cuatro - multicouple [tw]

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veintidós de mayo de dos mil diecinueve;

Melissa le dedicó una cálida sonrisa a su hijo a través del espejo, al tiempo que este colocaba la cola de su vestido.

— Estás preciosa, mamá. — El alfa besó la cabeza de su madre sin poder evitar que una lágrima se deslizase por su mejilla.

— ¡Tío Scott, Allison me ha deshecho la pajarita! — Un pequeño castaño de ojos azules tiró del pantalón del mayor.

— ¡Alli! — el moreno reprimió a su hija antes de girarse en busca del padre del pequeño.

— Liam, arregla la pajarita de tu hijo, ¿quieres?

El joven le miró con los ojos como platos.

— Pero, pero, yo no sé hacer eso... ¡Theo, necesito que me ayudes con Brett!

La quimera, que se encontraba en el piso de abajo, subió corriendo las escaleras.

— ¿Pasa algo? ¿Qué tiene? — Rastreó el cuarto con preocupación al tiempo que entraba por la puerta.

— ¡Papá! — El niño se lanzó en brazos de Theo riendo — Es que Alli me ha desatado la pajarita. — Brett hizo un pequeño mohín.

— Liam Dunbar Raeken, dime que no me has dado ese susto solo por una pajarita. —El beta imitó el gesto del niño, ante lo que su marido no pudo evitar reír — No sé qué he visto en ti.

Simultáneamente, en la habitación de al lado, Stiles se peleaba con su propia pajarita.

— ¡Maldito chisme del demonio! ¡Estoy seguro de que estas cosas las trajo Theo desde el infierno! — Se quitó la prenda y la lanzó a la pared, desesperado, ante lo que Lydia se levantó para recogerla — Espera, no te agaches. — El joven depositó su mano sobre el prominente vientre de la pelirroja.

— Stiles, llevo a tu bebé en la tripa, no una bomba — Rodó los ojos divertida al tiempo que colocaba la pajarita alrededor de su cuello.

— Nuestro bebé. — Corrigió Derek, que entraba por la puerta con la pequeña Allison en brazos.

— ¡Pero si está aquí mi sobrina favorita! — El castaño comenzó a hacer muecas a la niña, quien reía a carcajadas.

Mientras que en el piso de arriba todo el mundo bromeaba y sonreía, abajo la situación era totalmente distinta.

— ¡Scott, no encuentro los anillos! — Isaac daba vueltas por el salón, buscando en todos los cajones.

— ¡¿Cómo?! — Se oyó gritar a Chris desde la cocina.

— Si no lo mata Argent lo hago yo, lo juro. — Scott corrió escaleras abajo y se dirigió al castaño, quien lo miraba estresado — Isaac, antes te vi meterlos en el bolsillo de tu chaqueta, ¿has mirado ahí? — El alfa desabotonó la americana del contrario para buscar en el interior y sacar la caja de los anillos, rodando los ojos.

— Anda, estaban ahí... ¡Argent, saca la mano de esa pistola que ya los encontré!

— Bueno, los encontré yo. — Corrigió el moreno.

— Si es que eres el mejor. — Isaac sonrió inocentemente antes de inclinarse para besar a su prometido.

— ¡Papás, qué asco! — La pequeña Allison observaba la escena desde los brazos de Derek, quien le tapó los ojos provocando sus risas.

Instantes más tarde, Argent llegó junto a la pareja, dirigiéndose a Isaac.

  — Tienes suerte de que en unos meses vayas a ser mi... ¿Cómo llamas al futuro marido del hijo de tu futura mujer? — Frunció el ceño confundido, ante lo que Scott dio una suave palmada en la espalda.

— Dejémoslo en futuro yerno, será más fácil para todos. Y además así ya no podrás matarme. — Isaac sonrió satisfecho.

Chris rodó los ojos riendo. Se metía con Isaac muy a menudo, pero en realidad no podía imaginar un mejor marido para Scott. Los tres siguieron conversando hasta que se escuchó un fuerte grito en el piso de arriba.

— ¡Mieczyslaw Stilinski, ponte ya la pajarita o te suelto a la banshee! — Malía gruñó enfadada, ante lo que el joven se protegió tras la kitsune.

— ¡Kira, haz el favor de controlar a tu novia!

Noah, que se encontraba en la cocina, rodó los ojos antes de dirigirse hacia las escaleras.

— Iré a salvar a mi hijo o en lugar de una boda terminaremos celebrando un funeral.

Un par de horas más tarde, todos se encontraban ya en el acogedor rincón donde tendría lugar la ceremonia. Theo y Liam jugando con el pequeño Brett; Stiles y Derek hablando y bromeando con Lydia; Malía y Kira besándose dulcemente; la pequeña Alli sentada en el regazo de su padre, junto a quien había un sitio libre para Scott; Jackson y Ethan volvían de los lavabos, no especificaré qué hacían; Noah y Natalie de dedicaban miradas coquetas...

Chris se encontraba de pie junto al altar, temblando de nervios. De repente, una suave música comenzó a sonar. La marcha nupcial. Todos se pusieron en pie y se giraron hacia la puerta, por la que aparecieron Scott y Melissa Mccall, quien pronto se convertiría en Argent. La mujer no podía estar más bella. Todo el mundo la miraba sonriendo ampliamente, salvo su prometido, quien se había quedado boquiabierto.

Durante la ceremonia, no faltaron las lágrimas. Lloró Lydia, quien culpó a las hormonas del embarazo; Stiles, que alegó que tenía alergia a Theo, ante lo que la quimera le propinó un codazo; e incluso Jackson, quien simplemente dijo que era un momento demasiado bonito y le recordaba a su propia boda.

Después de tantas adversidades y contratiempos, por fin había logrado ser felices, permaneciendo siempre unidos, convirtiéndose en una familia de verdad.

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⏰ Última actualización: Feb 27, 2018 ⏰

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