Leyenda Real

Capítulo 8

*Punto de vista de Jess*
Ahora estoy completamente sola en la oficina, me siento la dueña y señora de todo esto - me comienzo a reír - pero esta dueña y señora debe seguir con su trabajo si no quiere tener un super regaño del idiota sexy mañana en la mañana, asi que seguí trabajando, me envolví tanto haciendo los reportes, que no me había percatado de la hora que era, cuando por fin termine los reportes ya eran las 9:40 de la noche, jamas pensé que esos reportes me tomarían tanto tiempo, no seria mala idea quedarme aquí debe de estar haciendo frío afuera. Puse todo los papeles en orden, apagué la computadora recogí mis cosas y salí de la oficina, es buena idea quedarse aquí pero no puedo, vamos Jess que tu cama te espera con los almohadas abiertas, camine el largo pasillo y tome el elevador, al bajar a la recepción vi a Steve, creo que no esperaba verme ahí a esta hora porque se sorprendió al verme
-Niña, aun estas aquí! Yo te hacía en tu casa ya, no defenderías trabajar mucho mira que te me puedes enfermar
-Aun sigo aquí Steve, el flamante Dr. VanEwen me asigno unos reportes para mañana y hasta ahora fue que los pude terminar, ya deberías estar acostumbrado a verme hasta tarde, el siempre hace lo mismo.
- Esto no puede seguir mi niña, volveré hablar con el, tu no puedes estar aquí hasta tarde porque a el le de la gana
-No hable con el Steve porque se que sera mas difícil para mí, yo estoy bien no se preocupe.
- Niña debes abrigarte bien, esta haciendo mucho frío afuera y cuando llegues a tu casa come bien y descansa
-Eso hare Steve, ahora me voy para que no me coja mas tarde, gracias por preocuparse por mí.
-Ok mi niña, le dire a mi esposa que te prepare un rico almuerzo para mañana y yo me encargaré de traértelo
-Gracias Steve, sabe una cosa
-Dime mi niña
-Lo quiero mucho
Le di un abrazo y salí del edificio, el viento rápido impacto mi cara, estaba haciendo mucho frío, camine lo mas rápido que mis piernas podían ir, llegue a mi carro lo abrí y trate de encenderlo pero no hacía nada, - Por favor enciende - dije en voz alta, le di vuelta otra vez a la llave para ver si encendía y nada, le di un puño al guía, al parecer el frío había hecho que se congelara algo del carro, que suerte la mía, saque mi celular y llame a un taxis para que me recogiera frente al edificio, según el despachador llegarían en 5 minutos. Saque mis cosas, cerré el carro y comencé a caminar, cuando de pronto siento unos pasos, eran dos hombres, comence a caminar mas rápido hasta donde hubiera mas luz, abrí mi cartera para buscar el pepper spray que Onyx me había regalado pero no lo veía, tenía muchas cosas en mi cartera, porque nosotras las mujeres guardamos tantas cosas, seguí caminando mientras seguía buscando, los hombres comenzaron a caminar mas rápido, ahí me asuste ya que sabía que venían a molestar o alguna cosa peor. Seguía buscando el dichoso pepper spray pero nada que lo conseguía, llegue al frente del edificio, esperaba que Steve me viera y saliera pero al parecer esta dando una ronda, los hombres ya están mas cerca de mí, uno de ellos dijo algo que no entendí, camine un poco mas cerca de la puerta del edificio pero uno de los hombre se paro frente de mi y bloqueo mi camino entonces dijo
-hola princesita porque estas con tanta prisa y solicita, la noche esta fría
No conteste, realmente estaba aterrada, comencé a buscar en mi mente lo que me había enseñado Onyx para defenderme en caso que se me acercara mas. El mismo hombre miro a su amigo ya que estaba a espaldas mías y le dijo
-Al parecer esta princesita no tiene lengua o no quiere hablar con extraños, al parecer le esta haciendo caso a su papi de que es malo hablar con extraños.
Su amigo comenzó a reírse mientras se acercaba mas a mí
-Princesa dile a mi amigo algo para que sepa que tu hablas.
Los mire a ambos muy enojada, quería hablar pero creo que mi miedo hizo que no saliera nada de mi voz.
-No seas mal educada princesita eso se ve feo de tu parte.
