Mangle
Tener a Chica en mis brazos era sencillamente lo mejor del mundo, que ella haya dado el "primer paso", aunque no haya sido como yo esperaba. Todo se remontaba a que estábamos conversando amenamente como nunca antes y luego de unos minutos de silencio, un poco incómodos la verdad, Chica de repente me abrazó, susurrando cosas como "no me dejes", "se siente tan vacío dentro de mí", "moriré". No es nada reconfortante que la persona que amas te diga eso, y más cuando sabes a qué se debe y no puedas hacer algo para cambiarlo, o puedas pero la manera queda a años luz. Algo así para que Chica se enamore de mí y pueda dejar de lado a la molestia de Toy Chica
Sé que lo que pienso respecto al tema está mal pero sinceramente a mi punto de vista ellas no son compatibles, todo el daño que se hacen es insensato. No sé si está bien lo que estoy haciendo, empujar a Chica a que esté conmigo cuando posiblemente su relación con Shia no haya terminado
Finalmente Chica me sacó de mis cavilaciones insanas y miró al suelo con ojos triste, odio que esos luceros violetas no estén con ese aire firme y determinado. Hace mucho que tenía la dicha de verlos en su estado natural, me gustaría verlos a como eran antes pero Chica ha pasado por mucho últimamente como para que eso sucediese, se estaba derrumbando internamente
Mangle: Oye... –Hablé suavemente pero ella me detuvo inconscientemente al instante
Chica: La extraño... –Habló como si de un suspiro se tratase, un doliente y moribundo suspiro, y lo único que podía hacer alguien como yo para ella, era consolarla y decirle que todo se iba a arreglar, aunque temiendo que eso sucediese
La abracé un rato más hasta que pude notar que tenía los ojos cansados, víctimas de un gravísimo cansancio. Poniendo mi brazo detrás de los hombros de Chica, la llevé hacia su habitación. Ella estaba demasiado ocupada restregándose la vista que ni siquiera notó que habíamos llegado, así que yo abrí la puerta y la recosté en su propia cama y yo me senté en la orilla de ésta
Chica: Gracias, siempre has sido muy buena conmigo... aunque no sepa por qué –Habló con la poca energía que le quedaba. Esas palabras realmente me tocaron, era increíble que a pesar de todas las señales que le di, de todo lo que hice por ella aún no lo entienda
Hay un límite para la inocencia, Chica, lo tuyo es inseguridad en ti misma. Realmente no podía creerlo, debí haberme visto como una idiota a los ojos de alguien más, intentando que ella se fije en mí cuando le gusta alguien más
Me levanté de su cama al cerciorarme de que se haya dormido completamente y me dirigí a la puerta, salí y lo primero que hice fue quedarme viendo a la nada sin ningún pensamiento concreto en realidad, no hasta que escuché como me llamaban
Mangle: ¿Qué quieres? –Pregunté tajante cuando puse mi atención en ella, pero no toda. Lo que ella dice siempre me entró por un oído me salió por el otro. No la odiaba pero sí le guardaba rencor por cómo me marginaba con los otros, ella era la más insoportable cuando se trataba de mí y de molestarme. Me sorprende la paciencia que tengo
Bonbon: Tranquila, linda –No podía sentirme más asqueada –Sólo quiero que hablemos, ven conmigo –Su tono juguetón no se fue en ningún momento, como siempre a pesar de que le hablaba a la persona que en un tiempo pasado pisoteó. Empezó a caminar y yo sin mucha gana la seguí
Su andar era tan tranquilo y lento que me provocaba querer empujarla y decirle que a donde sea que quería llevarme, lo hiciera más rápido y no a paso de tortuga, pero me contuve, no quería iniciar una discusión sin antes saber a qué se debía la dichosa charla
Bonbon: Listo, –¡Por fin! –Aquí nadie nos interrumpirá, o siquiera escuchará –Mencionó con orgullo. No me da buena espina esto. Se volteó a verme con una sonrisa ladina denotando satisfacción
Mangle: Vuelvo a preguntar, ¿Qué quieres? –Dije mostrando seriedad. Si no comenzaba a hablar ya, iba a golpearla
Bonbon: No creas que no he notado cómo intentas cortejar a la gallina, muchos aquí no se han enterado para tu suerte, no sé qué tienen en la vista como para no notarlo –Habló con esa sorna tan característica de ella y a la vez tan molesta. Ya me imaginaba qué curso iba a tomar la charla
