seeing blue | 파란색으로 보아라 » ☾myg

〄 둘 - ¿amigos?

Nunca en su vida había deseado tanto poder ver toda la gama de colores en su total esplendor.

El azul que tanto se había esmerado en encontrar le pertenecía a un chico de facciones finas sentado al fondo de la cafetería, el cual comía acompañado de un chico de hombros anchos y...

¿NamJoon?

¿Qué hacía el inútil de su hermano con ese chico?

Sabía que el de hombros anchos era SeokJin, el amigo de su hermano que prácticamente vivía metido en su casa, pero, quién era el de cabellos color cielo?
El chico debía ser nuevo, nunca lo había visto y NamJoon no era de muchas amistades que digamos, al igual que ella.

Decidió pensar en eso más tarde y concentrarse en el ahora... en observar a ese desconocido.

Por lo que parecía, era de tez pálida, y podía asegurarlo porque la gama de blancos y negros era mucho más oscura en la piel de su hermano que en la de él. El blanco y gris se hacían mucho más presentes en su tez.

Ojos oscuros y unos labios delgados, en un hormonal arrebato se preguntó cómo sería su sonrisa, tenía pinta de ser una persona seria por lo que alcanzaba a ver. Una sonrisa ladeada de labios cerrados fue lo más próximo a lo en verdad esperaba. No iba a negarlo, era... extraño; tenía muchas preguntas, como: ¿Por qué se habrá teñido el pelo así?, ¿De dónde provenía?, ¿Qué razón habrá tenido para venir a esta universidad?, ¿Mostraría alguna vez sus dientes en una perfecta sonrisa?, ¿Por qué se juntaba con el tonto de su hermano y el rarito de SeokJin?...

¿Por qué no podía dejar de mirarlo?

Tenía todas esas preguntas que por un segundo pensó en responder con Nam, a excepción de la última, pero que descartó la posibilidad en un segundo por miedo a que su interés por él se viese expuesto. Tenía las orejas perforadas y se le veían jodidamente bien, unos jeans rasgados que logró ver por debajo de la mesa, una camisa blanca y una chaqueta negra con unos detalles en blanco.

No quiso pensar en que tal vez su ropa era de colores distintos que ella no podía ver.

Se conformaba con la ilusión de que su ropa era en verdad tal cual y como ella lo distinguía, no se arruinaría a sí misma su momento feliz.

Aclaró su mente reclamándose por las estupideces que estaba pensando, era solo un alumno más... con cabellera poco común, pero un chico a fin de cuentas; que fuera tan intrigante no significaba que fuese especial o algo por el estilo, no?

— Como tu único amigo al menos deberías hacer un esfuerzo por mantenerme a tu lado, me lo haces difícil si no me escuchas.

Salió de su ensoñación al escuchar a su amigo.

— Ah?

Rodó los ojos.

— Sigo sin entender qué tanto miras, no creo que mirar un basurero sea tan entretenido. —rió para sí mismo de su propia broma— A menos que sientas una conexión íntima con él.

¿Qué mierda?

Cuando Hoseok empezó nuevamente a hablar, por instinto su mente volvió a desconectarse y sus ojos volver a donde miraban con tanto anhelo. Lo único que logró escuchar de su amigo fueron sus últimas palabras, ahora sí pudo su total atención en él.

¿Conexión íntima con él? Solo lo observaba por su ruda apariencia y claramente por su llamativa cabellera, era imposible sentir algún tipo de conexión si no sabía ni su nombre, el tipo tampoco era muy lindo y... su amigo estaba hablando del maldito basurero.

Se sonrojó sintiéndose estúpida al ver lo rápido que trabajaba su imaginación y lo fantasiosa que podía llegar a ser. Claro que Hobi no se refería a aquel chico, ni siquiera había reparado en su existencia y anteriormente le había preguntado si era ese basurero a lo que ella se refería cuando dijo si podía distinguir esa "cosa" azul.

Se obligó a despabilarse, recuperando la temperatura normal en sus mejillas y levantó la mirada que no sabía que hasta ese momento mantenía gacha.

— Me superas, mejor ya vámonos. —comenzó a levantarse.

— ¿Me estás jodiendo? Apenas tocaste tu comida, no le vendí mi dignidad a esa mujer para que no comieras nada.

— Solo vamos a comer a otra parte, exagerado.

Tomo la bandeja con una mano y levantándose por fin tomó el sándwich y le dio una gran mordida. Su huida de la cafetería coincidió con la de su hermano y su grupito, los cuales lograron toparse con ellos justo a la salida. Rogó por pasar desapercibida y poder comer en paz.

— Hermanita de mi corazón ! — Sus planes de fueron a la mierda. NamJoon se acercó a ellos, "junto con sus mascotas" pensó.

-Hey ! -Soltó con el tono de júbilo más falso que pudo encontrar. — NamJoonie- oppa... eh, hola.

Hoseok a sus espaldas miraba divertido la escena, y pudo sentir dos miradas más aparte de la de su hermano sobre ella, una cálida y conocida y otra fría como el hielo.

— Hola Kyung, tiempo sin verte. —Jin la envolvió en un abrazo con cuidado de no botar la bandeja de sus manos.

— ¿Es una broma? Vives prácticamente en mi casa. —rió; pudo observar como él y su hermano se sonrojaban. Rompiendo el abrazo, armándose de valor y sin perder más tiempo, dirigió su mirada al ser restante, el cual no tenía el agrado de conocer. NamJoon se dio cuenta de esto último y en un intento de borrar su sonrojo y la incomodidad de hace unos segundos, introdujo al peliazul.

— Hermanita, te presento a Min Yoongi, es nuevo en la universidad — "lindo nombre" pensó. Se acercó un poco más a él.

— Hola.— sonrió.

Él asintió en forma de saludo, privándola de conocer su voz, tenía una mirada espeluznante, como de lobo que acecha a su presa... o de asesino con sed de sangre.

— Bueno, solo venía a avisarte que los chicos irán hoy a casa, por si querías invitar a Jung para no sentir tanta testosterona cerca.

El nombrado que se mantuvo al margen de la conversación, levantó su mirada con sorpresa al escuchar lo último.

— Soy hombre también, sabías?

Sin más su hermano les regaló una risa, robó un sándwich de la bandeja y se marchó con sus amigos a su siguiente clase, no sin que antes Yoongi le regalara también una mirada un poco más cálida, pero igual de fría.

— Yo soy lo bastante masculino, no sé de qué habla.

Salió de su trance por esos ojos ónix girando rápidamente su cabeza— Lo único que tienes de masculino es el...

— Yah !

Y entre risas y juegos, terminaron guardando la comida en sus bolsos y yendo al gran salón para la clase de danza.

"Con que Min Yoongi es su nombre"