Como podía seguía buscando el maldito pepper spray, volvi a tratar de hablar y esta vez me salió la voz,
-No soy princesita de nadie y por favor se pueden alejar de mí, me están sofocando.
En serio Jess es lo único que se te ocurrió decir, esos tipos no vienen con buenas intenciones y tu dices que te están sofocando, coño defiéndete, tu sabes como hacerlo.
Los hombres comenzaron a reirse y se acercan mas a mí
-la princesita, ya no es mal educada eso es bueno ya sabemos que tienes voz, mira no te haremos daño solo queremos pasarla bien, calentarnos un rato con una princesita como tu, eres diferente a las nativas de aquí y eso nos gusta
El otro hombre que estaba detras de mí me agarro por el hombro, lo hizo de forma brusca buscando hacerme daño yo trate de soltarme
-Suéltame imbecil, que me estas haciendo daño
El otro hombre me toca la cara y se ríe
-Si no quieres que te hagamos daño dejate de mover y dejate llevar
-No me toques la cara y tu imbecil sueltame oh comienzo a gritar
Estoy tratando de forcejear con estos tipos, logro empujar a uno que cae al piso pero el otro que todavia me esta agarrando levanta la mano para darme pero alguien interrumpió
-No te atrevas a tocarla, si lo haces te mueres
Era el, estaba ahí para ayudarme, pero no sabía por donde había aparecido, no lo vi venir pero estaba ahí y me estaba defendiendo, cuando miro su cara, se le veía diferente, parecía estar muy enojado, el tipo que se cayo rápido se levantó y miro a Draven y le dijo
-Mira niñito estupido, no te metas en lo que no te importa, este no es asunto tuyo, buscate a tu propia princesita con la cual follar, porque esta ya es de nosotros ok
Draven se puso mas furioso al escuchar esas palabras, su rostro se transformó completamente, sus puños estaban cerrados muy fuertemente como tratando de aguantarse las ganas de golpearlos o quien sabe que otra cosa estaba pensando
-Para tu información ella si es asunto mío y lo que le pase a ella me interesa para desgracia de ustedes dos, asi que les digo por segunda vez que no la toques, así que deberías de soltarla, no quiero hacerles daño pero si ustedes la vuelven a tocar yo los mato, así que aprovechen esta oportunidad y lárguense ahora
El otro hombre que me tenia agarrada se le quedo mirando a Draven me solto para así poder sacar un arma
-El que se va a ir eres tú imbecil, ya escuchastes a mi amigo tu no estas invitado a nuestra fiesta con este bomboncito, esta es de nosotros porque la vimos primero y para tu información nos la vamos a gozar te guste o no, yo tu me haría de la vista larga, si no quieres un par de plomazo en tu cuerpo, así que lárgate de aquí .
No se porque pero me asuste por Draven, el ha sido un idiota conmigo pero no quiero que le pase nada, no por mí culpa aunque debería dejar que lo golpeen por ser un imbecil porque por su culpa es que estoy aquí en esta situación, si no me hubiera pedido los malditos reportes. Jess pero no puedes dejar que le pase nada, así que abrí mi boca
-Ustedes estan hablando de mi como si  yo fuera propiedad de algunos de ustedes lo cual no soy, asi que dejare algo en claro ni soy princesita porque no vivo en un castillo, no me voy a ir con ustedes dos a ningún lado y no necesito de su ayuda Dr. VanEwen vayase no quiero que por mi culpa le pase algo, porque se que si algo malo pasa usted me va a odiar mas de lo que ya me odia.
Realmente me sorprende lo idiota que me escuche, como si ésos malditos me fueran hacer caso, cuando miro a Draven creyendo que se iría no fue asi, al contrario sus ojos se veían como de un color diferente estaba muy molesto, su mirada era penetrate, sentí miedo de el por primera vez
-Srta.Oxedine usted no tiene ninguna autorización para hablar, ademas yo soy dueño de mis actos y hago lo que a mi me de la gana, así que le quedé claro una cosa, no me iré de aquí hasta que usted este bien. - estaba muy molesto no quitaba la vista de mí, como tratando de decir algo que por supuesto no entendí ademas estoy confundida este hombre es un idiota que me trata mal y me habla mal cuando estamos trabajando y ahora me esta defendiendo, pero se siente bien que me defienda.