10

332 70 12
                                    

Somos dos jóvenes y estamos enamorados. Y esta bien si no tenemos otro lugar al cual ir. No te preocupes y vuela conmigo. Toma mi mano, y vivamos nuestro momento.
Por fin estamos en nuestro propio mundo.

Ahora ya no tengo miedo, poco a poco me voy acercando cada vez más a ti, tu dulce sonrisa me lo dice todo. Tan solo bastan unos segundos, para que tome valor. Me inclino un poco hacia el frente, y siento como nuestras respiraciones se cruzan.

Mis párpados caen ligeramente,
con delicadeza tomo tu nuca. Ahora estas cada vez más cerca, no lo puedo evitar y junto mis labios con los tuyos. No dudas en corresponder mi beso, mis labios se sincronizan con los tuyos, con algo de miedo los comienzo a mover delicadamente, probando y saboreando tus dulces y carnosos labios. Mi corazón palpita con fuerza.

No se como aguante tanto tiempo sin probarlos, pero ahora se han vuelto mi droga.

Ahora estoy más que seguro, esta vez no me importa que pase o qué tantas criticas nos vengan encima, yo estaré contigo.

Siento tu calidez y todo mi cuerpo siente un cosquilleo. Esto me parece tan irreal que imagino que estoy soñando. Después de un par de minutos, la falta de aire se hace presente. Pero yo no quiero separarme, lentamente me alejo de ti y abro mis ojos, una sonrisa curva mis labios al ver que sigues frente a mi.

Parpadeo un par de veces y tu aun sigues ahí. Sin dudarlo te rodeo con ambos brazos, no tardas en hacer lo mismo.

Y así es como acabamos, dos jóvenes adolescentes que por fin se muestran al mundo. Tal vez estemos lejos de ser como ellos, pero somos felices y eso es lo que importa.

Delicadamente pego mi oído a tu pecho escuchando los leves latidos de tu corazón, vuelvo a sonreír y me quedo inmóvil, acostumbrándome a ti y nada más.

NeverlandDonde viven las historias. Descúbrelo ahora