Cap.6

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Fernanda:
Rayos después de mi primera sesión con mi guapísima doctora(demonios Fernanda deja de pensar en eso) decidí regresar a mi habitación a darme una ducha antes de ir al comedor del centro de rehabilitacion, después de terminar mi ducha me cambié y me dirigí al comedor, me senté en una mesa sola después de a ver agarrado mi merienda, estaba tan concentrada en mi bocadillo, que no me Di cuenta que 3 chavas un poco después estaban enfrente mío, una de ellas era alta, morena y con unos ojos color café, la segunda chava era güera, un poco más chica que la otra y ojos color azul, y la última era más bajita aún, pelo rojizo y ojos verdes, unos minutos después se presentaron, la chava más alta se llamaba: Vanessa, la segunda: Lindsay, y la tercera: Eliza, se ven buena gente pensé, obviamente no iba a ser tan grosera y no decirles mi nombre:-Mucho gusto, me llamo Fernanda-,alto dijo una de las chavas:-¿tu eres la drogadicta y alcohólica lesbiana?-,diablos pensé,-si soy yo :-, algún problema.
-si-me contestó, el problema es que tenemos cero tolerancia a las tipejas como tu,
-Vanessa, basta déjala en paz-, le dijo Lindsay, en ese momento no se que fue lo que me invadió pero me sentía impotente, así que no lo pensé y le habente lo que quedaba de mi merienda, creo que la regue puesto que Vanessa se levantó bastante molesta, y me dijo:-Por ahora no te voy a hacer nada puesto que eres nueva aún y no has visto nada, pero espérate unos días, y tu vida aquí se volverá un infierno total y absoluto, así que cuidate ratita-,-Chicas vámonos-dijo Vanessa, en ese momento el miedo se apoderó de mi, porque no se pero lo hizo y no se siente bonito, pero alto como se enteró de que era lesbiana, no creo que sea quien creo que es, porque Vanessa se me  hace conocida, se parece mucho a mi ex mejor amiga, oh no demonios, no puede ser ella, se supone que ella debería estar en el centro de rehabilitación de Inglaterra no aquí, no donde se que ella puede echar mi vida a perder, no donde yo tenga que soportar sus abusos desde que se enteró que me gustaban las mujeres, no sabiendo que ella me engaño aquella noche en mi casa, se supone que ella había perdido contacto conmigo desde que le dije que se marchara de mi casa y dos días después llegó tomada, se supone que habíamos perdido contacto pero no ahora recuerdo que bebía para olvidarme de que teníamos contacto, y ahora que la volví a ver va hacer difícil para mi, no quiero volver a llorar por ella, pero el beber se volvió costumbre, se volvió adicción y necesito quitarme la, porque a pesar de que lo había negado por años, tengo que aceptar que estoy mal.

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