uno - caroline forbes [tvd]

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siete de marzo de dos mil veintiocho;

— Hope te está esperando en tu despacho. — Alaric besó la cabeza de la directora de la escuela antes de entrar a su clase.

Caroline cruzó el pasillo para abrir la puerta de la sala. Sonrió débilmente a la joven tríbrida, quien ya se encontraba sentada en una de las sillas. Esta se levantó en cuanto vio a la rubia entrar.

— Papá me ha dado esto por la mañana para que te lo entregase. — La pequeña Mikaelson extendió a la mayor un sobre de gran tamaño antes de abrazarla con fuerza y salir rápidamente del despacho para dirigirse a su clase con Alaric.

En cuanto se quedó sola, Care sacó el contenido del sobre, encontrándose una ilustración a carboncillo de su boda. Las lágrimas comenzaron a correr por sus mejillas. Ya habían pasado diez años desde el aquel día, pero cada siete de marzo seguía siendo igual de doloroso que el anterior.

Varias horas más tarde, una vez las clases hubieron terminado, se dirigió al cementerio de Mystic Falls. Al llegar frente al panteón de los Salvatore, extendió una manta en el suelo y se tumbó sobre ella, mirando al cielo.

— Mira la ilustración que ha hecho Klaus. Es preciosa...

Caroline sacó el papel del sobre y pasó los dedos por el rostro de Stefan, con cuidado de no estropear el dibujo.

— Las niñas están progresando mucho. La pequeña Hope es muy talentosa y se lleva genial con Jo y Lizzie. Es casi como si fuesen hermanas de verdad. Tendrías que verlas en clase, son las mejores alumnas que tenemos. ¡Oh! Mañana iré a comer con Elena y Damon. Tus sobrinos son magníficos. Ojalá pudiesen haberte conocido... Pero no te preocupes, ya me encargo yo de que sepan que el pequeño de los Salvatore era más guapo que su padre. — La joven ríe ligeramente, entre lágrimas.

Nueve años atrás le había hecho la promesa de que cada año, en el día de su aniversario de bodas, iría a visitarle al cementerio, mientras que al día siguiente, en el día del aniversario de su muerte, iría a comer con alguien que hubiese sido importante en la vida del vampiro.

Las horas fueron pasando mientras Caroline ponía al día a Stefan. Para cuando quiso darse cuenta, ya se había hecho de noche. Suspiró profundamente y comenzó a recoger. Una vez estaba lista para regresar, se acercó a la edificación y apoyó la mano contra la piedra, sin poder reprimir las lágrimas.

— No sabes cuánto te sigo extrañando cada día, Stefan. Pero soy feliz. La escuela y mi familia lo han conseguido. — Caroline llevó su mano al anillo de compromiso que lucía en su mano desde hacía poco más de un mes y recorrió con sus dedos la "K" que estaba grabada en este. — Las niñas le quieren mucho. Y yo también. Ha sido un gran apoyo para mí. También te extraña aunque no lo admita. ¿Sabes? Estamos planeando una boda en junio.

Tras esas palabras, la joven notó como alguien la abrazaba por detrás. Se giró y le dedicó una leve sonrisa a su prometido, quien limpió las lágrimas de su rostro con el dorso de su mano.

— ¿Estás lista, amor? — Caroline asintió y entrelazó sus dedos con los de él.

— Vámonos a casa, Klaus.

y... ¿fin? | multifandom one shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora