Gracias A Ti.

Todo tiene su fin.

Listo, desidido, nunca más volveré a amar.
Salí a toda velocidad del edificio que es mi hogar y comencé a correr sin rumbo fijo, no me detendría hasta que mis piernas me dolieran, tal vez así podría olvidar el dolor que sentía en mi corazón.
Estoy cansada, siempre, siempre, no importa lo que haga, no importa con cuánta fuerza amé, no importa cuánto me esfuerce, al final... Nadie...

No sé cómo pero termine rendida en la banca de un parque que a primera vista me era totalmente ajeno.
No sé cuántas horas han pasado desde que salí corriendo de casa, pero ya estaba osbcuresiendo. Realmente no tengo ganas de volver a casa pero debo hacerlo, mis padres no tienen la culpa de lo que pasó y no quiero preocuparlos.
Miro a mi alrededor intentando saber dónde rayos estoy, muy para mí sorpresa, después de mirar un buen rato reconozco el lugar, así que me pongo mis audífonos, pongo el aleatorio a todo volumen y comienzo a caminar en dirección a mi hogar.
Camino lento, sin prisas, miro a mi alrededor, las casas, las personas,todo sigue normal a pesar de que siento como si mi mundo se hubiese detenido, el mundo parece continuar, dejándome atrás.

Parece que el mundo conspira en mi contra, porque no pasa mucho tiempo cuando el aleatorio, entre las tantas canciones que hay en mi celular, justo en este momento, en este día empieza a sonar esa canción, esa canción que le dediqué, esa canción en la que indirectamente le juraba amor eterno, esa canción sonaba a todo volumen en mis oídos, destrozando mi alma, provocando un nudo en mi garganta. Mi corazón pide a gritos que la quite, pero aún así no lo hago, no sé porque, pero siento que debo escucharla, como si fuera lo mínimo que puedo hacer, después de todo es mi culpa que pasara esto, siempre es mi culpa, siempre soy yo la que falla.

Después de mucho caminar por fin llegó a casa, parece que ya es increíblemente tarde, las estrellas me observaban en la infinidad, contemplando... Ahora mismo desearía ser una estrella, mirando todo desde lejos, tal ves así se alejaría mi tristeza, pero eso no era posible. Mire al frente, estaba frente a la puerta de casa, vaya sermón me caerá nada más cruzar esa puerta... Bueno... Al menos eso me distraerá un poco.