Sentimientos.[ErrorInk]

18.

Error estaba sentado en un tronco de arbol cortado.

Miraba el colgante que llevaba...

Recordo lo que le habia dicho su abuela.

"Era una muestra de puro amor"

Se supone que este colgante no le haria daño a Ink.

Ya que al ser una Quimera...

Pero...

¿Como fue posible que este colgante le salvara de su inminente muerte Por Ink?

Se supone que no le haria daño.

-¿Como es que evitaste me matara?...¿Acaso ahora ya no tienes especificaciones?- hablaba solo, mas bien, al colgante, el cual no le responderia por obvias razones.

-¡Oh, Hola Error!- Saludo Blueberry acercandose.

-¿Que quieres?¿Y ese milagro que Cross no esta contigo?-dijo entre dientes Error.

-Yo tambien tengo mi vida, no me la paso siguiendolo siempre...-

-Como sea...-

-Queria acompañarte, te he visto decaido... ¿Te pasa algo?-

Alfinal ambos pasaron el rato, Caminaron un poco y hablaron.

Obviamente Error no le dijo a Blueberry lo que este sabia sobre la Quimera.

Se quedaron sentados en el pasto.

Habian hecho tantos paseos y caminado tanto que ambos estaban muy cansados, por ello pararon a descanzar.

-Blue.-

-¿Si?-

-¿Puedes odiar a alguien que amas?-

-No lo sé.-

Error solo suspiro, miro su colgante por ultima vez y termino cayendo rendido al pasto dormido.

De veras que ambos estaban cansados, y más Error.

Blueberry miro al de cabello azabache.

-...Lo siento...- El de pañuelo celeste le quito el colgante a Error.

Luego se levanto del suelo y comenzo a caminar a la ciudad.

A mitad de camino se encontro con Cross.

-Ten.-Blueberry le entrego el colgante.

-Te lo agradezco tanto...-

-Solo... no menciones nada.- Luego Blueberry volvio con Error, almenos debia de dejarle en casa.

Cross miro el colgante sonriendo.

Su plan iba a la perfeccion.

Eran las 9:35pm.

La bestia habia decidido aparecer denuevo.

A causar mas panico y terror.

Otra vez puso sus patas en el suelo y comenzo a lanzarles fuego.

Mientras Ink venia como estos se quemaban , pidiendo ayuda...

No se percato de que tambien habian personas detras.

Comenzaron a disparar con flechas.

Cosa que Ink se entero al instante, al sentir como aquellas flechas si pudieron dañarle.

Gruñó por el dolor, y miró a los causantes.

Con su fuego feróz los Incinero.

Pero no eran los unicos, aparecieron unos 5 mas, los cuales seguian disparandole.

Ink retrocedia, Cada flecha era como si le clavaran una daga en llamas.

Que poco a poco lo quemaba por dentro.

Cosa Ironica, ya que el tiraba fuego.

Alfinal, por primera vez decidio abandonar.

Comenzo a Volar, alejandose.

Se le dificultaba el vuelo, pero seguia volando.

Antes de poder llegar a su hogar, había caido al suelo en pleno vuelo.

Por suerte, cayó frente a la barrera y el bosque normal.

Se levantó con dolor.
Dando leves gruñidos, hasta que escucho a alguien y se puso alerta.

-Tranquilo, No llevo armas...-Dijo este.

La quimera le observo bien, al parecer no mentia.

-¿Que quieres?- dijo molesto.

-¿No me recuerdas? Ink... soy yo, Cross..-

-Cross...-

-Siempre supe que serias una maravillosa criatura, ¡Ahora mirate! Eres invencible...-

Ink sonrió.

-¿Enserio lo crees?-pregunto la Quimera.

-Si... Invencible... admirable, la mas perfecta criatura creada.-

-Me alegra ver que alguien por fin ve eso...-

-Siempre lo pude ver en tí, un gran potencial...-

Aquellos alagos llenaban la cabeza de Ink.

Se estaba dejando manipular sin darse cuenta.

-¿Sabes? Vi la batalla... te quiero ayudar.-

-¿Ayudarme?-

-Te puedo decir como eliminarlos, ¡Han podido saber cual es tu debilidad! Un soldado...Error se los dio.-

-...¿Rurú?...-

-No, Ink. Error... El te traiciono, hace mucho.-

-El no pudo...-

-Se molesto cuando lo heriste, se dio cuenta... de que preferia entregarte y matarte con sus propias manos. -

-...¿Que debo hacer?-

Cross le dio un mapa.

-Asi es toda la Ciudad, te marque lo que debes de saber, mañana solo debes hacer lo que siempre haces, atacar y matar... Seras poderoso , Ink... La Criatura más temida de todos los tiempos.-

Ink sonrio.

Todas aquellas palabras por parte de Cross , se las habia creido.

Oh, Ink.

¿Donde quedo tu verdadero Tú?