BAJO LUCES

Que aún te quiero,es un sobrante de palabras. En mis actos, todo ha sido para tu devoción, sin importar que quedara un atisbo de amor en ti.

Que si te quise,es obvio que no.

Yo te adoré.

Como una santa; como un milagro. Cómo lo único válido de mi espiral descendente. Me apegué a las palabras "Te amé ayer,te amor hoy,te amaré siempre".
Orándolas una y otra vez hasta enloquecer, y luego repitiendo hasta la cordura recuperar.

Que si te quise, es obvio que no; que si te amé, lógicamente tampoco; lo mío sobrepasó la adoración. No creo que exista palabra que defina todo lo que yo siento y he sido por tí.
Locura, es lo más cercano.

No me importa si no me recuerdas, después de toda una vida, es normal que estés cansada. Tu cabeza se cansó de figurarme, pero tu corazón aún reacciona a mi voz y eso es suficiente para quedarme ésta vez hasta lo último de tí.

Quiero ver el amanecer sobre tu pecho y hundirme en el mar de tus labios, una y otra vez.
Quiero ser egoísta por una vez y tenerte en lo más hondo de lo que soy. Te mostraré todo, incluso mi oscuridad, mi cara fea y te prometo protegerte de mí.

Ya estoy lo suficientemente equilibrado para darte todo lo que antes quise y no pude.

No me importa el precio, era necesario. Ni siquiera me importa que no me recuerdes, era un riesgo.
Pero prometo enamorarte hasta la última partícula de tí.

Porque creo en tus palabras, aquellas que tengo como un mantra.

"Te amé ayer,te amo hoy, te amaré siempre... incluso cuando yo no esté".