Mangle: Sí. ¿Y? No creo que sea de tu incumbencia, después de todo tú estás colada por la otra "gallina" –Dije lanzándole el apodo que aparentemente se convirtió en otra muletilla para referirse a Chica
Bonbon: No le digas así –Dijo seria de repente. Hipócrita –Bueno, a lo que iba, estaba pensado que podríamos unir fuerzas
Mangle: ¿Qué? –Atiné a decir por el fugaz shock. Creo que sabía a qué se refería
Bonbon: Dah, ¿No te arreglaron bien los cables o qué? Que nos ayudemos mutuamente para destruir esa relación, nos conviene a ambas. Tú obtendrás el amor de esa pájara entrometida y yo el de mi amada Shia –Explicó con toda la calma y descaro del mundo
Dios, sí. Sabía que se refería a esto, no podía estar más mal de la cabeza ésta mujer, y encima acarrearme a mí a su locura, no estoy desesperada como para aceptar eso y tampoco soy una pérfida para atacar de esa manera una relación
Mangle: No voy a enrollarme contigo y tus raros planes. Además, no puedo creer lo interesada que eres, me pasabas por encima todo el tiempo y ahora que cambié, quieres sacar provecho de eso –Escupí con hastío todo lo que pensaba, todo lo que en un pasado me guardé
Bonbon:–Puso una mueca de desagradado al escuchar la verdad –Claro, esa pata te cambió. Sorprendente, pasaste de ser una cobarde a alguien con lo que se podría llamar carácter. Estás igual de mal que Shia, tratando de agradarles a una mocosa que literalmente, no tiene vida
Mangle: Sí, ella ha hizo más de lo que tú pudiste haber hecho en toda una vida. No conseguirás nada hundiéndola a tu nivel porque tuvo más valor que tú –Solté un puñal directo a su orgullo, cada palabras más dolorosa que la otra –Aparte, ella me mostró que lo que personas como tú me digan no tiene que tener repercusión en mis acciones. Qué mal que no hayas podido aprovecharte antes de que eso sucediera, ¿No? –Me sentía tan bien de serle sarcástica por lo menos una vez
Su cara de indignación no tenía precio, por primera vez me sentía la reina en éste lugar. Poder darle su merecido a alguien que selo tenía buscado desde hace tiempo.
Se le notaba colérica, abría y cerraba la boca con expresión violenta como intentando soltar la palabrería que quería lanzarme pero sin hallar las frases correctas para ofenderme, y eso no hacía más que levantar mi casi inexistente ego. Relajó sus facciones cerrando brevemente los ojos y volvió a mirarme ésta vez "relajada" y con su típica sonrisita, pura fachada nomásBonbon: Yo no necesito ventaja para obtener lo que deseo, si no quieres ayudarme pues bien, peor para ti, habrías podido conseguir el amor de la inútil polla sin manos –Lanzó sin vergüenza alguna, como si antes no hubiese estado con la palabra en la boca porque no se le ocurría ninguna mierda en forma de palabra que tirarme
Mangle: No tengo por qué seguir escuchándote, ya quedó claro que no te voy a ayudar. Suerte siendo una saboteadora –Dije indiferente haciendo media vuelta y dando un fugaz saludo con la mano
Toy Bonnie
¿Quién se creía que era esa zorra? –En el mal sentido–. Sólo por tener ese cuerpo de una cualquiera se cree con el derecho de dirigirse así a mí como si fuese la puta ama y se las supiese todas, me molesta. Pero lo que esa cría no sabía era que sí o sí la acarrearía a mis planes, ella es parte fundamental en todo lo que tenía para hacer
Yo no pienso renunciar a Shia, ha sido mi todo desde que la conocí, y dudo que Mangle se vaya a dar por vencida con la pata, si no es que claro, le daba un ataque de inseguridad en sí misma, como es de esperarse en una niñata como ella, pero como yo soy tan bondadosa le ayudaré desde las sombras y a causa de eso ella me estará ayudando inconscientemente
Pronto estarás comiendo de la palma de mi mano, Mangle, y me lo agradecerás
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Huehuehuehuehuehue ok no
AAHHH no saben las ganas que tengo de terminar éste fanfic, pero por desgracia mía hay muchas cosas que todavía quiero agregar para estar contenta
Publicado: 08/02/18
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Del odio al amor hay un solo paso [Chicacest] [Toy Chica x Chica]
FanfictionAmy Rodney era una niña normal como todas, cabello rubio y ojos azules. Ella tenía muy buenos amigos, los cuales eran Frederick Robbins, Brian Harmon, Alex Sullivan y Lance Glover Un día, todos ellos disfrutaban del alegre cumpleaños n°8 de la...