"chauu".
*** Acepto opiniones y estrellitas ;)***
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Una feminista argentina
Teen FictionNada más ni nada menos que la realidad con un toque de ficción y humor para que no se duerman