Secuestrada Para Amar

capítulo 8

Naraku jadeó y capturó sus labios de nuevo en un beso abrasador. Él bajo su yukata  aún más de sus hombros.y gruñó de una manera complacida cuando pudo ver completamente sus pechos entonces capturó un pezón, chupándolo y lamiéndolo con avidez.

Kagome jadeó y se arqueó en su boca, su mano fue a su cabello con sorpresa.ella había estado esperando que sucediera algo, pero no esto. Kagome podía sentir su mano explorar su cuerpo; él le estaba mostrando una nueva perspectiva de cómo podría ser el sexo.

Kagome:¡Naraku!-jadeo su nombre cuando su mano separó su yukata aún más.el calor de su cuerpo, aún cubierto por su propia ropa, presionó suavemente contra ella.

Naraku gimió cuando comenzó a besar su pecho y luego se movió más bajo, beso a beso. Cuando la había tomado por primera vez no se había tomado el tiempo para disfrutar de su cuerpo. Pero ahora, ahora que ella estaba dispuesta, podría tomar todo el tiempo que quisiera para explorarla .ella se arqueó contra su boca mientras el mordisqueaba suavemente su estómago plano.

Naraku:No será plano por mucho tiempo-pensó mientras abría suavemente y con cuidado sus niveas piernas

Kagome no podía creer que él fuera lento y cuidadoso con ella, no con la forma en que la había tratado la última vez. Ella jadeó cuando sintió sus colmillos cavar suavemente en su estómago.Él no perforo su piel, pero había lo habia sentido extrañamente placentero  ahora ambas manos pararon en el cabello de Naraku para  enredar sus dedos en su cabello largo y oscuro. Cuando ella sintió que le empujo las piernas  suavemente, ella vaciló. Desde ese día, Naraku no había hecho nada con ella Y  Parte de ella estaba asustada de que  doliera tanto como cuando el la  violo.se mordió el labio y miró a Naraku con miedo.

Naraku:No te lastimaré, Kagome-susurró él mientras se inclinaba sobre ella, una mano sobre su estómago para sostenerla hacia abajo y la otra sobre su muslo interno derecho. -Confía en mí- añadió mientras se inclinava sobre su sexo y movía la lengua para saborearla.

Él sonrió mientras ella jadeaba y se  arqueo contra su mano y su boca. Él se rió entre dientes y sus ojos rodaron en su cabeza mientras la saboreaba.ella era celestial Su olor almizclado rodeó sus sentidos mientras él hundía su lengua en su núcleo, donde podía saborear su dulce miel.

Kagome gimio al sentir su lengua rodear su clítoris y luego sumergirse en su núcleo.tenía los ojos muy abiertos y los dedos enterrador profundamente  en su cabello,y sintió  sentimientos que nunca antes había sentido que invadieron su cuerpo y su mente.

Naraku mantuvo un ritmo lento, disfrutando del sabor de Kagome. Ahora era su oportunidad de explorar su cuerpo y disfrutar de ella. Él le daría tanto placer que nunca dudaría de su amor por ella.

Cuando sintió el primer pequeño orgasmo de Kagome, Naraku se sentó sobre sus rodillas.ante él estaba  Kagome, jadeante, enrojecida y complacida. Sus mejillas eran de color rojiso, su pecho se agitaba por respirar tan fuerte. Una mano había caído sobre su estómago y la otra sobre su pecho cuando se había sentado. Sus ojos estaban medio cerrados y ella lo miró con placentera satisfacción. En ninguna parte vio vacilación o confusión, enojo o nerviosismo.ella había aceptado lo que sucedería y se estaba entregando voluntariamente a él. Naraku cerró los ojos con los de ella mientras cuidadosamente comenzaba a quitarse la ropa. Sus ojos nunca dejaron los suyos, incluso mientras se levantaba para quitar sus hakamas.él se arrodilló nuevamente entre sus piernas una vez más y se quedó completamente quieto, permitiendo que Kagome lo mirara tanto como él la miraba a ella

Lentamente, sus ojos se apartaron de los suyos y recorrieron su cuerpo, su rubor se hizo más profundo mientras miraba los músculos bien tonificados. Muy pocas cicatrices dañaban su piel y su pecho estaba ligeramente espolvoreado con risos oscuros.sus ojos no fueron más allá de su estómago, su mente todavía era inocente y penosa evitando la parte más sexual (suculenta 7w7)de su cuerpo.