Capitulo 28

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La tarde pasaba con calma, Ruby había llegado a su casa con calma, en compañía de Karen, encontrándose con sus padres preparados para salir, no entendió del todo aquello pero decidió no renegar nada al respecto, la castaña lucia incomoda pero no hizo mas que permanecer callada.
-¿A donde vamos a ir?- exigió una respuesta la chica pelirroja, su padre miro a la castaña de ojos azules a su lado, le pareció familiar, miro a Ruby con un gesto amable.
-La abuela nos ha invitado a cenar, hace mucho que no la vemos, comportaré bien- dijo su padre con gusto, le alegraba cenar con aquella mujer, Ruby refunfuño.
-No soy Craig no tienes que hacerme esas advertencias, digo, desde que termino con su novio ni siquiera quieres tocarlo con un palo ¿Sientes pena por el?- comento la chica burlonamente, Karen la miro con severidad al igual que su padre.
-¡Ruby!- dijeron al unísono, Karen seguía perdidamente enamorada del muchacho, lo cual le producía dolor al saber que este sufría, eran cosas simples, había aprendido a ser feliz con la plenitud de su ser amado, pero le hacia sentir mal que Craig no se esforzara por su propia felicidad, le generaba frustración.
-¿Que? Ahora son los protectores de Craig, vaya tontería- dijo Ruby divertida, Karen miro a la pelirroja con vergüenza.

-Basta Ruby, ve por lo que necesites, vendrás con nosotros, tu hermano debe estar trabajando así que solo iremos nosotros tres- dijo su madre repentinamente, la señora Tucker había entrado en escena, miro a Karen con ellos, la pequeña castaña saludo tímidamente.

-Oh Karen cariño ¿Quieres acompañarnos?- dijo Laura mirándola con amabilidad, Ruby rogo con las manos a espaldas de su madre, la castaña solo asintió algo insegura.

-Bien, vayamos o será muy tarde, espero que la ventisca no nos tenga atrapados-

-Si, eso seria horrible, atascados en la casa de la abuela- dijo Ruby burlándose, su madre la miro retadora, a lo que la pelirroja solo frunció un poco el ceño y volteo a otro lado.

-Gracias por venir con nosotros... de no ser así me aburriría mortalmente- dijo la Tucker más joven a su amiga, que solo sonrió con dulzura, no le parecía ningún problema aquello.

La familia iba en auto a la casa que se encontraba a las afueras del pueblo, cuando la ventisca comenzó, un fuerte viento con granizos y nieve golpeaban el auto con cierta delicadeza, pero los golpes se escuchaban cada vez mas fuertes y violentos, Thomas algo desesperado apresuro su llegada, una mujer de edad avanzada salió abrigada a recibirlos, miro a Thomas con cierta duda en su rostro

-¿Dónde esta Craig?- dijo la señora algo decepcionada, no era ningún misterio su predilección por el pelinegro, quizá era la incomprensión de la familia al chico o el parecido que tenia Craig con su abuelo, no importaba en realidad, Thomas se sintió mal al ver el rostro triste de la mujer.

-Oh abuela lo siento, Craig esta trabajando ahora, quizás venga después- dijo Ruby dulcemente abrazando a su abuela, la pelirroja se sentía algo celosa.

-Entren a tomar algo caliente parece que la tormenta recién empieza- dijo la mujer, la familia ya en la casa sentados junto al fuego notaron el terrible clima que se avecinaba aun, Laura se preocupo en extremo.

-Thomas necesito que llames a Craig y le digas que se vaya a casa ahora mismo- dijo la mujer con angustia en su voz, Thomas frunció el cejo algo preocupado también, saco su teléfono celular y marco el numero.

El teléfono timbro, cuando por fin fue contestada la llamada

-¿Craig? Si, si, necesito que vayas a casa ahora mismo... la tormenta Craig, es demasiado fuerte, regresa a casa antes de que te quedes atascado ahí, si, ten cuidado hijo... te quiero, adiós-

Cuando Thomas colgó, las mujeres presentes lo miraron sorprendidas, casi al borde del shock, Thomas solo suspiro avergonzado.

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