-¡¡Mamá, por favor, deja el vaso sobre la mesada!!
La pequeña Hannah de 12 años se escondía detras de un sillón protegiendo con su cuerpo a su hermanito de 9 años y calmando a su madre que, como cada día, tenía un ataque de histeria por culpa del alcohol en su sangre.
Hace 2 años que sufre esos ataques de su parte. Muchas veces llegó a lastimarla de gravedad provocandole días en el hospital. A Hannah, la única cosa que le asustaba de estar internada, era que Sean quedaba a solas con su madre.Siempre quiso tener el valor de poder denunciarla, pero corría el riesgo de ser envíada junto a Sean a un internado o casa de adopción, lo que le aterraba. No tanto por como sería allí dentro porque no tenía idea, sino porque no sabía si podrían llegar a separarla de su hermano, que era lo único que la mantenía con ganas de seguir adelante con su vida. Mucho sufrimiento para tan corta edad.
-¡¡Ayy mi pierna!!
Tercer corte en la pierna que le provocaba su madre en el mes.
***
-¡¡Feliz quince años, Hann!!- Gritaron todos al unísono.
00.00 y todos sus amigos tocaron la puerta. Habían llevado un gran pastel de cumpleaños, mucho confeti, un enorme oso de peluche, y muchos globos rosas colgaban de un cartel que decía "Cumpleaños feliz a la mejor amiga del mundo".
Hannah cerró la puerta de entrada detras suyo y abrazó a todos sus amigos uno por uno.-Gracias chicos, en serio, muchísimas grac...- Un gran golpe interrumpió.- Lo siento, pero no puedo dejarlos pasar en este momento. Si quieren mañana salimos al parque o algo asi ¿Bien? Bien. Los amo, adios.- Entró y cerró la puerta rápidamente.
Ver lo que pasaba dentro de su casa le quitaba las ganas de todo; Su madre corriendo a su perro Mike alrededor de la mesa con una botella de vodka en la mano derecha y la escoba en la izquierda, Mike con un zapato en el hocico y Sean corriendo a su madre para que no golpee al canino.
-Sean, Mike, por aquí.- Se dirigió al final del pasillo donde estaba su habitación y se encerraron los tres en el cuarto. Otra noche más que Hannah debía velar por la seguridad de su hermano, y ahora de su mascota.
-¡¡Hannah abre la maldita puerta!! ¡¡Quiero asesinar a ese perro tuyo!!- Su madre golpeaba fuertemente la puerta del cuarto. Habrá pasado una hora de gritos y golpes hasta que se escuchó como Mary Jane se deslizaba por la puerta, luego vidrio rompiendose contra el piso, la botella de vodka seguro, seguido de un ronquido.
¿Cuánto más iba a aguantar? Ni siquiera sus amigos podían entrar a su casa el día de su cumpleaños. En realidad, nunca. Porque aunque se conocían hace 4 años, ellos nunca pasaron mas allá de la puerta de entrada, tampoco conocían la situación en la casa de Hannah, ningún detalle de su vida. Nada. Absolutamente nada. Eran amigos de una extraña.
***
-...¡Un aplauso a los graduados 2015!
Mientras el director Brown daba su discurso y daba la bienvenida a los graduados, todos los presentes se pusieron de pie y aplaudieron la entrada de los alumnos, entre ellos Hannah.
Sean, su ahora adolescente hermano de 15 años, fue el único que asistió a la graduación. La aplaudía como loco, estaba orgulloso de su hermana. La admiraba demasiado.
-...Y ahora que pase a buscar su diploma, la señorita Hannah Blake.- Aplausos y más aplausos.
Con una gran sonrisa subió al escenario a por lo suyo, abrazó al director y buscó con la mirada a su hermanito. Cuando sus miradas conectaron, agitó el diploma hacia el, enhorabuena. A pesar de todo lo que pasó en su vida, se graduó con las mejores notas, y Sean iba por el mismo camino.
***
-Hann, ¿Puedo preguntarte algo?
-Si, ¿Qué sucede Sean?
-Si mamá no trabaja, y tú no le das dinero para nada. ¿Cómo consigue tanto alcohol?
-Nunca lo pensé, pero tampoco lo sé hermano. Quizás papá le dejó una herencia y la utiliza para eso.
-Hann, por favor, ya pasaron 10 años de la muerte de papá. Es imposible.-Quizá algún dia lo descubramos, o quizá no. Ahora sube tu caja de ropa al camión, rápido.
A los 16 años, Hannah encontró un trabajo de medio tiempo. Con el poco sueldo que ganaba, compraba la comida del día y el resto lo ahorraba.
Ahora, con 20 recién cumplidos y los ahorros de 4 años, compró un apartamento pequeño, para ella y su hermano.En este momento, están subiendo sus muebles y pertenencias al camión de mudanzas para por fín abandonar esa casa de locos. Su madre estaba dormida en el sillón y aprovecharon para empacar todo, dejaron una nota de despedida sobre la mesa, y fueron directo a su nuevo hogar. Ya podrían ser una familia, pequeña y rota, pero una familia al fin. Y felices.
***
-¡Feliz cumpleaños Sean!
Sean abrió los ojos poco a poco y descubrió un enorme desayuno sobre su mesa de noche.
No entendía muy bien lo que sucedía. ¿Hoy era su cumpleaños? No puede ser.-Hann, hoy no es mi cumpleaños.- Dijo confuso
-Claro que si. Marzo 17. Es hoy.-¿¡Hoy es marzo 17!?- Gritó Sean.
Brincó de la cama y se dirigió a su escritorio, abrió 3 libros que tenía sobre éste y comenzó a leer mezclando todo en su cabeza, y copiando cosas en un cuaderno descontroladamente.
Su hermana le hablaba de fondo pero él no escuchaba nada, estaba muy concentrado.-¿¡Sean, qué demonios te sucede!?- Gritó ya cansada.
-Puse una nota en el refrigerador y olvidé leerla, Hann. Viernes 17, exámen de ciencias. ¡¡Lo olvidé por completo!!- Tiraba su cabello mientras hablaba y gritaba.
-Ash, serás tonto Sean Blake.- Hannah se sentó al final de la cama con las manos en su rostro, pensativa.- Solo por hoy, no asistas a la escuela, pero estudias toda la tarde y mañana darás el exámen. Yo le pediré a Joana que haga un certificado médico falso para ti.
-¡Eres la mejor hermana del mundo! Gracias, te amo. Lo haré.
-Como sea.- Rodó los ojos.- Cumpleaños feliz de estudios, tonto.
Hannah cerró la puerta de la habitación de su hermano, preparó su bolso, y se dirigió a su trabajo.
Primer semana de convivencia, cumplida.
------------------
Día de actualización: Viernes.
ESTÁS LEYENDO
Stockholm Syndrome
Novela JuvenilHannah Blake. 21 años. Estudiante de psicología en la Universidad de Santa Bárbara. Tras la muerte de su padre, a sus 10 años, su madre cayó en un pozo depresivo lo que la llevaba a beber desde que despertaba hasta que llegaba la hora de dormir, si...